Dejen volar su mente con otra historia de fantasía y poder
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11
A la mañana siguiente Tess ya estaba despierta, puesto a que sentía que alguien la miraba o la observaba desde la oscuridad, o porque se sentía nerviosa, no pudo seguir durmiendo.
Por la puerta entro Ana con dos sirvientas más que empezaron a ayudar a Tess para tenerla lista en dos horas, la joven ni pudo desayunar por lo que solo subía al carruaje y soltó un suspiro, pues al ir en él recordó a Seth quien si la hubiera mirado ahora diría que escapase con ella.
-Malditos pelos de Zanahoria... - sonríe - ¿Qué habría sido de ti?...
Al llegar a la entrada del palacio observo en arriba de las murallas las cabezas de los aristócratas por lo que se asustó y empezó a sentir que el aire le faltaba, pero de instante se calmó pues ya estaba frbete al palacio, el cochero esperaba a que la joven abriera la puerta del carruaje para poder ayudarle a bajar.
Tess respiro profundo y abrió la puerta del carruaje observando aquel castillo enorme, para bajar del carruaje mientras lo que parecía un joven se le acercó y dijo.
-Usted debe ser la señorita Tess, hija del Barón..
-Si soy... - responde la joven con una voz muy bajita
-Dígame, el Emperador la espera...-comienza a caminar
Tess siguió al joven quien, la dirigió hacia un enorme pasillo por donde pasaban sirvientas, así como aristócratas, al seguir caminando observó el jardín donde muchas mujeres aristócratas realizaban sus fiestas de té, solo con la intención de que el Emperador las mirara y pudieran conseguir matrimonio.
El joven que caminaba frente a Tess se detuvo frente a una gran puerta que se abría de par en par, este de un solo golpe las abrió para que Tess pasara y así anunciándola.
-Ha llegado la señorita Tess...
Los aristócratas que estaban de pie ante el trono se giraron a verla, pues pensaba qué había sido ttraídapor cometer una falta.
La joven caminó siguiendo al joven sin notar quien estaba sentado en el trono, por lo que una vez frente a ella se saludó.
-Saludo al sol del Imperio, mis deseos están junto a usted y junto a su pueblo..
En cuanto Tess levantó la cabeza y miro al trono, observo esos ojos rojos que la miraban fijamente, esa boca que mostraba una sonrisa tétrica y ese cabello que reconocía donde quiera.
-Cabeza de zanahoria... - susurra mientras miraba a Seth quien estaba sentado en el trono...
-Señorita Tess al fin llego... - dice Seth para levantarse y bajar hasta donde estaba la joven quien se quedó en su mismo lugar pero con una mirada de enojo. - Me da gusto volver a verla.. - intenta tomar su mano, pero la joven no se lo permite
-Se puede saber para que me mando a llamar Emperador...
Seth frunció sus cejas para mirar a los mirones qué estaban ahí presentes y dijo.
-Retiren se todos.. - ordena mirando qué todos salen despavoridos dejando a Seth solo con Tess.
-Así qué tu eras o eres él Emperador - dice Tess dando unos pasos lejos de él
-Soy el Emperador niña.. - sé acerca para sujetarla dél mentón -¿Adonde vas?... ¿Piensas escapar de mi?...
-Yo vine aquí por que me mandaste a llamar como Emperador pero al ver quien eres he decidido irme...
La joven se safa del agarre de este para tratar de irse, pero ya s sujetas de nuevo por Seth quien se le notaba enojado para sujetarle del cuello.
-No dije que te podías ir... Acaso me escu haste decir eso... - aprieta un poco míenstras Tess trata de safarse - Tu no te iras de mi lado porque te casaras conmigo...
Seth la suelta para mirar como cae al suelo y sujeta su cuello para después mirarlo con una mirada qué a Seth le causa risa.
-No creas que poniendo esa cara cambiare de parecer... - levántate - Iremos a tú habitación...
Tess hizo lo que este le ordenó para tratar de correr, pero para su desgracia Seth era mucho más rapido que ella, por lo que la sujeto para cargarla en su hombro, mientras la joven gritaba qué la bajara, al salir del salón del trono camino por un enorme pasillo para subir unas escaleras qué lo llevaron a la habitación de este y junto estaba la de Tess, la cual fue arrojados en la cama.
-Esta es tu habitación mientras no nos casamos y cuando ya seas mi esposa tu cuarto será el mismo que el mio..
La joven lo miro y con enojo dijo.
-¿Por que ocultaste tu identidad? - lo mira fijamente
-Y qué habría cambiado... Si hubieras sabido de mi, te hubieras quedado...-rie - Lo sabía.. Así que no preguntes más y solo piensa en tu família estará bien - se acerca para acariciar el rostro de la esta, al mismo tiempo en que la besa, tan apasionadamente - Extrañe tus labios.. Tú rostro - pega su frbete con la de ella - por eso no puedo dejar que te marche de mi lado..
Tess solo lo miro y observó como se marchaba, por lo que grito.
-Maldito pelos de Zanahoria...! Mierda¡... De haber sabido que era un loco Emperador no me acuesto con el - muerde su labio -, pero es que es tan sexi y tan... tan.. - se deja caer en la cama -! Hay Tess¡... - se queda en silencio - Aver vamos a recapitular y entender... Osea si yo no trato de escapar y en su lugar acepto y me caso con él, él estará a mis pies - ríe - debo estar loca pero no moriré
Decía la joven quien reía por la gran idea que tuvo, más bien por saber que viviría muy bien.
El emperador quien estaba ya en su estudio estaba dejando todo listo, ya que el mismo vería junto a Tess su vestido y para eso necesitaba no tener trabajo.
-Majestad... La señorita Tess quiere venir a verle.. - dice el mayordomo qué cerraba la puerta dejando atrás a la sirvienta.
Seth, lo miro para decirle que si, que la trajeran a donde el estaba.
El mayordomo dio las indicaciones para que
