Casada Por Mí Reino.

Casada por mí reino 12

Capitulo: Drago y Terence.

En el reino de Escitia los sucesos también eran interesantes. Apenas llegado Drago y Tinha ocurrió el tan esperado festival del trigo y la miel. 

Drago por fin en la fiesta conoció a la hermosa princesa Rosibel de Manuvia. 

Era una hermosa mujer de largos cabellos como fuego y un par de ojazos negros. 

Sin dudas Rosibel de Manuvia estaba aguardando algo más de un saludo cordial del famoso Drago León de Escitia pero si así era, sus esperanzas se desmoronaron. El joven Drago la saludó con cortesía y luego marchó con los nobles del lugar a seguir brindando con aguardiente y miel por los vencedores de batallas o por los piratas de los mares. 

Sus padres lo observaban. 

– Drago está raro – dijo Tomeo- quizás su supuesta esposa le hizo un hechizo. 

– Quizás solo maduró – respondió Alcira – pasó por mucho en el viaje. 

– Les digo que se ha enamorado de Sol Lisbeth, la reina de los negros. – dijo la pequeña Tinha. 

– Eso veremos – dijo el Rey Maluski.-- Es solo quizás que el cabello rojo de Rosibel de Manuvia no le atrae. -

Pero Drago estaba realmente diferente. Y siguió distinto, más responsable e interesado por las cosas de su reino. Recorría la gran extensión de Escitia y visitaba a sus futuros vasallos. Su padre le había asegurado que el siguiera la línea sucesoria así que inexplicablemente puso su atención y esfuerzo en comprender cada manejo de los problemas del reino. Sabía que algún día tendría que casarse y dar herederos a la corona. Pero no ahora. Había tiempo para eso. 

Morris lo observaba. El Drago que el conocía era un joven mujeriego y alocado, este nuevo Drago era serio y enfocado en la gestión de su inmenso reino. Discutía con su hermano sobre las estrellas y los planetas y el efecto de las estaciones en los cultivos de trigo. Hacía visitas a los vasallos que cultivaban y proyectaba mejoras en su calidad de vida y en sus familias. Diseñó y hizo construir nuevos molinos para triturar las semillas y conseguir mejores productos. 

Drago de Escitia se convirtió en un futuro rey que sin dudarlo el día que se case y asuma el reinado traería prosperidad y riquezas a un reino que ya era próspero y rico. 

Drago pocas veces recordaba a su esposa por un día. Solo en oportunidades en que estaba borracho recordaba los besos y los ojos de Sol Lisbeth. Sabía que con el tiempo terminaría por olvidarlos completamente. 

Y así llegó otra festividad del trigo y la miel. Y el reino se preparó con todo para el acontecimiento. 

En las plantaciones que rodeaban el castillo ahora se veían algunos nuevos molinos que trituraban los granos por efecto de la rueda y el agua. 

Los vasallos vestían sus mejores galas y la villa tenía diseños de pan y de abejas adornando sus calles. Los hornos de barro destilaban un hermoso olor a pan fresco y muchas personas se acercaban a disfrutar de las festividades. 

El juego de la miel, se llevaba a cabo como todos los años, congregando a niños, jóvenes y adultos. 

En carrera de un punto de salida a otro de llegada era necesario hacer tomar al compañero la miel de un cuenco sin derramar una sola gota. 

Tomeo, no afecto a juego alguno, terminó siendo arrastrado por Tinha a participar junto a una bella jovencita desconocida. 

Y la carrera se largo, la joven corrió con el cuenco de miel en la mano y le dio de beber al príncipe Tomeo sin derramar una sola  gota.  

Su hazaña fue aplaudida y la joven besó al príncipe como recompensa en la boca.

Los hombres que estaban junto a Drago aplaudieron a Tomeo, que entusiasmado abrazó a la joven y respondió el dulce beso. 

Drago vió la actitud de su hermano y escuchó el aplauso del pueblo. 

– Seguro se casara– decían– no será monje como hablan y será un excelente rey. 

Drago escuchaba los comentarios y empezó a buscar con la vista alguna joven bonita del reino, que muchas habían, para participar del juego y demostrar también su habilidad y hombría. 

Justo cuando vió a una joven de cabellos rubios que le llamaron la atención, escuchó otra vez la charla detrás suyo. 

–¿ No buscaráis una joven bonita para este juego Lord?--

– No gracias. Saben de quién estoy prendado. De Sol Lisbeth, después de visitar el puerto Girasoles – contestó el hombre. –

Drago león de Escitia volteo la cabeza para tratar de ver quién hablaba. 

– Lord Terence. Debes tratar de olvidarla. ¿Acaso no has dicho que tenía un pequeño moreno en sus brazos? Debe ser una mujer casada con un moreno de su tribu. 

– No. Su ayudante Vivet me ha dicho que la soberana de Alubia está sola. Las malas lenguas dicen muchas cosas por envidia. Que es bruja porque cura a la gente, que es la reina de los negros porque gente de color vive en su reino e incluso dicen que se ha casado con un pirata. Patrañas. Esa mujer será mía – respondió lord Terence. 

El fuego incendio la sangre de Drago de Escitia. 

Se dió vuelta y caminó hacia el grupo de elegantes señores que habían estado conversando. 

Miró con ojos de fuego a Lord Terence. 

– Lady Sol de Alubia es mí esposa – rugió tocando con un dedo el pecho de Lord Terence.-- Soy Drago de Escitia y ella es mí mujer -

Toda la aristocracia de Escitia que estaba en el palco escuchó esas palabras y los murmullos repetían: “Drago está casado”….”Drago esta casado con la princesa de Alubia”

El murmullo llego hasta los reyes que habían estado asombrados con Tomeo.

¿Pero acaso Drago mismo no había prohibido a sus padres de hablar del tal contrato de un casamiento no consumado?¿ Entonces su drástico cambio tenía que ver con esa historia?

– Morris, tenemos que hablar – dijo el Rey Maluski a su capitán navegante. 

– Tinha. Tenemos que hablar– dijo la Reina Alcira a su hija más pequeña. 

Allí en la arena de los juegos el príncipe Drago estaba peleando con Lord Terence a empujones y luego a puños. El romántico juego de la miel terminó abruptamente y los aldeanos interesados en la contienda empezaron a gritar :

– Drago….Drago….