** Saga Vannecelli **
Rachel Fiore es la mano derecha de Leandro Zanella, jefe de una de las ramas más importantes de la organización italiana. Desde que él la rescató a ella y a su hermana de la calle cuando solo tenía 14 años, ha estado perdidamente enamorada de él. Sin embargo, su temor al rechazo la ha llevado a ocultar este secreto durante seis años. Actualmente, la organización está siendo amenazada por los FGN, lo que obliga a Rachel a viajar a la capital para reunirse con el líder de la organización en busca de su apoyo. sin tener conocimiento de que se cruzaría con un hombre que transformaría por completo su vida.
NovelToon tiene autorización de Daniella cantillo para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 15 No soy un objeto sexual
Rachel fiore
...****************...
-Nuestros besos comienzan a volverse más apasionados. Ambos nos recostamos en la cama, y se posiciona encima de mí mientras me besa, dirigiéndose a mi cuello y acariciando mi cabello. De mi garganta escapa un pequeño gemido ahogado. Él asciende con besos desde mi cuello hasta mi oreja y, con una voz grave, me susurra- Me encanta, mi fiera. Cuánto deseo hacerte mía.
-Me besa mientras su mano toca mi cadera. Luego, pasa por mi abdomen, subiendo y arrastrando mi blusa hacia arriba, hasta llegar a mi seno, donde lo acaricia. Siento mi cuerpo caliente, mi zona palpita, sus ojos están deleitados, mi corazón parece que va a salir de mi pecho. Siento su amigo; él hace movimientos con su cadera, y lo siento más cerca. Lo veo bajar hasta mis pechos mientras le da un pequeño beso.
Yo paso mi lengua por mis labios mientras veo cómo coloca de lado mi sostén y pone mi seno en su boca, comenzando a succionarlo, lo que me hace sentir una fuerte excitación. Mientras tanto, su mano me baja la cremallera de mi pantalón, facilitando que su mano llegue a mi zona. Empieza a tocarme mientras yo tapo mi boca con mis manos para no hacer ningún ruido. Siento tantas cosas; esto se siente delicioso.
Él se aleja un poco y comienza a quitarme el pantalón mientras yo lo observo. Se posiciona, deja mi panty a un lado y veo cómo se acerca y comienza a pasar su lengua por mi zona. Comienza a jugar con su lengua, y siento una oleada que me hace moverme. Intento tapar mi boca, me arde la cara, siento mucho placer. Él se acerca a mí, me quita las manos de la boca y me dice-Por favor, déjame escuchar tus gemidos, esa melodía es música para mis oídos.
- Regresa a mi zona y comienza a jugar con ella, mientras yo solo puedo gemir hasta que no aguanto más. Siento cómo exploto en un orgasmo tan placentero; estoy tan emocionada, nunca imaginé que esto podría ser tan exquisito. Veo cómo él me observa, acaricia mi cuerpo y luego saborea sus dedos. Se acerca a mi rostro y me besa con desesperación. En medio de los besos, le susurro- Hazme tuya.
- Él se aleja un momento y me pregunta- ¿Estás segura?
- Yo me muerdo el labio y respondo- Sí.
-Él me besa y, a continuación, me dice- Te haré mía, pero primero debes aceptar ser mi novia, Rachel. De lo contrario, no podré hacerlo. No soy un hombre a quien traten como un objeto sexual; busco una relación seria contigo.
-Me pregunto si realmente está hablando en serio. ¿No quiere que lo trate como un objeto sexual? Sonrío ante su comentario y le respondo- Está bien, seremos novios.
-Él me sonríe, me besa nuevamente y se aleja un momento para quitarse la camisa. A medida que se agacha, comienza a quitarse los pantalones, yo hago lo mismo y pronto ambos estamos desnudos. Mientras lo observo, me doy cuenta de que su amigo tiene un tamaño considerable. Siento un nudo en la garganta, me preocupa que pueda lastimarme. Él se acerca, me besa con ternura y poco a poco comienza a apasionarse. De repente, escuchamos un golpe en la puerta, lo que provoca descontento en el rostro de Gian. Yo giro y pregunto- ¿Quién es?
- Escucho la voz de Leandro que dice- Soy yo, abre la puerta, necesito hablar contigo.
- Miro a Gian, quien parece molesto, y me dice- Qué fastidioso. No le prestes atención y sigamos.
-Él comienza a besarme el cuello y le digo en voz baja-Espera un momento, podría ser importante. ¿Podríamos hablar más tarde? Es que en este momento estoy ocupada.
-Él responde- Es urgente, Rachel.
-Le contesté- Ya voy.
- Al observar nuevamente que está molesto, le digo, mientras acaricio su mejilla- Lo siento, pero debo atenderlo.
- Lo veo suspirar y se aferra a mí, recostándose en la cama mientras yo me levanto. Me Cambio rápidamente y lo miro recostado, con un brazo detrás de la cabeza, mirándome con tanta tranquilidad. Él me pregunta- ¿Por qué me miras así?
- Yo le hago una expresión y con un gesto le indico que se levante. Le digo-¿Qué estás esperando? Toma tus cosas y escóndete en el baño. No puede verte.
- Alza una ceja y me dice-¿Por qué no? No tengo por qué ocultarme, soy tu novio, así que no voy a hacerlo.
- Le respondo- Por favor, Gian, escóndete en el baño. Aún no debe saberlo, y menos de esta manera. Por favor.
- Él rueda los ojos, toma sus cosas y me dice- No voy a seguir escondiéndome, Rachel.
-Me besa en los labios y se dirige al baño. Paso mi mano por mi cabello, abro la puerta y veo a Leandro, quien me pregunta-¿Por qué tardaste tanto en abrir?
- Yo le respondí- Estaba saliendo del baño, ¿qué sucedió?
- Él me indicó- Llamaron de la escuela. Parece que tu hermana tuvo una pelea con una compañera y necesitan nuestra presencia. Intenté llamarte, pero no contestaste.
- ¿Mi hermana en una pelea? No puede ser, ella es una niña tranquila. Cerré la puerta, tomé mi bolso y salí rápidamente con Leandro. -