El amor puede ser más difícil de lo que pensaba. Luchar contra viento y marea. (Contiene 33 capítulos)
NovelToon tiene autorización de Thais Perdida para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 11
ELIZABETH
Firme el contrato sin problemas, finalmente tenía una casa propia. Fin de semana, estoy con Jane y Alex que vinieron a ayudarme con la decoración, gracias a Dios no tuve problemas con mí madre..
– La verdad es que quedó bastante bien –*dice Jane*
*Alex se sacude las manos*– Si, todo gracias a mí –*enseña sus músculos*– ¡Y a estos bebés!
– ¿Cuándo será el día en el que te comportes como un adulto y no un adolescente puberto? –*le dice Jane cruzandose de brazos*
*Alex suspira*– ¿Que es lo que pasa, Jane?. Desde hace días estás así conmigo
– Bueno, chicos –*insisto*– No es momento de pelear, por favor
– Tiene razón, es un día importante para ella –*Alex me señala*– Mejor no peleemos
– Así es... –*me giro para ver todo el apartamento*– Quedó increíble
– Es precioso, Lizy. Muchas felicidades –*me dice Jane*
– Gracias, Jane. Y gracias por su ayuda, no podría haberlo hecho sin ustedes
– De nada, Lizy –*dice Jane y tocan la puerta*– Iré a ver quién es –*abre la puerta*– ¿Señor Carter?
– ¿Que...? –*digo y me acerco a la puerta*
– ¡Jane!... –*le digo y miro a Sean*– Bueno... hola
– Hola, perdón, no sabía que tendrías visita
*Jane me mira*– ¿Me quieres explicar que haces Sean Carter aquí?
– Aamm... bueno –*Miro a Sean*– Es que...
*Se acerca a mí y me besa la mejilla*– Estamos saliendo
– ¿¡COMO!? –*exclama Jane*– ¿Estás saliendo con él, Lizy?
*Miro a Sean y luego a Jane*– Bueno, podría decirse que si
– ¡LO SABIA! ¡TE JURO QUE LO SABIA! –*pone sus manos en sus caderas*– ¿No que no te gustaba, amiga?
*Me mira*– ¿De verdad decías eso? ¡Me siento ofendido!
*Alex se acerca*– ¿Sean? ¿Que haces aquí?
– ¿Alex?. Podría decirte lo mismo, amigo
*Los miro a los dos*– ¿Ustedes se conocen?
– Si, bueno Alexander es el subgerente de una empresa socia, somos buenos amigos –*dice Sean*– No sabía que tu eras ESE Alex, amigo de Lizy
– Bueno nos conocemos desde hace un buen tiempo, desde que empezó la asociación hace tres años
*Alex nos mira*– ¿Ustedes están saliendo?
*Sean ríe*– Si, estamos saliendo
SEAN
Pasamos hablando todo el día, hicimos algunas cosas de comer, picada y pizza. Ya es tarde cuando terminamos de ver una película...
*Bosteza*– Dios mio, que cansancio –*dice Jane*– Creo que es momento de irnos. ¿Vamos, mí amor? –*mira a Alex*
– Si, ya tenemos que irnos –*se levantan*
*Nos levantamos con ellos*– Bueno, lamento haberte dejado el trabajo pesado a ti, Alex –*digo mirando a Alex*
– No pasa nada, Sean. Luego me lo pagarás con una cerveza
– Eso tenlo por seguro –*le sonrío*
ELIZABETH
Una vez que Jane y Alex se van me quedo limpiando, mí primera noche es mí casa...
*Pongo los platos en el lavaplatos*– Uff...
– ¿Cómo te sientes? ¿Eh? –*abraza mí cintura y se pega a mí*– Estás en tu casa
– Bueno... es raro, jamás estuve fuera de casa excepto cuando me iba a dormir a casa de Jane. Ahora estar aquí...
