Katerin es una pediatra respetada, siempre impecable y dedicada. Sin embargo, detrás de su fachada correcta, guarda un secreto que su familia desconoce. No es tan santa como parece.
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CAPITULO 11
CASA JOHNSON
KATHERIN
Maldición!! he tenido que aguantar los regaños de Mara mi insoportable madrastra y ya me están colmando... no soy una chiquilla, pretende controlar mi vida a su antojo como lo hace con mi padre...desearía decirle a que me dedico a sus espaldas. Sonrió sin querer ante ese pensamiento. De seguro moriría en el instante.
-Donde esta la gracia Katherin?- pregunta alzando una ceja. Ay Dios! ahí va de nuevo!- sabias muy bien que te esperaría temprano para que me ayudaras a organizar... eres irresponsable.. siempre termino haciendo todo yo...
-Hablas como si no tuvieras empleadas- tragate esa!
- eso no importa... Qué hiciste anoche?-uish! me desespera su preguntadera. Así ha estado durante todo el día. Anoche follé toda la noche con un tío que esta mas bueno que el pan jajaja. Lo dicho se moriría si escuchara eso de mi boca, es bastante conservadora.
-Mi vida privada no es de tu incumbencia Mara, y te agradecería terminar con tu cantaleta-me levanto del sillón, me dirijo hacia la cocina, para quitármela de encima.Y de nuevo me sigue como una sombra. No ha dejado de repetir que hay una amiga que es importante para mi padre, que es muy adinerada al igual que nosotros y que vendrá esta noche con sus hijos. Sinceramente no me interesa... ni siquiera pregunte por su nombre... solo espero que todo salga bien por mi padre. Es una sorpresa para él, cree que solo será algo con pocas personas, pero la verdad la casa estará llena. Mi tía Mariam la madre de Sofía, su hermana, lo esta entreteniendo. No es bobo, de seguro sospecha que hay algo más y no una simple cena.
Por fortuna todo esta listo al fin antes de su regreso.
Voy a mi cuarto para ducharme y arreglarme, al terminar opto por un vestido rojo bastante sugerente.Siempre me ha gustado ser el centro de atención.
Todos los invitados han llegado poco a poco .Están casi la mayoría, sólo falta la dichosa amiga esa. El timbre de la puerta suena, de seguro es ella. Mara abre la puerta y al mirar hacia allá... Alexander?...Que carajos hace él aquí? Wow!! luce apetecible no importa lo que use, siempre logra dejarme sin aliento. Me mira de arriba abajo y sonríe con picardia. Creo que le agrada lo que ve, y a mi también, esa sensualidad y elegancia que lo caracteriza es el toque perfecto que me hechiza por completo. Este hombre es la perdición de cualquier mujer.
Todos vienen hacia mi sonrientes.
-Adeline, permíteme presentarte a mi hijastra Katherin- dice elegantemente Mara. Pfff ya nos conocemos ella no lo sabe.
-Doctora Katherin? justo estaba diciendo que el mundo es un pañuelo. No tenia idea de que Charles era tu padre- no detallo mucho su rostro porque no puedo dejar de observar al hermoso fortachon de ojos dorados a su espalda. También esta el hermano menor babeando como siempre.
-Si es mi padre- le digo...por suerte para mi, lo es. Nuestra relación padre e hija siempre ha sido muy buena.
-No sabia que ya se conocieran - dice Mara
-Katherin es la pediatra de mi hija- añade Alexander con la voz gruesa y sensual que hace que mis piernas tiemblen.
-Parece que soy el único aquí que no te conoce- expresa el menor de los Taylor, abriéndose paso para darme la mano y un atrevido beso en la mejilla- Soy Thomas es un placer conocerte, Katherin- sonríe con coquetería.. este parece ser igual con todas las mujeres. El rostro de Alexander lo dice todo... esta furioso. Las mujeres se marchan y el tal Thomas continúa mirándome con deseo- nos conocemos de alguna parte?-me pregunta sensualmente
-No lo creo- me gana la respuesta Alexander y lo aparta de un empujón- Largo de aquí casanova!
- y porque?- pregunta Thomas desafiante parece estar enojado también. Se ve que es ese tipo de hombres que les gusta liar con todas las mujeres que conoce. Conmigo perdió el año.
-Porque hay algo de lo que debo hablar con el Sr Taylor a solas- me apresuro a decir para despedir a un decepcionado Thomas. Parece no estar acostumbrado a ser rechazado.
Aunque mi padre sepa de la reunión, sigue siendo una sorpresa, no se imagina a tantas personas aquí, así que al escuchar el sonido de su auto las luces se apagan, imposibilitando totalmente la vista. En ese momento siento una mano musculosa que se desplaza por detrás de mi espalda hasta llegar a uno de mis glúteos y apretarlo.
-Estas hermosa- susurra esa gutural voz de Alexander y mi corazón se pone a mil.Puedo percibir su aroma varonil, su olor tiene efectos devastadores en mi capacidad de racionar.
