María, una niña que no se sentía feliz con su vida, experimentó un cambio radical al salvar a su amiguita. Su vida dio un giro inesperado, dejándola atrás para convertirse en una intrépida aventurera. En su nuevo camino, conoció a amigos que la apoyaron y enemigos que le pusieron obstáculos. Su querido maestro también jugó un papel importante en su transformación. ¿Podrá Shiner alcanzar sus metas en esta nueva vida llena de desafíos?
NovelToon tiene autorización de Mayerli Gutiérrez para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Emperatriz
Alguien detrás de ella murmuró: "¿Cómo puede ser que alguien como tú esté en este prestigioso lugar? ¿Acaso te colaste?". Shiner reconoció la voz de la señorita que le quería quitar a Make. No sabía qué decir y cuando estaba a punto de responder, alguien la defendió: "Señorita Prita, usted no tiene ningún derecho de decir esas cosas. Eso es una acusación muy falsa. Si no lo nota, ella tiene la invitación en la mano". La señorita se fue furiosa.
Shiner se disculpó con la persona que la había defendido, pero ella le dijo: "No tienes que disculparte, señorita. Déjame presentarme, yo soy Cecilia, última hija del Tercer Duque, y es un gusto para mí compartir mi tiempo contigo" "y debes disculpar a esa noble se cree mucho solo porque es le hija del Márquez ,Prita pero bueno ella no importa"
—Yo también debería presentarme, yo soy Shiner y es un gusto para mí hablar contigo —respondió Shiner.
—Señorita Shiner, quisiera que te sentaras en mi mesa en esta fiesta de té —propuso Cecilia.
—Señorita Cecilia, no quiero molestarte con mi presencia —dijo Shiner.
—No es una molestia, es un honor para mí poder compartir mi mesa contigo. Por favor, toma asiento —insistió Cecilia.
—Muchas gracias, hermana Cecilia —agradeció Shiner.
—No, gracias a ti por estar en mi mesa. Bueno, señorita Shiner, ¿y a ti cómo te va en estos momentos? —preguntó Cecilia.
La señorita Cecilia Rivera entabló una larga conversación con Shiner mientras disfrutaban de la fiesta de té. De repente, se escucharon unos gritos: "¡Qué te pasa, estúpida criada? ¿Acaso no sabes con quién estás hablando?".
Shiner se enojó y defendió a la criada: "No es culpa de ella, simplemente son errores que todo ser humano comete. Y no por eso tienen el derecho de tratarla así".
"¡Y tú por qué te metes? ¿Quién te llamó? Este asunto es entre esa estúpida criada y yo. ¿Acaso no sabes quién soy?" —gritó la persona.
—No sé quién eres ni me importa. Lo único que quiero es que dejen de tratar mal a la criada —respondió Shiner con firmeza.
Shiner ayudó a la criada a pararse y a recoger todos los platos. Luego, la ayudó a llevar todo de vuelta a la cocina. La criada le agradeció y le preguntó si podía hacer algo para compensarla. Shiner le dijo que estaba bien, que solo quería ayudarla, y se fue.
Cuando regresó a la mesa, anunciaron que la Emperatriz Enilek ya iba a llegar. Todas las presentes se pusieron muy felices y empezaron a hacer planes para hacerse amigas de la Emperatriz.
Después de tantas cosas que sucedieron, un mayordomo anunció: "Por favor, todas las señoritas, den la bienvenida a la Emperatriz Enilek". Todas se separaron y empezaron a dar la bienvenida a la Emperatriz. Al verla, empezaron a susurrar sobre lo joven que se veía. Luego, la Emperatriz se sentó en una mesa muy elegante, exclusivamente para ella, y dijo:
—Gracias a todas por asistir a mi fiesta de té desde el principio. Ahora le pediré a mi hermana menor, que está ayudando en la cocina, que se presente.
Cuando salió la hermana menor de la Emperatriz, todas se sorprendieron al ver que era la criada que estaban tratando mal.
La hermana menor de la Emperatriz se acercó a ella y empezó a susurrarle algo al oído. Todas estaban asustadas y no sabían qué hacer, especialmente las que la habían tratado mal.
Shiner estaba tranquila porque no estaba poniendo atención en nada, solo estaba concentrada en comer.