*Me besa el cuello*– Es un gran avance que estás dando, mí amor. Estoy orgulloso
*Lo abrazo*– Gracias, Sean. Me hace bien que estés aquí, conmigo
– A mí también me hace muy bien tenerte cerca –*huele mí perfume*
– ¿Sean...? ¿Que estás haciendo? –*le pregunto nerviosa*
– Sshh... Quédate quieta, no te muevas –*comienza a besa mí cuello*
Me descontrola las sensación que está generando en mí en estos momento, por mí espalda recorren escalofríos nada placenteros. Mientras su boca devora mí cuello sus manos recorren mí cuerpo, trago saliva con dificultad y mí respiración se entrecorta...
*Tiemblo*– Sean... por favor
– ¿Que te pasa? –*se detiene y me mira*– ¿Estás bien?
– Si, solo que es... raro para mí esto. ¿Entiendes?
*Me mira confundido*– ¿Raro? ¿Por qué es raro?
– Quiero decir que soy un poco... aamm... inexperta, ¿si? ¿ahora sí? –*le digo mirando hacia abajo*
*Me mira sorprendido*– Eres... espera tu, ¿tu jamás has...?
*Asiento con nerviosismo*– No...
– Yo jamás lo hubiera imaginado, Liz. Eres demasiado bella, ¿cómo es que nunca...?
– Tampoco exageres, Sean. Ni que fuera tan bella, jamás llame la atención de alguien es todo
– Está bien, quiero que estés segura de que quieres hacerlo conmigo. Sino estás lista entiendo
*Bajo la mirada*– Entiende que es nuevo para mí
– Bien, entiendo no es el momento –*dice decepcionado*– Bueno... me tengo que ir a casa
Veo que está decepcionado, no esperaba que yo lo parara. Aunque no estoy lista y mucho menos me siento preparada, decido querer hacerlo feliz, porque de verdad me importa mucho él...
*Tomo su mano*– Sean, espera...
– ¿Que ocurre, Elizabeth? –*me mira*
– No quiero que te vayas –*trago saliva*– Si quiero estar contigo, lamento que hayas entendido eso. Es que solo quería decirte que quizás no era suficiente... –*fuerzo una sonrisa*
*Me sonríe encantador*– ¿Quieres...?
*Me esfuerzo por sonreír*– Si, si quiero...
– Lizy... –*se acerca a mí y pega sus labios a los míos*
Sigo la corriente de su beso, intenso y apasionado. De él irradia un calor muy cautivador, me levanta entre sus brazos y me sienta en la mesada de la cocina. Mis manos cuelgan a ambos lados de mi cuerpo. Suplico que Sean se de cuenta que no estoy lista, pero parece no hacerlo y no quiero pararlo y decepcionarlo, dejo que siga...
– ¿Donde está el cuarto? –*pregunta con voz corta y entrecortada*
– Arriba, es entrepiso, Sean... –*respondo con voz agitada y nerviosa*
Sean me levanto en sus brazos y me llevo hasta allá. Me deja sobre la cama y besa mí cuello, yo miro al techo casi llorando y tiemblo. Cuando me mira le sonrío haciéndole creer que todo está bien, él sigue besándome. ¡Por favor tiene que notarse que no quiero y no estoy lista!. ¿¡Por qué mierda no detengo esto!?.
Veo como me quita los pantalones y la camisa, mí sostén y mi braguita le hace compañía poco después, y se desviste también, no tengo tiempo a mirarlo detalladamente, y si lo hago nada se graba en mí memoria, se tira sobre mí besándome.
Jamás pensé que mí primera vez sería así, simulando placer sin sentirlo en lo más mínimo. Pero no hago nada, solo siento el dolor de cuando entra en mí, y cierro los ojos ahogando un gritó de dolor.
¿Cuando un hombre como él se fijara en alguien como yo?. Si lo paraba quizás se iría y encontraría a una mujer más capacitada y más hermosa que yo... Se acabó, ya está hecho