Valeria Ibarra es una chica de 19 años a punto de graduarce como medico veterinario. En una visita a su tía se entera del oscuro secreto de su origen y el culpable de la muerte de su madre. El interés que mueve a su padre no tendrá límites.
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17- Cosas que sorprenden
(Me levanto y me voy al trabajo, tenemos hoy un día ocupado visitando granjas incluida la de Javier ya la vi en mis notas, fueron vacunas revisiones al ganado y también a los animalitos domésticos. Estamos llegando a su granja y está la nana afuera esperándonos).
--Hola hermosa... Cuando mi Javi me dijo que vendrías no lo podía creer que fueras tú la que viniera a revisar todo por aquí.
--Si, El señor Carlos me está dejando hacer más cosas por mi cuenta y es fantástico, algo cansado, pero fantástico porque me encanta este trabajo y... ¿Javier?.
--Oh! Linda anoche fue una noche muy mala para él y...
--¿Qué pasó?.
--Clementina murió anoche.
--No puede ser y él... ¿Cómo está?.
--Mal, fue a enterrarla en el prado favorito de sus padres y aún no llega.
--Entonces empezaré en lo que él llega.
--Si muy bien Mauricio te dirá por donde comenzar.
--Si, gracias nana por decírmelo.
--Solo te prevengo por si él... Anda de malas o lo vez apachurrado.
--Sí.
(Comienzo con lo mío esperando a que llegue, él sabía que vendría hoy, pero no llega y le marco, pero está apagado su teléfono y probablemente él quiera estar solo al menos por ahora, esa yegua era lo más cercano al recuerdo de sus padres así que le daré su espacio)
--Hola.
--¿Ya terminaste?.
--Si y no puedo quedarme a esperarlo más tiempo.
--Si, lo entiendo.
--¿Ya viste que esa no está?
--Es verdad... Ella ¿Ya se fue?.
--Si hace como una semana.
(Es cuando paso lo del comandante y todo eso, a lo mejor él le dijo a su hijita para que dejara en paz a Javier... Que bueno, me da mucho gusto de que ella ya no esté aquí).
--Que bueno por fin está libre de malas vibras por aquí.
--Si, se respira mucho mejor desde que ella se fue y Javi por fin duerme en su cuarto. No sabes lo que tenía que hacer para evadirla... Ella era muy persistente y varias veces lo perseguía desnuda por la casa, menos mal que Jessica no estaba si no se infarta de verla así y aparte era una borracha siempre estaba bebiendo. Varias veces se tuvo que quedar en su camioneta y se encerraba para que ella no lo alcanzará.
--El no me comento nada de eso.
--Él es muy orgulloso y reservado para hablar
--Si lo he notado.
--Él tarda en confiar en las personas pues ha pasado por mucho él solo y solo es cuestión de esperar a que él se habrá contigo y veraz que vale la pena, él es muy bueno y no lo digo por qué lo vi nacer y crecer, él en realidad es bueno y se preocupa mucho por su gente y... No sé si puedas venir más tarde para que estés a su lado ahora que él necesita con quien hablar.
--Si, yo veré que puedo hacer... Gracias por recibirme.
--Hará luego linda cuídate.
(Pobre de Javier está es una perdida igual o más grande que cuando perdió a sus padres y trataré de apoyarlo si me deja. Regreso al trabajo y el señor Carlos me está esperando).
--Hola señorita no he recibido más que felicitaciones por tu trabajo sigue así y no sé... Tal vez todo esto sea tuyo algún día.
--No lo sé, no creo, yo pienso irme a la ciudad a trabajar, ya sabe la cantidad de rebajo es mucha y yo apenas estoy empezando.
--Quien sabe podrías tener una sorpresa esperándote...
--Hey Carlos ya vámonos.
(Ella le dedica una mirada matadora de esas que te tienes que mover porque si no habrá problemas).
--¿Todo... Bien?.
--Si linda ya nos tenemos que ir... ¿Cierras?
--Sí.
--Mi esposa tiene hambre y se pone muy gruñona cuando tiene hambre así que mejor nos vamos hasta mañana.
--Hasta mañana... (Me dejo pensando con eso de la sorpresa, si estoy aquí haciendo mis prácticas no es para quedarme, sino para regresar a ala ciudad, esto es demasiado para mí, es lindo poder hacer mis cosas aquí, pero no quiero quedarme aquí. Cierro y cada quien se va a su casa. Le sigo marcando a Javier y no me contesta ya pasan de las diez de la noche y no creo que sea conveniente ir a visitarlo).
--Hola niña tienes una visita.
(Javier vino a verme y corro a la sala y no es Javier).
--Hola Marcos.
--Hola Valeria... Hoy te estuvimos esperando en el hospital.
--Si, lo siento hoy me fue imposible ir a ver a mi tía, tal vez pueda ir mañana.
--Ella se quedó esperando a que fueras.
(Para que tanta urgencia, es más yo no creo indispensable para mí ir, o seré mala persona si no voy, pero es que ella se portó mal conmigo a pesar de lo que estaba pasando, digo algún día me puede pasar a mí, pero no justifica lo que me hizo)
--Si, yo no sé a qué hora pueda ir, pero hablaré con mi jefe y después iré sí.
