En un mundo asolado por una guerra nuclear un chico y su familia intentan sobrevivir en una ciudad subterránea donde algunos arriesgan sus vidas en el exterior mientras otros viven cómodamente en la seguridad que esas gruesas paredes, será la gente de la ciudad peor que los peligros de afuera?
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El chico de los mandados (Parte 2)
La pieza de metal desprendida de un motor atraviesa con gran velocidad el pasillo en dirección a la espalda de Oliver, este no se había percatado del peligro hasta que es demasiado tarde, a lo largo de todo el pasillo se escucha el fuerte sonido del metal chocando y los estudiantes que estaban trabajando con el motor se acercan muy preocupados, Oliver abre sus ojos como nunca lo había hecho al ver el brazo mecánico de Dimitri sujetar la pieza de metal que estaba a punto de impactarle, la situación fue tan desconcertante que incluso Dimitri estaba sorprendido por lo sucedido – Esto funciona mejor de lo que esperaba. - Dice Dimitri sujetando el objeto que estuvo a punto de quitarle la vida a Oliver, los chicos responsables del motor piden disculpas de forma inmediata y a pesar de que Oliver estaba más aterrado que enojado no se liberan del regaño por parte de Dimitri, luego del rezongo los chicos vuelven a su trabajo sintiéndose muy avergonzados con ellos mismos. - Uff, por suerte le hice mejoras a esta cosa, sino pudo haber terminado muy mal. - Oliver vuelve a ver de forma constante el brazo de Dimitri aun temblando por la situación y manteniendo una postura un tanto paranoica por lo que Dimitri le pone el brazo en la espalda y lo lleva donde están los materiales que busca lo cuales son muchos y algunos pesados por lo que Dimitri también se ofrece a ayudarlo a llevar dichos materiales, ambos colocan todo en dos cajas repartiendo el peso de matera equitativa y comienzan a caminar de regreso al ascensor, durante el recorrido de regreso Oliver no puede dejar de mirar ni de pensar en el brazo de Dimitri y este es consciente de ello por lo que suspira y se ríe un poco.
- ¿Te gusta mi brazo? Yo mismo lo hice.
- ¿Tu solo? … Pero tienes un brazo debajo de eso ¿Verdad?
- Solo la mitad, nací con un brazo mal formado y solo se desarrolló hasta el codo, tuve distintos tipos de prótesis a lo largo de mi vida, incluso tuve un garfio, no era lo más cómodo así que estudié para hacerlas yo mismo.
- ¿De verdad? ¿Cómo puedes moverte tan rápido?
- Es como un radar que tiene mi brazo, lo terminé hace poco y estaba probando para ver cómo funciona, se supone que se mueve solo cuando se acerca algo, pero por el movimiento de recién debo admitir que me duele el hombro, eso fue más rápido de lo que calculaba.
- El piso de enfermería está cerca, podría llevarte allí, tengo un pase especial.
- Estoy bien tranquilo, solo fue un mal movimiento, debo ajustarlo antes de romper el poco brazo que tengo.
- Bueno...
- … Oye ¿De casualidad debes ir al laboratorio?
- Si... ¿Por qué?
- Bueno, acabo de salvarte la vida hace pocos minutos y debes recompensarlo así que tengo un pequeño favor que pedirte.
- ¿Un favor?
- SI, verás, hay una chica llamada Blake ella es del equipo de explosivos y armamento, muchas veces nuestros grupos trabajan juntos y eso así que ¿Podrías darle una carta por mí?
- Esta bien.
- ¡Muchas gracias Oliver!
