Adrian es un joven que sufre de acoso escolar, cansado del maltrato y desprecio de sus compañeros por casualidad encuentra un brujo que le hace un hechizo a sus gafas haciendo que todo aquel que lo vea a los ojos con las gafas puestas se enamore perdidamente de él, un día se topa con el matón de la escuela y él se confiesa ante el pero, ¿será por el hechizo de las gafas o algo más?
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capítulo 12
aun no encuentro una excusa, para ser honesto tengo mucho miedo pensó Adrián,
—tengo sueño—dijo Adrián,
—bien entonces vamos a descansar—se levanta,—de todas maneras mañana tenemos clases,
—no voy a ir a clases—respondió Adrián,
—¿porque no?—pregunto Estéfano,
—porque no me siento seguro por ahora—respondió Adrián,
—bien puedes quedarte conmigo, solo son unas pocas horas—respondió Estéfano,
—creo que seria mejor que me vaya a casa—el se pone nervioso,
—¿porque quieres dejarme?—pregunto Estéfano,
—no quiero dejarte, solo quiero ir a casa—insistió Adrián,
—¡mientes!—lo sujeta del cuello,—¡quieres irte con ese bastardo de zero!,
—¡no es así!—insistió Adrián,
—te quedarás conmigo, no voy a dejarte ir—insistió Estéfano,
Adrián pensó que era mejor no alterar más a Estéfano por su bien, así que se fueron a dormir, en la mañana siguiente pensaría en alguna forma de escapar,
—¡buenos días mi amor!, que lindo es amanecer a tu lado—dijo Estéfano,
¡maldito bastardo!, estar a tu lado es aterrador pensó Adrián,
—si, ten un buen día—dijo Adrián,
golpean la puerta de la habitacion,
—señor tiene visitas—dijo el empleado,
—¿visitas?—pregunto Estéfano,
el va con Adrián para ver quien es,
—¡como te atreves a venir a mi casa!—grito Estéfano,
—vine por Adrián—respondió zero,
Adrián se sorprende de ver a zero,
—¿viniste por mi?—pregunto Adrián, el sentía que nadie nunca se había preocupado tanto por el y se emociona,
—¿porque lloras te hizo algo?—se acerca y ve las marcas que Estéfano le dejo,
—¿que fue lo que hiciste?—pregunto ardiendo en rabia,
—¡estoy bien no te preocupes!—insistió Adrián ya que no quería que peleen,
—¿como te atreviste a poner tus sucias manos sobre el?—le da un golpe en la cara muy fuerte,
ellos comienzan a pelear,
—¡por favor no sigan!—grita Adrián aterrado,
—¡no te entrometas!—llama al personal,
—expulsen a este infeliz de mi casa—ordenó Estéfano,
—¡no voy a irme sin Adrián!—lo sujeta del brazo,
—¡el es mio!—grito Estéfano,
—nunca lo fue y nunca lo será—dijo zero,
los guardespaldas de Estéfano llegaron,
—¡para con esto te lo ruego!—le suplico Adrián a Estéfano,
—entonces dile, dile que eres mio–respondió Estéfano,
—lo soy, solo déjame ir prometo que te llamare pronto—dijo Adrián intentando persuadir a Estéfano,
—besame—el se acerca a Adrián,
Adrián lo besa,
—¿lo ves?, el me prefiere—le dijo a zero,
—si, te prefiero—dijo Adrián para que lo deje ir,
—vete pero si no me llamas iré por ti—lo deja irse con zero,
—gracias por venir a buscarme, no sabía como huir—le dijo Adrián a zero,
—¿es cierto?—le pregunto zero a Adrián,
—¿que?—pregunto Adrián nervioso,
—¿realmente lo prefieres?—pregunto zero,
—solo lo dije para que nos deje ir—respondió Adrián,
—¡mira tu hermoso rostro esta golpeado!, y todo por mi culpa—le acaricia el rostro,
—no es por tu culpa, es por culpa de ese infeliz—respondió zero,
—vamos tenemos que curarte esas heridas—le dijo Adrián a zero,
el lo sujeta de la mano y zero sonríe, Adrián nisiquiera se percata de que lo esta tomando de la mano,
—gracias—dice zero sonriendo,
—¿porque?—pregunto,
Zero levanta la mano y le muestra que lo está sujetando,
—¡lo siento!—lo suelta pero zero vuelve a sujetar su mano,
—no me sueltes—dice y lo sujeta con más fuerza,
—pero nos verán—insistió Adrián,
—eso no me importa, solo quiero estar así contigo que se pudran los demás—respondió zero,
—estos días fueron muy aterradores agradezco que estés conmigo—lo mira con mucha calidez en sus ojos,
—no voy a dejarte solo, por favor tampoco me abandones—dice zero,
—lamento no haberte dicho nada—baja la mirada avergonzado,
—no voy a negarte que me sentí molesto, pero entiendo perdóname—respondio Adrián,
—yo soy el que tiene que disculparse—insistio zero,
—hablemos de eso después, ahora me preocupa otra cosa—dijo Adrián,
—a mí también me preocupa algo—dijo zero,
—¿de verdad?—pregunto Adrián,
—si, pero quiero que sepas de que pase lo que pase nunca voy a renunciar a ti,
—no importa lo que pase ni que tan difícil sean los obstáculos, siempre nos encontraremos—dijo zero,
Adrián se conmueve ya que nunca antes le había dicho cosas tan bonitas, siempre se había sentido solo, pero una sensación presiona su pecho, es felicidad y miedo, miedo de despertar y que todo sea mentira, miedo de perder lo único que tiene, miedo de perderse en la soledad una vez mas,
Ese tobogán de emociones,
—¿por qué lloras?—pregunto asustado, —¿dije algo que no debía?,
—¡no!, no es eso es que siempre me sentí solo y abandonado, pero se siente bien por fin tener a alguien, pero…
—¿pero?—pregunto ansioso,
—pero también tengo miedo de perder esto—dijo mientras se cubre para que no lo vea llorar,
—no, no vamos a perder esto Adrián, estamos unidos por el destino y siempre nos volvemos a encontrar sin importar que pase—respondió zero,
Él lo abraza para calmar su ansiedad y angustia,
Zero lo mira de arriba a abajo y sonríe,
—¿qué sucede?—pregunto Adrián,
—nunca te había visto tan elegante, pareces un modelo—respondió zero,
—¡oye no es asi!—respindió avergonzado,
—me gusta, todo en ti se ve bonito—dijo zero,
Adrián sonríe feliz,
—hable con un amigo y nos ayudará con lo de el hechizo, su novia conoce un chamán que quizás nos ayude—dijo zero,
Adrián en eso momento se sintió Feliz y preocupado, no quería perder a zero, pero tenía miedo y corría peligro, debía cortar el hechizo a como de lugar,
—eso es genial, debemos ir cuánto antes—respondió,
—ya te lo dije, no creo en eso de los hechizos, pero si eso te ayudará a estar bien entonces lo aremos—dijo zero,
Después de caminar y conversar llegan a la cosa de zero,
—veo que estás ocupado—dijo Emir,
Zero entra en pánico al verlo,
—¿me extrañaste?—le pregunto,
—no—dijo,