Me Convertí En El Sustituto Del Amado Del Protagonista De La Novela

después de abofetearlo Luca se alejó un poco de mí, me miró con ternura y Luego dijo:

-lo siento Pierre, no me pude contener, sé que actúe mal, juro que no lo haré nuevamente a menos que tú me des tu permiso.

Aun con la disculpa que parecía sincera mi enojo no sé disipó, furioso lo saqué de mi casa empujándolo, en cuanto cerré la puerta que en ese momento de mi vida estaba muy confundido y aunque ya llevaba un poco más de un año en aquel mundo todo lo que me había sucedido había sido abrupto, ya que de ser una mujer que no podía tener hijos pase a ser un hombre que hizo un trato con un reverendo idiota que además me embarazo, mientras iba hacia mi habitación pensé <<¿qué demonios sucede con este mundo?, ¿a caso no puede alguien vivir solo tranquilamente?, porque tengo la mala suerte de encontrarme con psicópatas y enamoradizos?, yo no deseo intentar abrir mi corazón a un hombre, ya que las experiencias que he tenido en mis dos vidas me han enseñado que nadie es confiable, puesto que uno me dejo en cuanto supo que era infértil y el otro era un sádico que solo me veía como un sustituto, por eso mi confianza en los hombres es poca, además de eso mi situación ahora es única y aún no me he adaptado a mi nuevo yo y ya estoy por ser padre o madre, no sé bien como será la expresión correcta, pero no me importa, lo único que tengo claro es que no me falta mucho para dar a luz y que me escape de un loco que puede decidir entre, dejarme en paz, vivir su vida pacíficamente con el amor de su vida y olvidarse de los últimos meses o buscarme, encontrarme y vengarse haciendo que mi vida y la vida de quienes me rodean sea miserable, luego de pensar en todo ello supe que el aceptar el cariño o amor de Luca no era una opción, ya que mi vida la que ahora era libre y armoniosa podía cambiar en cualquier momento y si eso sucedía tenía que volver a escapar, por eso para mí era mejor no tener pareja, puesto que no quería involucrar a nadie más en ese asunto, luego de estar un buen rato pensando en lo que había sucedido, decidí irme a dormir, ya que estaba realmente exhausto.

Al día siguiente muy temprano en la mañana me desperté, me aseé y fui al gallinero recogí los huevos y después ordené la vaca cuando terminé apenas eran las 6:30 de la mañana, mientras estaba preparando el desayuno llegó Luca tocó la puerta y aun afuera dijo:

- Pierre hoy como todos los días quise ayudarte con las tareas del hogar, pero en cuanto fue al gallinero me di cuenta de que ya no estaban los huevos además a simple vista me di cuenta de que ya habían ordeñado la vaca y aunque estoy de acuerdo en que hagas las cosas por ti mismo aun así me preocupa, ya que estás en embarazo y puede ser peligroso para ti hacer todas esas tareas por ti mismo.

Yo no le quise dar respuesta, ya que aún seguía enojado así que agarré con fuerza mi libreta y regresé a mi habitación me recosté con cuidado, ya que me dolían mucho los pies y las piernas y sin siquiera darme cuenta me dormí, en cuanto me desperté seguí con mi rutina.

Al día siguiente Luca volvió a mi casa y eso me enojó y exaspero, así que furioso tome mi libreta y allí escribí:

-déjame en paz, no quiero verte.

Luego lo pase por debajo de la puerta ya que no quería verlo.

Luca al leerlo con tristeza me dijo:

- Pierre sé que hice mal, pero por favor perdóname solo seguí mi instinto y es que realmente me gustas aunque sé que lo que, pero no está bien fue la única manera de demostrarte mi sentir, pero se que no lo hice de la manera correcta y te incomode, por eso te pido una disculpa, pero no me arrepiento.

En cuanto lo escuché me enojé aún más, así que me fui de regreso a mi habitación, yo sabía que era estúpido mi actuar, pero aun así lo hice, ya que no era mi lógica la que me guiaba, si no mis sentimientos los cuales eran primitivos y la ira a cada rato se apoderaba de mi.

Los días siguieron pasando y Luca seguía yendo a casa, pero yo no le daba respuesta alguna cuando me hablaba,hasta que un día mientras iba con la comida recién preparada hacía la mesa me resbale, caí con fuerza en el suelo y seguido a eso un dolor punzante y agonizante recorrió mi abdomen, luego comencé a sangrar, al ver eso me preocupé y me llene de panico ya que no quería que le pasara nada a mis amados bebés, así que intenté levantarme para conseguir ayuda, pero el dolor me lo impidió así que no teniendo de otra tuve que arrastrarme, mientras lo hacia rogaba que no le pasara nada a mis niños.