--Ok, gracias por aceptar ir a verla porque ella lo único que hace es preguntar por ti.
--Ok.
(Momento incómodo donde nadie habla ni tiene nada más que decir)
--Gustas un chocolate caliente muchacho.
--No, no gracias señora ya me tengo que ir, pero gracias.
(Sale como bala, disparado por la puerta).
--Que raro fue eso.
--Si y que bueno que entro cahyito y me salvo porque yo ya no tenía nada más que decirle y seguramente él tampoco, llego en muy buen momento para ayudarnos.
--Con gusto... Fue mi impresión o tú esperabas ver a alguien más aquí.
--Si la verdad esperaba que Javier estuviera aquí, pero no.
--Que decepción.
--La verdad sí.
--Hola hija ¿Qué tal tu día?.
--Perfecto... Solo que el señor Carlos me insinuó algo que me dejo pensando.
--¿Qué te dijo?.
--Que tal vez me herede la clínica.
--¿Y tú que piensas al respecto?.
--No, yo no quiero quedarme aquí, yo quiero regresar a Texas y ya estando haya poner mi clínica y listo.
--¿Quieres irte a vivir a Texas?.
--Si, abuelito haya es donde crecí y conozco muy bien la ciudad, aparte si me quedo aquí es mucho trabajo para mí, el señor Carlos piensa retirarse y no quiero quedarme con todo el trabajo.
--Ok, és válido tu argumento.
--A veces se me olvida que alguna vez fuiste juez abuelito.
--Vamos a cenar.
--¿Abuelo te enojaría si salgo?
--¿No mucho si me dices a donde vas y por qué?
--Bueno... A Javier le pasa algo y quisiera ir a verlo.
--¿Ya lo llamaste?
--Si y no me contesta.
--Tal vez sea mejor que no vayas.
--Se que me necesita abuelo.
--Si, lo sé, pero si no te contesta es porque quiere estar solo y no quiere ver a nadie.
--Pero tal vez a mí sí.
--¿Cómo lo sabes?.
--No lo sé, pero si yo estuviera pasa do por algo así, yo querría que él me hiciera compañía.
--Bueno, pero yo te acompaño... Estas horas no son adecuadas para que andes tu sola.
--Pero abuelo tú...
--¿Yo que?.
--Me vas a acompañar hasta su casa.
--Sí que tiene de malo.
--Bueno él se puede sentir incómodo con tu presencia.
--Si, pero no me bajaré de la camíoneta... Yo te voy a esperar y, ya que creas conveniente nos regresamos.
--Ok, Entonces vamos.
(Voy algo nerviosa de que es lo que voy a encontrar porque él no ha contestado mis llamadas y me imagino que las de nadie).
--Tranquila si, todo estará bien y si él solo quiere estar solo, nos regresamos y ya está.
--Si, gracias abuelo que bueno que viniste conmigo.
(Sale la nana de Javier y ella se ve triste).
--Entra yo te espero aquí.
(Me bajo y voy a donde está ella).
--El se encerró en el despacho y no quiere salir.
--¿Crees que quiere verme?.
--Puede ser que si, porque esta mu triste y creo que está bebiendo.
--Ok haya voy.
(Espero y quiera verme para darle ánimos por lo menos. Toco a la puerta y no sé escucha nada de ruido, vuelvo a tocar).
--No quiero ver a nadie.
(Se escucha que aventó algo y se rompió cuando pego en la pared).
--¿Ni a mi Javier? ¿Puedo irme si quieres?.
(Se escucha algo de ruido y después abre la puerta).
--Hola.
--No quiero ver a nadie y no quiero que tú me veas así... Así que por favor vete.
--¿Estás bien?.
--Si, por favor vete.
--Está bien.
(Camino a la salida y escucho como sierra la puerta detrás de mí).
--Lo siento mucho.
--Le dejo mi número si lo ve que empeora o sale de ahí llámeme por favor.
--Si linda yo te llamaré.
--Gracias.
(Salgo y mi abuelo está esperándome ahí sentado en el volante y doy gracias al cielo porque no me siento con ganas de manejar de regreso a casa, me subo).
--¿Lista?.
--Si vamos.
--¿Todo bien?.
--Sí.
--Muy bien nos vamos a casa entonces... Y ¿Vas a ir a ver a tu tía?.
--Creo que sí, le pediré permiso al señor Carlos mañana y veré que puedo hacer.
--¿Quieres que te acompañe a eso también?
--No sé
----No quiero que ella se atreva a ponerte la mano encima de nuevo.
--Mi primo dijo que ya estaba controlada.
--Aun así... Quiero acompañarte por lo menos al estacionamiento.
--Si, gracias abuelito eres lo mejor en estos momentos.
--Lo sé.
...
No puede dejar su vida por otro por mucho amor. Pueden halar la carreta juntos pero no uno detrás del otro . Ella nunca aceptaría que dejaras algo tan importante por ella