El poderoso y despiadado CEO Daemon Rivadeneira, obligado por su familia, lanza un concurso para encontrar una esposa.
Muchas jóvenes de todo el país se suman a esta competencia. Quién ganará el corazón de nuestro despiadado CEO?
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Capítulo 15
Estás son las tres nominadas de la noche. Te pregunto Daemon. Quieres salvar a alguna de estas mujeres para que continúen en la mansion?- preguntó Tony.
Las tres mujeres se veían nerviosas, Estaban tomadas de la mano.
- No Tony, debe haber una razón por la que fueron las más votadas. En esae ocasión no salvaré a ninguna. - dijo Daemon serio.
- Lo lamento chicas. Las tres serán expulsadas de la competencia. - dijo Tony con pena.
Las tres mujeres se soltaron y se fueron caminando hasta la salida, como se les había dicho. De ahí, irían a una última entrevista.
- Está ha sido una nominación y expulsión exitante. De las 17 señoritas que teníamos en la mansión han quedado ahora sólo 14. En sólo una semana ya tenemos menos de la mitad de participantes. Daemon qué piensas al respecto?- preguntó Tony.
- Pienso que las chicas que hay en este momento son las que deben estar. Me la he pasado muy bien en las citas y espero seguirlas conociendo. - contestó Daemon.
- Gracias Daemon y con eso nos despedimos de esta primera expulsión del programa. "Concursando para esposa" . Hasta pronto. - dijo Tony y se despidió ante las cámaras.
- Corte. Muy bien hecho chicas, antes de que vayan a comer algo, por favor pasen a la sala de entrevistas para que nos den su impresión de la nominación.- dijo el director.
Algunas de las mujeres empezaron a rodear a Daemon y le intentaban sacar plática. Nicole estaba hablando con Anne, quien no paraba de decir lo agradecida que estaba de no haber sido nominada esa noche.
Varias de las chicas ya estaban saliendo hacia la entrevista. Nicole también ya iba de salida pero Daemon la llamó de repente .
- Nicole. - Daemon comenzó a caminar hacia ella.
Ella comenzó a dar unos pasos hacia él.
- La semana ya ha pasado, por favor, hay que quitarse la medalla. - dijo Daemon en voz alta. y comenzó a quitarle la medalla a Nicole.
Cuando nadie los estaba viendo, Daemon le dijo en un susurro:
- Hoy a las 10 en el muelle.
Nicole asintió, y se despidió de Daemon. Éste último de nuevo fue rodeado por otras chicas. Nicole fue a dar su entrevista y después a cenar.
Volvió a su habitación de nuevo a cambiarse con ropa cómoda. Quitó todo el maquillaje que le habían aplicado y trenzó su cabello para que no le estorbara. Se acostó un rato en la cama. Esperando que dieran las 10 pm.
Cuando faltaban 10 minutos para la hora acordada. Nicole se levantó de la cama. Acomodó su cabello y comenzó a bajar por las escaleras. Había unas cuantas mujeres en la sala, ellas le preguntaron a dónde iba y ella contestó a dar una vuelta antes de irse a dormir.
Nadie sospechaba que iría a ver a Daemon. Sobre todo por como estaba vestida y sin maquillaje. Llegó al muelle y Daemon ya estaba ahí.
- Necesitamos medios alternativos de comunicación. - dijo Daemon.
- A qué te refieres? - preguntó Nicole intrigada.
- Pues necesitamos alguna seña, que nos comunique que debemos vernos y llegar aquí para hablar a las 10. - dijo Daemon.
- Es buena idea. Por si no podemos acercarnos a decírnoslo, como hoy. - concluyó Nicole.
- Exacto. Estaba pensando en pasar mis dedos por el cabello así cuando tenga que hablar contigo. - dijo Daemon e hizo el movimiento con la mano.
- Yo no podría hacer eso, por algunos peinados que me hacen. Pero podría rascar mi ceja así y sabrías que necesito hablarte. - contestó Nicole, también haciendo el movimiento.
