Silvana es obligada a casarse con Carlos sin saber qué él es el padre biológico de sus dos hijos. Silvana se enamora de él, y lucha por sus dos hijos.
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Un beso
Después de que Carlos subió a su habitación. Encendió las luces. La idea de que Silvana estaba actuando extraño no se borró de su cabeza.
Volvió a ver el reloj en su mano. Habían pasado tres minutos desde que la dejó sola. Se sintió inquieto, en más que trataba de borrar de su mente cualquier cosa que lo hiciera dudar de ella, no podía.
Se dio la vuelta y fue a tomar la laptop, que estaba encima de un mueble. El control de todas las cámaras que había en la mansión, estaban en ese dispositivo.
Enseguida, buscó a Silvana a través de las cámaras de seguridad, esperaba que todavía estuviera sentada en la sala, leyendo el libro.
Cuando vio que salió de la sala y se dirigió al pasillo de empleados, Carlos sintió que algo andaba mal. Ella me había mentido descaradamente, y solo esperó que subiera a su habitación, para ir a verse con alguien.
Siguió a su esposa hasta que entró al cuarto de limpieza. Carlos sintió una fuerte rabia al pensar que Silvana ya tiene un amante a sus espaldas.
Creyó que Silvana lo estaba engañando, aunque solo ha vivido un día ahí. Había demasiados empleados masculinos trabajando para él.
Se dio cuenta de como llamó la atención de inmediata de Javier. Inmediatamente, puso toda su atención en las cámaras del interior del cuarto, también las del pasillo.
En momento en que vio entrar a la nueva empleada con los niños, Carlos ni siquiera parpadeo ni una sola vez.
Ver a Silvana abrazar con tanto amor y ternura a la niña, y luego al niño. Dejó a Carlos atónito.
_______ Mis hermosos bebés. No saben cuánto, mamá los a extrañado.
Al escuchar esas palabras. La mente de Carlos se quedó en blanco. Recordó lo sucedido en el hotel, y que no había usado protección.
La idea de que los dos hijos de Silvana fueran de él, se apoderó de su cabeza y corazón. Una ligera línea apareció entre sus labios, sus manos se apretaron con fuerza contra la laptop.
______ ¿Podrá ser cierto?
______ ¿Por qué nunca lo supe?
______ ¿Soy padre de dos hermosos niños?
Carlos dejó la laptop en el sillón, y caminó de un lado para otro con emoción. Luego de controlar cualquier sentimiento, volvió a escuchar toda la conversación de Silvana y Estefanía.
Por lo que Carlos entendió. Los hijos de Silvana estaban registrados con hijos de la hermana gemela de su mujer. Sería casi imposible que Silvana demostrará que era la madre biológica.
Carlos también escuchó todo lo que Gerardo le había hecho a Silvana durante años. La manera tan cruel en que la fue humillada desde que quedó huérfana, y todo lo que su hermana Lorena ha inventado en su contra.
Los puños del hombre se apretaron con fuerza. Quería matar con sus propias manos al infeliz del abuelo de Silvana.
Ahora entendía porque ella se había vuelto una mujer tan fría. No era para menos después de todo lo que había sufrido en manos de su abuelo y hermana.
Al terminar de escuchar todo. Carlos se levantó del sillón y fue a bañarse con agua helada. Solamente, de esa manera podía controlar sus emociones, y no decirle a Silvana que sabía la verdad.
Silvana tardó en regresar a la habitación. Se tuvo que esforzar demasiado, para que Carlos no se diera cuenta de nada.
Por suerte para ella, cuando entró a la recámara, Carlos ya estaba dormido. Sin hacer nada de ruido, Silvana se cambió y se desmaquilló, luego fue a la cama.
A la mañana siguiente. Carlos se levantó muy temprano. La ropa que usaría esa mañana, ya estaba escogida y sobre el sofá. Antes de ir a la cama, Silvana se había encargado de arreglar el traje de su esposo.
El hombre se sintió feliz de tener una esposa tan observadora. Solo bastó un día, para que Silvana se diera cuenta de la manera en que viste, y cuál es el mejor traje.
Carlos fue a darse una ducha. Silvana abrió los ojos, y oyó el agua caer. Enseguida, se dio cuenta de que su esposo estaba en la ducha.
Se levantó de la cama. Se puso la bata de seda, y salió de la recámara. Al bajar las escaleras se dirigió a la cocina. Más o menos, Carlos tardaría media hora, en cambiarse y arreglarse, tiempo suficiente para hacerle un desayuno delicioso.
_____ Buenos días, señora. ¿Se le ofrece algo? ____ Preguntó la cocinera.
_______ Buenos días. Me puedes decir qué es lo que desayuno el señor.
______ El señor Armendáriz, no desayuna en la mansión. Hay una empresa de comidas que le envía todas las mañanas, un desayuno saludable a su oficina.
Silvana levantó una de sus cejas. ¿Por qué? Carlos tiraba tanto dinero en contratar una empresa de comida, si tenía tantos empleados a su disposición.
_______ Creo que eso va a cambiar. De ahora en adelante, seré yo quien le venda la comida al señor. _____ Comentó Silvana.
La cocinera no entendió, lo que Silvana quiso decir. Tampoco intervino ya que era la señora. Al poco tiempo; la chica preparó un delicioso desayuno saludable, y lo llevó a la habitación.
Terminando de cambiarse, Carlos volteó hacia atrás, cuando escuchó la puerta abrirse.
______ Buenos días, ¿A dónde fuiste tan temprano?
Silvana entró hasta el centro de la recámara. Dejó la bandeja que llevaba en la mesa, y contestó.
_____ ¿Por qué pagas una fortuna en contratar una empresa de comida, si tienes tantos empleados a tu disposición?
Carlos acomodaba su corbata, en el momento en que volteó a ver a su esposa. Como buena esposa, Silvana se acercó a él, y le ayudó acomodar el nudo de la corbata.
_____ No tengo tiempo para desayunar en casa. El trabajo en la empresa me sorbe mucho tiempo... A penas tengo tiempo de salir y llegar a tiempo a la empresa...
______ Eres el dueño de esa empresa tan enorme. Deberías tomarte el tiempo de desayunar y de pasar tiempo con tu familia.
Al escuchar esas palabras; Carlos colocó sus dedos en la barbilla de Silvana. Sus miradas se cruzaron, logrando despertar demasiados sentimientos dentro del corazón de Carlos.
Lentamente, fue acercando sus labios a los de su esposa. Silvana no se resistió a besar a Carlos. Al unirse sus labios, explotó algo maravilloso dentro de ambos.