Después de que la hermana menor de la Emperatriz terminara de hablar con ella, la Emperatriz se paró y se dirigió a la mesa de Shiner. Fue entonces cuando Shiner se dio cuenta de que la criada que había descendido era la hermana menor de la Emperatriz.
Shiner se atragantó con la comida, se paró y se inclinó ante la Emperatriz. Lo único que hacía Cecilia era reírse de la pobre Shiner.
La Emperatriz le dijo que se parara y que fuera con ella a su mesa de té. Las demás estaban susurrando cosas malas hasta que Prita se paró muy enojada de su mesa y empezó a gritar:
—"¿Puede una persona de tan bajo estatus sentarse con usted, Emperatriz? Con todo respeto, Emperatriz, pero usted no debió ni invitarla. ¿Cómo fue que ella pudo llegar hasta acá?"
—Lo siento, señorita Prita, pero ella está aquí porque es parte del equipo de aventureros del señor Ren y la invité porque quería conocerla. Además, a diferencia de usted, ella fue capaz de tratar a mi hermana tal como era, aunque no supiera que era mi hermana. Así que es mejor que se vaya de mi fiesta de té —respondió la Emperatriz con firmeza.
—Pero, Emperatriz, no fue mi intención... —trató de excusarse Prita.
—Vete ahora mismo —ordenó la Emperatriz.
Y Prita se fue. Shiner se sentó junto a la Emperatriz en su mesa de té.
La Emperatriz le empezó a hacer preguntas. Shiner se sintió aliviada porque eran preguntas que sí podía responder, por ejemplo: "¿Cómo conociste a Ren?", "¿Cuántos años tienes?", "¿De dónde eres?", "¿Te trata bien?", etc.
Shiner respondió todas las preguntas y la Emperatriz se sintió segura de ella y empezó a decir:
—Cómo puede ser que tú, una chica tan dulce, pudo ser parte de ese grupo tan salvaje? —preguntó la Emperatriz con curiosidad.
—Jajaja, Emperatriz, ellos son muy amables conmigo y me gusta que me acepten, aunque yo no recuerde mi pasado —respondió Shiner con una sonrisa.
—Shiner, aunque tú ni yo sabemos tu pasado, confío en que eres una buena persona. Así que tienes todo mi apoyo —dijo la Emperatriz con una sonrisa cálida.
—Gracias, Emperatriz —agradeció Shiner.
—Señorita Shiner, ahora que estoy aquí, debo presentarme. Yo soy Katia Taylor —dijo la hermana menor de la Emperatriz
—Taylor —repitió Shiner.
—Sip, Shiner, ese es nuestro apellido. Yo soy Enilek Taylor —confirmó la Emperatriz.
—Muchas gracias, Emperatriz —dijo Shiner.
—No, gracias a ti —respondió la Emperatriz.
—Oye, Shiner, como ya estamos en confianza, te puedo decir "hermana" —propuso Katia.
—Katia, eso es muy descortés —dijo la Emperatriz.
—Pero, hermana, Shiner es muy buena conmigo. Quiero que sea mi hermana también. ¿Sí te puedo decir "hermana Shiner"? —insistió Katia.
—Claro, señorita Katia —aceptó Shiner.
—Bueno, como yo te voy a decir "hermana" a ti, tú no me puedes decir "señorita Katia". En cambio, dime "hermana Katia" —dijo Katia.
—Que bien, tengo una nueva hermana —exclamó Katia con alegría.
—Bueno, señorita Shiner, ya debes volver —dijo la Emperatriz.
—Oh, claro, gracias por todo —dijo Shiner mientras se levantaba.
Pero antes de irse, Katia cogió su mano y le puso un brazalete de jade. Le dijo que no se le olvidara visitarlas en su merced astilla y salió. Al salir, se encontró con Cecilia.
Cecilia le sonrió y se despidió. Le dijo que no se preocupara por el coraje que ya la estaba esperando y volvió a casa.
En lo único que estaba pensando en ese momento era en quitarse el vestido, ya que le incomodaba.
Al llegar, Make se empezó a reír de todo lo que le estaba diciendo, pero la felicitó por crear un lazo con la Emperatriz.
Shiner estaba cansada, así que se fue a dar un baño y se quedó pensando en todo lo que había logrado los últimos meses que ha estado en este nuevo mundo.
*personajes que destacarán en la historia*
Emperatriz Enilek Taylor
Hermana de la Emperatriz
Katia Taylor