- Perfecto. Te he mandado llamar porque debemos delinear la estrategia de la próxima semana. - dijo Daemon de forma un poco más formal. Como si hablara con uno de sus empleados.
- Por supuesto, qué es lo que tienes en mente? - preguntó Nicole.
- Está semana te sacaré en citas dos veces. Ya no habrá sorteos está semana. Tengo la obligación de salir con todas al menos una vez, pero debo empezar a mostrar más comodidad saliendo contigo que con las otras. Ya sabes queriendo estar más en tu compañía.
- Si, lo entiendo. Así que nuestra primera cita será mañana mismo. Sabes montar a caballo? - preguntó Daemon.
- La verdad es que no. - dijo Nicole apenada.
- No te preocupes, yo te enseño. Te veo mañana después del desayuno para un paseo en caballo.
- Está bien. Entonces por hoy es todo? - preguntó Nicole.
- Si, puedes irte a descansar. - le dijo Daemon.
- Muy bien. Hasta mañana. - Nicole se dió media vuelta y comenzó a alejarse. Daemon se le quedó viendo hasta que la chica se perdió a lo lejos en la oscuridad de la noche.
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Al día siguiente Nicole se levantó temprano y se puso un pantalón de mezclilla y unas botas. Ya estaba advertida que irían a montar a caballo.
Nicole bajó a desayunar. Casi no había mujeres en el comedor ya que era muy temprano. Desayunó fruta, jugo de naranja y avena con miel de abeja.
Ya cuando iba terminando. Llegó una doncella con una carta en mano para Nicole. Las pocas mujeres que estaban ahí se acercaron a Nicole para ver de qué se trataba.
Era la invitación de Daemon para tener una cita esa mañana con él.
- Nicole, que envidia. Serás la primera en salir con él esta semana. Que hicieron la semana pasada? Al parecer Daemon se quedó con buena impresión de ti. - dijo Carolina.
- La semana pasada dimos un paseo en yate. Vimos el atardecer. - contestó Nicole.
- Que romántico. Con razón te recuerda. A mí me tocó una clase de tiro con arco.- dijo Carolina celosa.
- Bueno, creo que debo irme a arreglar para la cita. Buen provecho. - dijo Nicole para dejar de hablar con ella. Se levantó de la mesa y salió del comedor.
Pensaba ir al jardín a caminar pero fue interceptada por Paula.
- Nicole, que bueno verte. Me acaban de avisar que tienes cita dentro de una hora. - dijo Paula.
- Si, me acaba de llegar la carta. - dijo ella mostrando el papel.
- Vamos a cambiarte. - dijo Paula.
- No me veo bien así como estoy?. - preguntó ella.
- Si, pero no del todo. Te traje algo de ropa. -Dijo Paula mostrándole un bolsa.
Ambas subieron a la habitación de Nicole. Y ella se cambió de ropa.
- No entiendo para que quieres que traiga un traje de baño abajo. No dijiste que era montar a caballo? - se quejó Nicole.
- Pero estarán en la playa. Es posible que por alguna razón te mojes. Es sólo precaución. - añadió Paula.
Cuando Nicole se hubo cambiado. Paula la ayudó a hacer un trenza con su largo cabello para que no le estorbara al cabalgar y le puso un poco de maquillaje.
- Te ves hermosa. Sabes?, no es porque me haya tocado a mí ser tu asistente, pero en verdad espero que tú ganes. Tú y Daemon se ven muy bien juntos. Y sus personalidades se complementan. - dijo Paula.
Nicole no podía decirle que casarse con Daemon no estaba en sus planes. Lamentaba pensar que afuera había gente que tal vez esperaba que ella ganara. Así que sólo asintió y agradeció lo que Paula dijo.
- Vamos Nicole o vas a llegar tarde. Te esperan en el jardín. - comentó Paula y Nicole salió corriendo al encuentro con Daemon.