Kim ha reencarnado en la villana Dasha y ahora deberá hacer lo posible por evitar su tráfico final.
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capítulo 17- ¿que pasa?
Zaria había llegado de visita a la mansión, pues sabe que el padre de Dasha a estado ausente, incluso su mamá le dijo que debe ir, pues podría sentirse sola al no tener a nadie más, pero al llegar se encontró con la sorpresa de que Viktor estaba viviendo en esa casa y también ahí estaba Patrick, así que saludo rápidamente a Viktor y a Dasha, para ir con Patrick, aunque se disculpa con él, porque no llevo más que unas galletas pero fueron para Dasha.
- no se preocupe señorita, no había manera de que supiera que estaba aquí.
- b-bueno, en eso tiene razón, pero la próxima, traeré algunas para usted.
- se lo agradezco señorita, con gusto las recibiré, usted cocina muy bien.
- ¿de verdad le gusta mi comida? T-tal ves si tiene tiempo, puedo invitarlo a comer a mi casa...
- ¿No sería mucha molestia? No quiero causarle inconvenientes a su familia.
- no pasa nada, adelante, sea libre de ir cuando guste.
Ambos continúan hablando, ignorando totalmente que Dasha y Viktor siguen presentes, pero Dasha puede notar, el desinterés de Viktor hacía Zaria y viceversa, porque Zaria tampoco le presta atención.
- creo que ellos estarán así un rato, iré a la sala.
- e-espere...iré con usted ¿le gustan las galletas?
Dasha le muestra las galletas que Zaria llevó.
- no mucho, pero se lo agradezco.
Viktor tomo solo una, mientras que Dasha va comiendo hasta llegar a la sala donde ya les han servido algo de té caliente. Poco después entra Zaria, saludando a Viktor con una reverencia para después tomar asiento, aunque estaba avergonzada.
- lamento eso, fue emocionante ver a Lord Patrick en la casa.
- así que siguen llevándose bien, me alegro por usted, señorita Zaria.
- hemos hecho buena amistad, solo espero que a su alteza no le moleste que ocupe algo del tiempo de Lord Patrick.
- para nada, siempre y cuando sea en su tiempo libre, porque recuerdo que la última vez tuvo que dejarme todo para llevarla a su casa.
- lord Patrick es un caballero y no iba a rechazar que ÉL, se ofreciera a llevarme.
Por supuesto que resalto un poco, pues fue el mismo Patrick quien dijo llevarla, pero tal parece que eso, le ha molestado al príncipe.
- si, porque usted estaba ahí, lloriqueando porque era tarde.
- pues lo era, se nos fue el tiempo platicando, así que era peligroso ir sola.
- lleve una doncella o un guardia la próxima vez.
Zaria y Viktor continuaron echándose en cara sus molestias, mientras que Dasha escucha todo algo confundida y era obvio que esos dos no se llevan bien, incluso Zaria no teme hablarle de manera descortés a Viktor y este, no parece prestar atención a eso, no cabe duda que ya nada es como estaba escrito en la novela. Más tarde Viktor se ha ido, así que Dasha y Zaria platican tranquilamente, debido a todo lo que pasa, Dasha no ha acudido a las fiestas de té, por lo que Zaria no duda en ponerla al día; más tarde ambas se despiden y Patrick se ofrece a llevarla a su casa, pues era tarde, Viktor por su parte había estado en su alcoba, pues aunque apenas sea menor, trata de encargarse de algunos asuntos que le corresponden, Dasha decide ir a verlo, tocando antes de entrar.
- Patrick ha llevado a la señorita Zaria a casa.
- parece que el interés en mutuo. Que pésimo gusto tiene Patrick.
- no diga eso, la señorita Zaria es linda y agradable.
- para mi no lo es, pero, usted se lleva bien con ella, así que lo dejo pasar.
- usted es demasiado serio, también.
Dasha pasa a sentarse a su lado, ya que Viktor estaba en un sofá y leía una pila de documentos, Dasha toma uno, pero no entiende mucho sobre ello.
- ¿como no se aburre de esto?
- es aburrido pero debo hacerlo, usted también deberá hacer algo similar, por eso preste atención en sus clases.
- si, si, pero aún falta mucho, quiero disfrutar lo que me queda de niñez.
Viktor no puede evitar reír por las palabras de Dasha, no esperaba que fuese se esa manera, pues cuando la conoció era una chica mucho más sería, aún así, no pudo evitar sentirse atraído a ella. Dasha le hace un puchero por reírse, pero sabe que solo es porque dice cosas sin sentido.