Cuatro Estaciones Para Nuestro Amor

_ Buenos días, si claro que lo recuerdo, respondió amable Sara.

_ El señor Douglas me ha pedido que le entregué los libros que recogí, supone que los necesitará para estudiar hoy, así que aquí los tiene.

_ Por favor, dele las gracias al señor Douglas de mi parte, ha sido un gesto muy amable de su parte preocuparse por mí. Dijo Sara mientras tomaba sus libros. Aunque no era necesario, yo pensaba pasar por la tarde para buscarlos, no debió molestarse.

Damián tenía que pensar en algo rápido para que su jefe no quedará como un empalagoso, así que saco un as de bajo de su manga.

_ Ya ha visto la convocatoria que se publicó en esta escuela hoy? Le dijo mientras avanzaba hacia la pared. Bueno, primero permítame disculparme por el atrevimiento de leer sus libros, lo hice para saber en dónde localizarla para entregárselos. En ellos encontré que es usted muy buena estudiante y me parece que está oportunidad es muy buena para usted.

_ De que se trata? Pregunto Sara con desconcierto y temor.

_ Pues no sé si usted sepa que nuestra compañía ha entregado diferentes becas en esta institución, desde la administración anterior nuestros directivos han manifestado su gran preocupación por la educación de los jóvenes y los retos que enfrentan para lograr ejercer en un futuro.

_ Si, claro, de hecho yo misma soy beneficiaria de una de esas becas. Respondió Sara aún con desconfianza en su rostro.

_ Bueno, está vez nuestra empresa está buscando colaboradores jóvenes para desarrollar una nueva área, es algo así como el servicio que debe de prestar el estudiante para tener derecho a su titulación.

_ Que quiere decir con eso? Que su empresa busca trabajadores gratis? Pregunto Sara levantando la ceja.

_ No! cómo cree eso. Al contrario, la empresa busca darle la oportunidad a jóvenes talentosos y responsables para desarrollar su trabajo en mejores condiciones y con un mejor sueldo, esto mientras terminan su proceso de titulación y con miras a un futuro menos complicado en la vida laboral.

_ Es verdad eso? Nunca he sabido de ningún empresario que se preocupe por la vida laboral de los jóvenes, mucho menos que les paguen por aprender dijo Sara cautelosa.

_ En nuestra empresa contamos con un director joven que piensa en las personas jóvenes como usted. Debería de inscribirse a este programa, estoy seguro de que puede calificar para uno de estos puestos, el sueldo es bueno y además se les proveerá de un lugar digno para vivir, uniformes, comidas y todo lo necesario para sus prácticas.

Serán pocos los beneficiarios, pero le aseguro que vale la pena.

_ Valla que si lo vale, lo pensaré...

_ No tarde en decidirse, ya que solo tienen dos días para inscribirse, el fin de semana se dará a conocer a los afortunados y empezarán a trabajar el próximo lunes. Tenemos mucho tiempo planeando esto y ya está todo listo, solo faltan los jóvenes emprendedores para el trabajo

_ Tan pronto?

_ El proyecto en el que se desarrollarán es ambicioso, por ello es urgente que empiecen a trabajar, no lo piense, solicite su entrevista hoy mismo.

_ Gracias por la información, lo haré. De ese modo se despido Sara y camino hacia su salón de clases.