Luego de entregarle las cajas con materiales a Edgar Oliver se encamina a su próximo destino en el piso 3 junto con la carta de Dimitri, Oliver recorre todo el piso preguntando por Blake sin obtener ninguna respuesta, el camino le lleva varios minutos hasta escuchar un alboroto proviniendo de un salón, Oliver intenta alejarse hasta que escucha a alguien gritar el nombre de la persona que busca, muy preocupado y temblando un poco abre la puerta con mucho cuidado y se encuentra con la escena de un grupo de chicos sujetando a una chica morena muy enojada, varias personas allí intentan tranquilizarla ya que no paraba de intentar soltarse moviéndose de forma muy fuerte -¡No voy a tolerar ninguna otra falta de respeto por parte de ese inútil otra vez! - Grita la chica mientras un chico frente a ella se ríe haciendo burla de lo que acababa de decir, Oliver no puede evitar sentirse mal por ella pero tampoco tiene el valor suficiente para entrar e intentar defenderla, cuando menos se lo esperaba la chica hace un movimiento rápido pisando fuertemente el pie de uno de los chicos que la sujetaba logrando hacer que la suelte y luego golpea a los otros dos luego de librarse se va del salón pechando a Oliver en el proceso, él queda muy sorprendido por lo que acaba de ver y luego de procesar un poco lo que acababa de ver corre tras de la chica e intenta llamas su atención, cuando la chica se da la vuelta para verlo Oliver se percata de la expresión de furia en su rostro lo cual le provoca mucho miedo.
- ¡¿Qué quieres?!
- ¿Eres Blake?
- Si ¿Y eso a ti que te importa?
- Tengo esto para ti.
Oliver le da la carta lo más rápido que puede y se va corriendo sin dejar rastro de su presencia, Blake mira la carta unos segundos pero luego se va con la carta en su mano sin darle mucha importancia, mientras tanto Oliver ya cansado de correr se detiene para recordar que era lo que buscaba mientras intenta recuperar el aliento, a pesar de que le cotara varios minutos al final logra recomponerse y continuar su camino finalizando todas las tareas que le fueron asignadas, a pesar de los gritos y de casi haber perdido la vida Oliver disfrutó de su tiempo fuera del piso 4 y principalmente lejos del acoso por parte de Sam además solo queda una semana restante del periodo de entrenamiento por lo cual está cada vez más cerca de ser oficialmente un soldado y de ver a Viveka y Brigitte, pensar en ello lo llena de ánimo para aguantar esos pocos días restantes e intenta mantenerse concentrado y distraído todo el tiempo para hacer que el tiempo pase más rápido.
Amanece un nuevo día en la ciudadela subterránea, todos los estudiantes se preparan para empezar su día y Oliver hace una marca en su libreta la cual usa para contar los días hasta la graduación además ese día en específico es su cumpleaños, ya lleva 18 años en este triste y desloado mundo, todos esperan con ansias la llegada del cartero que viene todos los días con cartas y paquetes que mandan las familias de los estudiantes y esta vez Oliver esperaba una carta al menos de su madre o de su hermano, el cartero entra al dormitorio como todos esperaban y menciona el nombre de todos los que reciben algo por parte de sus familias, Oliver observa expectante como todos reciben algo, incluso Sam recibió una carta de su padre diciendo que deje de molestar a sus profesores, pero tristemente el cartero se va dejando a Oliver con las manos vacías, él nunca recibió ninguna carta ni paquete por parte de nadie desde que entró al entrenamiento y siempre creyó que no le importaba pero sinceramente no haber recibido ni una mísera carta por nadie de su familia en ese día era algo que le dolía a pesar de no querer admitirlo ni con sigo mismo, luego de lamentarse en silencio se levanta para empezar su día, toma su desayuno solo en el cuarto como siempre, recibe un par de burlas de Sam como siempre y todos se mueven a su al rededor como siempre, todo era normal hasta que recibe una llamada por parte de Herschel, eso no es algo que pase siempre, normalmente él nunca está en la academia pero esta vez pidió verse personalmente con Oliver, fue muy temeroso al piso 6 donde lo esperaba su futuro nuevo jefe con unos papeles sobre un escritorio, era un contrato, ahora que Oliver tiene 18 años oficialmente puede ingresar en el ejercito por lo que necesita firmar su contrato oficial como todos los demás, el chico se toma su tiempo para leer el contrato y luego firmarlo, no hubo mucha charla entre Herschel y Oliver pero tampoco ninguno de los dos esperaba hablar mucho, ambos son hombres de pocas palabras, pero algo que aún lo deja con dudas es cómo es posible que Sam sea el hijo de un hombre como Herschel. Luego de firmar el contrato y de despedirse Oliver es enviado nuevamente al piso 4 donde continua su rutina como si fuese un día común y corriente, puede ser que su cumpleaños haya pasado como el más triste y lamentable de la historia, pero lo que de verdad le interesa a él es llegar al día de la graduación y poder ver nuevamente a sus dos amigas es el único regalo que él espera recibir ese año.