Capítulo 4

Se dio la vuelta y me dijo:

—No te preocupes, ya lo averiguaré!! por mi misma—, me dijo sonriendo y se fue.

La odiaba tanto no se como hay chicas tan insoportables, pasaron las horas y llegó el momento de salir, yo estaba nerviosa por que sabia que Joan iba a venir por mí, pero no quería que se diera cuenta, así que respiré profundo y salí con mis amigas, cuando nos estábamos despidiendo sentí que unas manos agarraron mi cintura y me hizo voltear.

—Aquí estás nena!!—, me dijo sonriendo.

Mi corazón empezó a acelerarse, no podía creer que el hiciera eso, cuando se dio cuenta que  todavía sus manos estaban en mi cintura, me soltó y pude notar que estaba sonrojado.

—Hola Joan!!—, lo mire y le sonreí dulcemente para que no se diera cuenta que estaba en shock.

—¿Nos vamos?—, me dijo sonriendo.

—Si—, conteste mientras me daba vuelta para despedirme de mis amigas.

Cuando me di cuenta Karla ya estaba a su lado sonriéndole coquetamente, preguntándole cosas, me hirvió la sangre al verla así muy cerca de él, pero qué me pasa, como podía sentirme así si él era mi hermanastro, me pregunté yo misma.

—Nos vamos Joan!!—, le dije coquetamente agarrándome de su brazo.

—Si Mairim—, me dijo mientras su expresión era de ¿qué pasa?.

Me quedé viendo a Karla, le di una sonrisa de burla, ella me miró con ojos de enojo y me dijo:

—Tranquila Mairim!!!, no voy a comerme a tu amigo a menos de que él quiera!!—, dijo guiñándole un ojo.

Lo tomé de la mano, lo jale para que nos fuéramos al coche, pero no me di cuenta que había enterrado mis uñas con mucha fuerza en su brazo, él soltó un "auch", fue cuando me di cuenta que lo había lastimado sin querer, nos subimos al coche, yo no sabía donde meter mi cara estaba muy apenada no quería ni verlo a los ojos, él levantó parte de su camisa, ahí fue donde nos dimos cuenta que efectivamente estaban mis uñas marcadas con algo de sangre.

—¡Lo siento mucho Joan!—, le dije agachando la cabeza—, no fue mi intención lastimarte!!, solo que esa estúpida chica me tiene harta de verdad lo siento—, una lágrima empezó a bajar sobre mi mejilla.

Todo el camino fue en silencio, de hecho para mi se hizo eterno llegar a casa, cuando llegamos nos bajamos el quería hablar pero yo me metí tan rápido que no deje que hablara, subí a mi recamara y cerré la puerta detrás de mi me tiré a la cama, agarré mi almohada y empecé a llorar.

Después de unos minutos tocaron mi puerta, mientras yo secaba mis lágrimas me levanté de mi cama para abrir, cuando abrí la puerta, ahí estaba él con una sonrisa en sus labios.

—Mairim, no te preocupes, no pasa nada ¡estoy bien!—, me dijo apenas le abrí—, se que te sientes mal por pensar que me lastimaste, pero créeme me he lastimado mucho más feo así que esto no es nada—, levanto mi mentón y me dio un guiño.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***