NovelToon NovelToon
Florecer De Las Cenizas

Florecer De Las Cenizas

Status: En proceso
Genre:Autosuperación / Traiciones y engaños / Cambio de Imagen
Popularitas:4.6k
Nilai: 5
nombre de autor: Orne Murino

A veces perderlo todo es la única manera de encontrarse a uno mismo

NovelToon tiene autorización de Orne Murino para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capítulo 14: La Junta y la Sombra del Pasado

El día de la reunión amaneció con un aire distinto. Juliana se levantó más temprano que de costumbre, revisó cada detalle de los documentos y repasó mentalmente los puntos claves de la presentación. La empresa se encontraba en un momento de expansión y la llegada de inversionistas internacionales era la oportunidad que tanto habían esperado ella y Cami.

Cuando los relojes marcaron las diez, la sala de conferencias ya estaba lista. Todo transmitía profesionalismo: la larga mesa de vidrio, las carpetas cuidadosamente preparadas, los vasos de agua alineados como soldados.

Los primeros en llegar fueron Mattia Moretti y su inseparable amigo Alessandro Rossi. Mattia, con su porte imponente y elegancia innata, estrechó la mano de Juliana con un gesto seguro que, sin embargo, escondía una chispa distinta, más personal, como si aquel saludo no fuera solo protocolar. Alessandro, por su parte, irradiaba simpatía natural; su sonrisa franca logró que incluso los empleados más tensos respiraran aliviados.

—Gracias por recibirnos —dijo Mattia, con ese acento italiano que parecía convertir cada palabra en un susurro elegante.

—El agradecimiento es nuestro —respondió Juliana, intentando mantener la compostura, aunque por dentro la presencia de él desarmaba parte de su coraza.

La reunión avanzó con fluidez. Juliana expuso con firmeza las proyecciones de la empresa, Cami aportó datos estratégicos y ambos italianos escuchaban con atención, intercambiando miradas entre ellos. Hubo risas, preguntas inteligentes, y lo que más sorprendió a Juliana: la sensación de ser valorada no solo por lo que decía, sino también por lo que representaba.

Cuando la junta terminó, todos coincidieron en que había sido un éxito. Los acuerdos preliminares quedaron asentados, y tanto Mattia como Alessandro dejaron claro su entusiasmo por seguir adelante.

Cami, siempre observadora, notó la forma en que los ojos de Mattia se detenían en Juliana unos segundos más de lo normal. No comentó nada en voz alta, pero en su mente ya se estaba gestando una sonrisa cómplice.

Fue justo después de despedir a varios asistentes, cuando la sala quedó casi vacía, que la sombra del pasado se coló entre las paredes de la empresa.

Martín apareció sin anunciarse. Nadie lo esperaba allí. Llevaba el traje arrugado, el ceño fruncido y la mirada cargada de un rencor que parecía hervir. Juliana sintió el frío recorrerle la espalda apenas lo vio entrar.

—Necesito hablar con vos —dijo él con una voz seca, sin saludar a nadie.

Juliana intentó mantener la calma.

—No es el momento, Martín. Estoy trabajando.

Él ignoró la advertencia y, cuando todos comenzaron a salir, aprovechó para colarse en su oficina. Cerró la puerta detrás de sí con un golpe seco.

—¿Así que ya me mandaste la solicitud de divorcio? —escupió, acercándose a ella.

—Ya no hay nada más que hablar entre nosotros —respondió Juliana, firme pero con el corazón golpeando en su pecho.

Martín se acercó demasiado rápido. Antes de que ella pudiera reaccionar, la arrinconó contra la pared. Sus manos temblaban, no de debilidad, sino de rabia contenida.

—Si no sos mía, no vas a ser de nadie —dijo con los ojos desorbitados, y en un movimiento brusco le sujetó el cuello.

Juliana intentó apartarlo, pero la fuerza de Martín era superior. La angustia subió como un nudo en su garganta, junto con la desesperación.

En ese mismo instante, al otro lado del pasillo, Mattia y Alessandro conversaban con Cami, intercambiando comentarios sobre los próximos pasos del acuerdo. El ruido de la voz elevada de Martín atravesó la puerta como un trueno. Mattia frunció el ceño, y sin pensarlo dos veces, se dirigió hacia la oficina de Juliana.

—¿Escucharon eso? —preguntó Cami, con los ojos abiertos de preocupación.

Alessandro asintió, ya en alerta.

Mattia empujó la puerta de la oficina justo en el momento en que vio a Martín con las manos en el cuello de Juliana, apretándola contra la pared. La escena fue como un puñetazo directo al pecho.

—¡Soltala ahora mismo! —rugió Mattia, con una voz que hizo retumbar el lugar.

Cami y Alessandro entraron detrás de él. El rostro de Juliana estaba enrojecido, sus ojos llenos de lágrimas contenidas, mientras luchaba por zafarse.

Martín giró la cabeza y vio a los tres entrando. Su gesto se volvió más oscuro aún, pero el miedo también apareció en sus ojos: se había quedado sin control frente a testigos que no iban a dejarlo pasar por alto.

—Esto no es asunto de ustedes —espetó, apretando aún más.

Mattia avanzó un paso, sus músculos tensos como un resorte.

—Sí lo es. Porque ella merece respeto. Y porque no voy a permitir que la lastimes.

El aire en la oficina se volvió denso, como si el tiempo se hubiera detenido. Alessandro se adelantó también, su mirada seria y lista para intervenir. Cami, con la voz quebrada pero decidida, gritó:

—¡Soltala, desgraciado!

La tensión era insoportable, como si todo fuera a estallar en cualquier segundo.

Y justo en ese filo, entre la violencia y la defensa, estaba Juliana, atrapada entre su pasado oscuro y la luz inesperada que acababa de irrumpir en su vida.

1
Maritza Suarez
👍
Lorena Itriago
Martín no estaba preso? no entiendo porque está en su departamento?
Lorena Itriago
tengo una duda Micaela y Camila son la misma persona?
Edith Villamizar
Hola inicio de ésta historia 🌹
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play