UN MATRIMONIO POR ACUERDO

Después de firmar el divorcio y recibir la compensación económica, Aile se sintió libre para vivir su vida como le diera la gana, pasaron los días y ella disfrutaba con su hijo, un hijo que le traía buenos recuerdos, Nicolasa dejó de trabajar para los padres de Daiser, sintió que era lo mejor, y más porque su hija se lo había pedido, aunque iban a seguir compartiendo con ellos.

Aile se sintió agradecida de tener a su madre con ella, con ella era con quien podía compartir sus alegrías y tristezas, Aile, su madre e hijo se tenían el uno al otro, Nicolasa le dijo que siempre la iba apoyar y amar incondicionalmente sin importar lo que sucediera.

Aile disfrutaba de su faceta como madre y Nicolasa como abuela, ella quería disfrutar de su hijo al máximo, porque estaba dispuesta a buscar empleo y ejercer su profesión, quería ganar su propio dinero, Aile se sentó en su habitación, mirando el dinero que había recibido como compensación. Aunque era una cantidad significativa, Aile no quería gastarla sin pensar, quería trabajar y ganar su propio dinero para mantenerse a sí misma, a su madre y a su hijo.

Cuando él niño tenía cuatro meses ella comenzó a buscar trabajo, se puso en contacto con algunas empresas y se presentó a algunas entrevistas. Al principio, no tuvo suerte, pero no se rindió. Siguió buscando y finalmente encontró un trabajo en una pequeña tienda de ropa.

Aile se sintió emocionada y aliviada al obtener el trabajo. Sabía que no sería fácil, pero estaba dispuesta a trabajar duro para mantenerse, le gustaba la sensación de ser capaz de sacar a su familia adelante, antes lo hacía, pero tenía un nuevo integrante que era su vida.

A medida que pasaban las semanas, Aile se sintió más segura y confiada. Sabía que había tomado la decisión correcta al buscar trabajo y al no depender de la compensación de Daiser. Se sentía orgullosa de sí misma y de su capacidad para mantenerse a sí misma y a su hijo.

En Ecuador Estefan había salido del hospital, ese mismo dia fue a su empresa y se encargó del trabajo que fue a hacer, ese mismo día regresó a Colombia, lo primero que hizo después de salir del aeropuerto fue ir a casa de Aile, pero se encontró con la noticia de que se habían mudado, ningún vecino le daba razón de su nueva vivienda, nadie sabia nada, Estefan se fue para su casa decepcionado, no podía creer su mala suerte, lo peor era que solo se habían ido un día antes, que si llega un día antes con suerte se encuentra con el trasteo.

Daiser y Soriani compartían en familia, la madre de el estaba feliz porque sabía que su hijo lo era y lo veía en su mirada, estaba apoyando a su hijo en su nuevo comienzo.

Estefan también comenzaría de nuevo, tenía que buscar a Aile, ese mismo día fue en la noche a la discoteca donde la había conocido para ver si contaba con suerte de encontrarla, el no perdía la fe, Estefan se detuvo frente a la discoteca, recordando la noche en que había conocido a Aile. Habían pasado un año y más desde entonces, y aunque no tenia noticias de ella, no había perdido la fe de encontrarla de nuevo.

Tomó una respiración profunda y entró a la discoteca, la música era fuerte y la luz era cegadora, pero Estefan no se dejó intimidar; se abrió paso a través de la multitud y se dirigió al bar, pidió un trago y se sentó en un taburete, mirando a su alrededor. La discoteca estaba llena, se iba a hacer difícil encontrarla.

Mientras el la buscaba en la discoteca, ella estaba en su casa cuidando de su hijo y pensando 💭 ¿que será de la vida de tu padre? ¿Se acordara de mi como yo lo hago con él?

Estefan la busco como pudo, al no poder por la multitud se dio por vencido, se sentó a tomar un trago más para irse, pero antes se dio cuenta de las cámaras que estaban de frente, el habló con el hombre que lo estaba atendiendo y le ofreció mucho dinero para que le mostrará las grabaciones del día que conoció a Aile, el hombre habló con el administrador y el aceptó ayudar, quería ver las imágenes para ver si ellos la conocían y lo ayudaban a dar con su paradero, cuando iba a cancelar la cuenta se acercó una mujer, la mujer le preguntó ¿si estaba solo? Él la miró y le contestó que si, pero que ya se iba. Se levantó y salió sin mirar atrás, salió lo más rápido que pudo que a la mujer no le dio tiempo de nada.

Después de dos meses hubo recorte de personal en la tienda de ropa, y entre ellos quedó Aile porque era de la más nueva en el trabajo, Aile se sintió devastada cuando recibió la noticia de que había sido despedida debido al recorte de personal en la tienda de ropa. Había trabajado duro durante dos meses para demostrar su capacidad había empezado a sentirse cómoda en su nuevo trabajo, pero eso no le sirvio de nada, la habían despedido sin importar el esfuerzo que ella hizo en el lugar.

Había aprendido las rutinas y los procedimientos de la tienda, y había desarrollado una buena relación con sus colegas y clientes. Aile había sido una empleada modelo, siempre dispuesta a ayudar y a aprender, había trabajado horas extras cuando era necesario, y había demostrado una gran dedicación y compromiso con su trabajo, pero aun asi eso no contó para nada.

Aile respiró profundamente y se dijo a sí misma que iba a superar eso, iba a encontrar un nuevo trabajo, y a seguir adelante con su vida, iba a buscar un nuevo trabajo y a seguir adelante sin importar lo difícil que pareciera.

Lo que Aile no sabía era que un hombre más millonario que Daiser la estaba buscando con desesperación, mas porque tenia la duda si habia quedado embarazada, Aile estaba completamente ajena a la búsqueda desesperada que estaba llevando a cabo un hombre extremadamente rico y poderoso. Estefan era un empresario exitoso que había construido su imperio a través de inversiones astutas y negocios lucrativos. En diferentes partes del mundo era conocido por su estilo de vida lujoso y su afición por las cosas más finas de la vida.