Amor En Rojo 2: Legado

Ha pasado casi un año de paz, la princesa Kuzelny ha cumplido ya dos años, Karoly tiene pensado en irse a Rojo con su hija, pero teme decirle a Carpio la verdad, no ha hablado más sobre los poderes de la princesa, y los viajes que se hacen a Fontana para que los príncipes jueguen y vayan creando una amistad, se hacen regularmente, algunas veces va Carpio, y algunas se tiene que quedar en Susumira, así que Karoly piensa utilizar su visita a Fontana para alejarse sin que se sospeche sus planes.

La noche previa de su viaje, Ivetee, princesa de los Senmorta, camina despacio en el palacio, sabe que usar sus poderes en Hurmaya puede obligarla a regresar a las tierras de los Senmorta, sin seres jóvenes para robar su energía el tiempo va a pasar normal y se va a envejecer, había estado estudiando Susumira y sus reyes, se suponía que Carpio como rey debía ser peligroso; sin embargo, los comentarios que circulaban en la nobleza de Susumira, era que la fiera de Fontana, en referencia a la reina Karoly, tenía control absoluto del monarca, haciéndolo más asequible, pero débil.

Después de pensar mucho, llegó a la conclusión que debía eliminar a los reyes y a la princesa heredera, convertir al hijo de Tiurname en rey, y luego deshacerse de la madre, tomando el control del pequeño y con eso de Susumira; sigue avanzando hasta llegar a la habitación de la princesa Kuzelny, no la encuentra y sigue su rastro, ingresando a la habitación de la reina, viéndola a ella y la pequeña durmiendo juntas; se acercó a ellas, nunca había estado tan cerca haciendo uso de sus poderes, así que fue la primera vez que pudo percatarse de que ambas tenían herencia de demonios de fuego, y de la familia real, ¿cómo era posible eso?, retrocedió para ir directo a ver a su hermano.

Cuando salió del palacio, una neblina se apoderó del lugar, luego el sonido de un silbido siniestro se escucha, se forma una columna de humo, luego entre las partículas aparece Bosszú.

- “Lo supusiste guardar muy bien, pero cuando se lo diga a mi hermano, vendrá por esa mujer y por esa niña; esta vez él te va a destruir para siempre, no tienes el poder para detenerme”, expresó Ivetee con una sonrisa de triunfo.

- “Yo no lo tengo, pero sí ella, te presento a mi hermana”, dijo Bosszú con expresión serena.

Cuando Ivetee volteó vio a la princesa Cira detrás de ella, los ojos de Cira se tornaron blancos, formando una bola de energía en sus manos, Ivetee también formó una bola de energía, ambas elevaron sus propias energías hacia el cielo, por un momento la noche se convirtió en día por un instante, y se desató una lluvia, el tiempo parecía haberse detenido para el resto; Ivetee notó que Cira había destruido su energía y usó sus poderes para formar un campo de fuerza alrededor de sí misma como un escudo, pero la lluvia creada por Cira caía sobre el escudo que se iba deshaciendo mientras ella recitaba un hechizo “destruye lo que detiene el avance de mi deseo, destruye con tu furia lo que mis manos no pueden, convierte en nada la muralla que la cubre”.

Ivetee viéndose debilitada, intentó crear un portal para ir a las tierras de los Senmorta, Bosszú lanzó un fuego alrededor de ella, y la miraba fijamente.

- “Jamás sabes mantenerte al margen, siempre causas daños terribles, pero esta vez no voy a dejar que lo hagas”, dijo Bosszú.

- “Sí, me matas él lo sabrá, y tendrás que explicar muchas cosas, de cualquier forma, ellas estarán condenadas”, expresó con dificultad Bosszú.

- “Quien te dice que te voy a eliminar, vas a hacer un viaje, te tendré lejos el mayor tiempo que pueda, sé muy bien que cuando nos volvamos a ver, si tienes la oportunidad me destruirás sin piedad, afrontaré el problema cuando llegue”, manifestó Bosszú, mientras hacía que el circulo de fuego se acercara más a ella.