-Tu también te ves apetecible... cariño-le respondo también en un susurro. No puedo verlo pero imagino que debe estar sonriendo coquetamente.
Se aparta de mi rápidamente al encenderse las luces.
SORPRESA!! gritan todos a mi padre que entra por la puerta principal.Me apresuro a abrazarlo y besarlo, los demás hacen lo mismo. Alexander se acerca, parece querer conocerlo, que situación un tanto extraña para mi.
-Permitame felicitarlo Sr Johnson- dice él elegantemente mientras extiende su mano.
-Charles por favor... Sr Johnson me hace sentir mas viejo- ambos rien ante su comentario. Mi padre como siempre con sus bromas.Corresponde a su gesto y estrecha su mano también. Alexander asiente con la cabeza. - Y tu muchacho quien eres?
-Alexander Taylor. Es un gusto
-El es hijo de tu amiga Adeline- me apresuro a decir. Mi padre lo mira sonriente.
- Pero por amor de Dios! cómo te haz crecido muchachon! Vente para acá- le da un abrazo fuerte- La última vez que te vi, eras apenas un crío.
- Te lo dije mi hijo es todo un hombre ya- dice la señora Adeline que se ha acercado a saludarlo también.
Presenta a Thomas tambien. Al parecer por lo que escuché, es hijastro de Adeline.
-Bueno queridos podemos dirigirnos al gran comedor.-Anuncia Mara para guiar a todos los invitados al gran salón. Mi papá marcha adelante muy contento rodeado de todos sus seres queridos, yo por mi parte camino muy despacio, la mirada dorada de Alexander está clavada en mi espalda, puedo percibirlo y mis sentidos están fuera de control. Al llegar al comedor tomo asiento y sin dudar Alexander se sienta sonriente a mi lado. Ay Dios!!! los recuerdos de la noche anterior bombardean mi cabeza y mis mejillas comienzan a sonrojarse... Contrólate Katherin!!
Todos parecen cenar placenteramente, una que otra conversación se escucha en la mesa... Mara y Adeline la madre de Alexander parece como si fueran amigas de toda la vida porque sus labios no paran de moverse, al lado de ellas el pobre de Thomas está con cara de aburrimiento.
Doy un pequeño respingo al sentir la mano de Alexander descargarse en mi muslo. Su toque hace que me recorra una electricidad por toda la espalda, continúa subiendo hasta mi zona de peligro... Qué cree que hace? es un perverso, aunque a quien quiero engañar lo dejaría tocarme donde quiera y como quiera, soy el triple de perversa y lo disfruto en su totalidad. La mano intrusa comienza acariciarme suavemente por encima de mi ropa interior, retengo el aire, gritaría si no hubiera tanta gente aquí. Me limito a pasar saliva y a mirarlo con ojos deseosos de más. Me mira maliciosamente, sé que disfruta como me hace sentir.Uno de sus dedos se cuela por debajo del encaje y comienza acariciar cierta zona, que envía corrientes eléctricas a mis extremidades.Vaya que lo estoy disfrutando y de que manera. Me pierdo en la sensación placentera. Trato de controlar mi respiración pero es imposible.
-lo recuerdas Alexander?- Pregunta su madre haciendo que la mano intrusa salga rápidamente de mi ropa interior. Maldigo en silencio por la interrupción de la mujer.-siempre fuimos buenos amigos con Charles. Bueno aunque tu eras un pequeño en ése entonces.
-Hmp- es el único sonido que sale del él... parece que también esta molesto. Me mira insinuante. Al parecer también tiene un pequeño problema en sus pantalones. Sonrió y él me guiña un ojo.Lo observo por un rato perdida en sus ojos. Ése hombre esta echo a mi medida, la alarma de Peligro en mi interior activarse.
-Les pido un permiso debo retirarme ya- digo para disculparme y también evitar que mi sonrojo sea tan evidente... Debo huir de allí... este hombre me descontrola totalmente... nubla mi pensamiento objetivo y terminaré cayendo en su red y enamorándome como una tonta... combinación de placer, ternura y sensualidad no son buenos para mi y este hombre es eso y mucho mas.
Abandono el lugar bajo la mirada extrañada de todos... me importa un carajo...le doy un beso de despedida a mi padre y me retiro del lugar evitando mirar a Taylor... así soy yo, huyendo de lo que no deseo sentir. Huir es mi única alternativa cuando algo se me esta saliendo de las manos... esto se esta convirtiendo para mi en algo mas que un simple rato de éxtasis... Alexander me gusta, me perturba, me vuelve loca... me siento desarmada en su presencia, la barrera que tengo para que nadie pase mas allá me la ha derrumbado por completo.. esa forma de mirarme, su cara de enojo cuando siente celos, su ceño fruncido y la forma de hablarme , de tocarme...Por Dios! no puedo permitirlo o caeré rendida a sus pies... y no me importará nada más...Alexander eres mi perdición...
Subo a mi auto y antes de poder salir del garaje su figura imponente se pone en medio... Ahí esta él...