IRONÍA DEL DESTINO.

Rara

_ no tengo palabras para decirte, por el rechazo, pero si puedo hablar sobre ti. Eres fuerte Mare, fuiste capaz de soportar el rechazo de tu compañero y sobreviví. no eres débil. Dejaste tu manada y a pesar del dolor que me imagino que viviste, tuviste la capacidad de salir adelante y construirte una nueva vida. Eres fuerte y si tu compañero no pudo verlo, que mal por él. Fue él, el que perdió y aún más su manada, su manada será más débil. Si te unes a mi manada, siempre estaremos ahí para ti. Nosotros hemos pasado por lo mismo que tú, dejamos nuestra manada de origen, para buscar una mejor vida. también sufrimos y muchas veces lloramos. Pero ¿sabes que fue lo que nos mantuvo fuerte? Compartir la carga. Creamos un vínculo fuerte y nos cuidamos entre sí. Somos una gran familia y no usamos la violencia para someter a nuestros miembros. Desde que te vi por primera vez, sabía que encajarías en mi manada. Provienes de una familia beta y se que aprendiste cosas. Ninguno de los cargos superiores, tiene experiencia, ni siquiera yo como Alfa. tú podrías ayudarnos pero no te voy a poner a elegir. Sigamos con el plan y hablemos mañana

Mire a Fernando

_ ¿no estás molesto? ¿no vas a correrme? _ pregunté confundida.

_ ¿por que lo haría? solo teníamos unas cuantas horas de conocernos, no esperaba que me contarás toda tu vida. Ahora, me honra que me hayas tenido confianza. _ me dijo y yo asentí

_ entonces, nos acoplamos a lo planeado _ le dije y le sonreí

_ Ana Marely _ dije y él me miro extraño

_ ese es mi nombre. _ sonrío y le sonreí

Ana Marely _ dijo y se escuchó bien viniendo de él

Horas más tardes estábamos todos sentados alrededor de la hoguera. Los cachorros jugaban y corrían en los alrededores, mientras que todos los demás, escuchábamos las historias que contaban los ancianos. Me reí al ver cuánta similitud había con mi antigua manada. después, volví a mis antiguas costumbres. Me puse a ayudar, pasando pequeñas colchas para que los demás se sintieran cómodos, para terminar ofrecíendome a cuidar a los cachorros. Melina frunció el ceño.

_ ¿por qué no te unes a los demás? Me pregunto. Al parecer, Fernando no les había dicho a nadie hacerca de mi condición

_ no tengo un lobo _ le respondí, esperando que su actitud cambiará y me despreciara, en vez de eso, Melina pego una carcajada.

_ ¿hablas en serio? _ pregunto

_ tía ¿cuidado con tus palabras? _ hablo Fernando

_ sí _ le respondí

_ cariño, ¿por qué piensas eso? A kilómetros puedo sentir a tu loba _ me dijo

_ no, tal vez puedes sentir mi naturaleza, después de todo, mis padres son lobos. además, tengo 22 años y no me he transformado, tal vez mi loba es débil y por esa razón, no quiere manifestarse _ le expliqué

_ eso es una reverenda estupidez ¿por qué tendrías una loba débil?

_ todos sabemos que una loba fuerte, se manifiesta en los primeros años, a partir de los 15 años. Entre más tarde se manifieste, más débil es, si no que imposible que se manifieste _ para este punto, ya estaba un poco molesta. Nunca me imaginé estar defendiendo mi punto.

_ es verdad que las lobas más fuertes se manifiestan a temprana edad, pero ¿quién te dijo que una loba fuerte, no se puede dar su tiempo para salir? No sabemos porque, pero podría ser que no se han dado las condiciones adecuadas para que ella se manifieste o el lugar, no sabemos. Mare, llevamos un día de conocernos y puedo jurar que no hay nada de débil en ti. Tu persona como tal, manifiesta lo fuerte que eres. Escucha muy bien mis palabras y no las tomes a mal. Ella se manifestará _ dijo Melina

_ basta tía, _ dijo Fernando, mirándome con preocupación. El sabía que mis esperanzas ya se habían resignado y darme falsas esperanzas a este punto de mi vida, no era buena idea.

_ bien _ dijo Melina sin seguir tocando el tema.

La conversación cambio y poco tiempo después, me encontraba rodeada de cachorros. Caleb estaba encantado a mi lado. Les estaba contando las historias que mi madre me había contado alguna vez, mientras comían algunas botanas que sus padres habían preparado con antelación.

Un rato más tarde, Fernando se puso de pie y aulló a la luna. La luna estaba en su punto más alto, reflejando su brillo en el lago, dándonos una hermosa vista de ella.

_ es hora de correr _ dijo Fernando, mientras se despojaba de la ropa y se transformaba. Todos hicieron lo mismo.

Un momentos antes de esto, el ya me había preguntado si estaría bien, a lo que su tía le respondió por mí.

_ la acompañaré y le ayudaré a cuidar de los cachorros _ fue su contestación.

Una vez transformado, corrió en dirección del bosque y detrás de él, el resto de la manada.

Dos horas más tarde, la mayoría de los cachorros estaban durmiendo, principalmente los más pequeños. El resto, seguían jugando y corriendo al rededor de la hoguera.

_ eres buena con los cachorros _ me dijo Melina y me sonrió

_ tengo experiencia _ le respondí

_ como no me transformo, me quedaba al cuidado de los cachorros, en mi antigua manada _ le dije.

empezaba a sentir mucho calor así que me aleje un poco del fuego.

_ ¿cuántos años tenías cuando abandonaste tu manada _ me pregunto. Mire alrededor, para corroborar que ningún cachorro estuviera cerca para escuchar mi respuesta.

_ a los 18, fui rechazada por mi compañero. _ le dije y ella se sorprendió

_ ¿y aún así dudas de tu fuerza? Estoy segura que encontrarás tu camino y que la diosa luna te pondrá en el lugar correcto, con un compañero merecedor _ me dijo y yo asentí

_ ¿el fuego está muy fuerte? _ pregunté mientras me quitaba el suéter y me quedaba en una ligera camiseta.

_ ¿te sientes caliente? _ pregunto rápidamente

_ sí y también un poco rara _ le dije

_ ¿hace cuánto te sientes así? _ pregunto rápidamente

_ mmm no sé, creo que desde que llegué aquí, pero ahora es diferente. Siento como si me faltará algo. Al menos en los últimos 30 minutos _ le expliqué. Ella me estudio con la mirada y después asintió

_ relájate, estarás bien, solo no luches _ me dijo y no entendi

_ ¿luchar con que? _ pregunté confundida.

Fernando salió de una fila de árboles, ya en su forma humana. Solo traía puesto unos pantalones cortos. ¿porque regreso tan pronto? Al estar frente a mí, se agacho y coloco su mano en mi frente.

_ ¡estás ardiendo! _ dijo y observo a su tía, quién solo asintió

_ los demás ya están regresando _ dijo y yo me sorprendí

_ ¿por qué? _ pregunté.

••••♥

¿Que le estará pasando a Marely?.

Chan, chan, chan