- “Haz lo que quieras, pero destruiré a tu niña, rompiéndole el corazón, lanzando un conjuro que ni Bosszú y Cira pudieron evitar”, manifestó Ivetee mientras era traslada partícula por partícula al infierno de la soberbia.

El conjuro iba directo hacia el rey Carpio, lo había tenido preparado si fallaba en su intento de matarlo después de supuestamente poder eliminar a la reina a su hija, “vuelve al pasado, se lo que fuiste, deja salir el deseo que existe; vuelve al pasado, se lo que fuiste, deja salir el deseo que existe”.

- “¿Lo viste?, no puedo detener eso Bosszú”, dijo preocupada Cira.

- “Tienes que regresar a tu familia, no podrás explicar tu ausencia más tiempo; no puedo evitarlo, pero al menos me dará más tiempo para que Asasen no los descubra, no podía dejar a mi hijo expuesto solo a ese padre; todos afrontamos nuestras culpas, y aunque hubiese querido evitarlo, fue la misma Karoly, quien les dio las herramientas, así como yo, tendrá que vivir las consecuencias; vete ya Cira, gracias por ayudarme”, expresó Bosszú.

Cira abrazó a su hermana, sabía que aquella reina de apariencia fuerte llevaba un calvario por dentro; sin embargo, ella misma no podría arriesgarse más, había visto a los Senmorta matar a la madre del príncipe Khwan, y ella necesitaba proteger a su hijo Chien y al mismo Khwan lo más que pudiera. Cira desaparece haciendo un portal, Bosszú manda como un beso volado a su hija pensando “te cobras todo lo que haces mi niña, pero me temo que si lo haces esta vez destruirás todo lo que amas, resiste y descubre la verdad”, y desaparece en medio de la columna de humo.

Al día siguiente, todo está listo para el viaje de la reina y la princesa, Karoly está algo nerviosa, sabe que no debería ocultarle la verdad, solo teme que no la entienda; la reina de Susumira, no se imagina que todos los secretos que se guarden traerán consecuencias gravísimas para las vidas de todos los seres que ella ama y quiere; Carpio le da un beso tierno en la frente a su hija, que está emocionada por el viaje; para luego darle un beso intenso al amor de su vida, aunque se sintió extraño, como si le faltara algo más, pero no quiso darle importancia.

...Princesa Kuzelny, heredera de la corona del reino de Susumira...

El rey de Susumira firmó los últimos documentos, y fue a ver a su hijo Ghean, le estaban dando un baño, y la misma Lady Tiurname participaba en ello, el pequeño príncipe había hecho un alboroto y la segunda esposa del rey había terminado mojada, haciendo que sus ropas se pegaran a su cuerpo, resaltando su figura, ella se sonrojó cuando se dio cuenta que el rey se la había quedado observando. Las niñeras se apresuraron en llevarse al príncipe, mientras ella trataba de cubrirse con unas toallas.

- “Ten cuidado, te vayas a resfriar”, dijo Carpio, sabía que debía haberse ido, y regresar luego, pero se sintió atraído a quedarse.

- “Lo haré, Su Majestad. Me disculpa, debo cambiarme e ir a atender al príncipe”, manifestó Tiurname, sentía que el rey la miraba algo diferente, y se apresuró para retirarse.

- “La reina en esta ocasión va a estar fuera quince días, (tomándola de la muñeca y acercándola a él) creo que has aprendido bastante para que tomes el rol de la segunda esposa en la administración interna del palacio”, dijo Carpio con una sonrisa.

- “Sí, usted cree conveniente, lo haré”, manifestó Tiurname nerviosa, sin mirar al rey, tratando débilmente de soltarse.

Carpio la soltó cuando tomó conciencia de lo que estaba haciendo, y ella aprovechó para irse rápidamente, no entendía para nada ese comportamiento del monarca, siempre había mantenido la distancia. Carpio sacudió un poco la cabeza, “estoy agotado, eso es lo que pasa”, se dijo a sí mismo, y se fue a su habitación para tratar de calmarse. Lo que el rey desconocía era cuanto puede manejar la mente un hechizo de los Senmorta, y mucho más si no se daba cuenta de lo que estaba ocurriendo.