Capitulo XVI El perdón

Tenía tantos sentimientos encontrados, la noche en que fui su mujer, fue linda, él me trató bien, por un tiempo olvide todo lo que había pasado, hasta que llegó el momento definitivo, donde tuve mi primera vez, él no sabía que yo no había estado con nadie así que me pxxxxxx muy fuerte, ese dolor fue insoportable y en ese momento caí en cuenta de cómo me había tratado, de cómo me humilló, de como arruinó un día tan especial como este, entonces fue cuando mi odio regreso, el fijo su mirada en mí y ahí vi su arrepentimiento, pero ya era tarde, ya no había nada que hacer, así que le pedí me dejara y salí corriendo al baño, me dolía mucho, me dolía el alma, me dolía el cuerpo, desde ese día lo odie más, ya llevamos tres semanas en esta isla, aún falta una semana más para que su gente venga a rescatarnos, creo que ya se dio por vencido pues desde temprano se fue y no ha regresado, son casi las seis de la tarde y nada que vuelve, prepare la cena, y en la cocina tarde como media hora, cuando vi la hora me preocupe, no era normal que tardará tanto, decidí salir a buscarlo, camine por la orilla de playa, casi no veía la casa, por este lado de la isla no había iluminación, así que saqué mi teléfono y empecé a alumbrar el camino, a lo lejos vi la silueta de una persona tirada en la orilla de la playa, camine más rápido, mi corazón se aceleró pensando lo peor, cuando estuve cerca me di cuenta de que era Noah, me acerque corriendo a él y cuando lo toque me di cuenta de que estaba ardiendo en fiebre, como pude lo levante, él aún tenía algo de conciencia, así que caminamos de regreso a casa, iba muy débil, tenía miedo de que pasara lo peor.

Llegamos a la casa y lo recosté en el sofá de la sala, revise su cuerpo y encontré algo en su pie parecía una herida causada por algún animal, entonces el balbuceo que había sido un escorpión, en una de mis tantas excursiones supe que hacer ante tal situación, busque hielo y se lo puse sobre la herida, buscando algo de alivio, fui por un analgésico en el estand de los medicamentos y se lo suministré, ahora solo había que esperar a que Noah no fuese alérgico a la picadura, me quedé con él toda la noche, tratando la fiebre con paños de agua tibia, estaba agotada y cuando estaba amaneciendo me quedé dormida a un lado de Noah, sentí unos fuertes brazos, alrededor de mi cintura, me acomode contra su cuerpo y dormí hasta muy avanzada la mañana.

— Buenos días, princesa. — Dijo Noah en un susurro.

Trate de levantarme, la posición en la que nos encontrábamos era muy comprometedora.

— Veo que recuperaste tus fuerzas. — Le dije tratando de soltarme de su agarre.

— No te muevas, solo déjame respirar tu olor. — Dijo de manera seductora.

— No puedes hacer mucho esfuerzo, déjame ir a preparar algo de desayunar. — Le dije suspirando.

— Gracias.

— Por que?

— Por cuidar de mi, aunque no lo merecía.

— Lo haría por cualquier ser humano, así que no te sientas especial.

— Te amo, princesa.

Después de decir eso soltó su agarre, pero ahora era yo la que no me quería separar de él, suspiré profundo y me volteé para quedar frente a frente con él.

— Me lastimaste mucho y aunque te amo no puedo perdonarte por lo que me hiciste.

— Lo sé amor, solo permite que te vuelva a conquistar, dame la oportunidad de demostrarte todo lo que te amo.

— Es la última vez que te soy una oportunidad, si me vuelves a decepcionar o a tratar mal, me desaparezco para nunca más volver, lo entiendes.

— Gracias mi amor, te prometo no volver a lastimarte.

Cerramos nuestro con un beso muy apasionado, después de un rato nos separamos con nuestras miradas fija el uno en el otro.

Noah se puso de pie y me alzó en sus brazos, me llevo a la habitación y me puso en la cama.

— Quiero que la próxima vez que estemos juntos sea muy especial, ahora me daré un baño, tú descansa un rato, anoche no dormiste bien, te amo.

Me quedé en la cama mirando el techo, hasta que el sueño me venció, me quedé acurrucada en la cama hasta dormirme, después de un rato sentí a Noah a mi lado, me tomo por la cintura y me pegó a su cuerpo, me dio un beso en el cuello y así nos quedamos dormidos los dos, desperté y ya era de noche, volví a cerrar los ojos y me di cuenta de que Noah no estaba a mi lado, me levanté de la cama y fui a ducharme, al salir vi un vestido puesto en la silla del tocador, ese vestido me lo había regalado Miranda para una ocasión especial, me acerque a verlo y vi una nota en él, la tome y está decía "ponte este vestido y te espero en la sala" una sonrisa se dibujó en mi cara, me puse aquel vestido, era color champán, con un escote bastante pronunciado en la espalda, era pegado a mi cuerpo hasta la cintura u de ahí pata abajo caía en una hermosa falta ancha, a los lados tenía unos bolsillos que le daban un estilo casual, maquille un poco mi rostro, solté mi cabello liso que llegaba hasta la mitad de mi espalda, me puse unos zapatos y accesorios de acuerdo al vestido, cuando estuve lista salí de la habitación, encontrándome con un pasillo iluminado por velas, estás seguían por toda la escalera hasta llegar al último escalón, vi al comedor y ahí estaba Noah en un esmoquin que lo hacía ver muy guapo, este camino hasta mí y me tendió la mano, nos sentamos y empezamos a disfrutar de una maravillosa velada.

— Pasaste todo el día preparando esto? — Le pregunté sonriente.

— Solo fue un detalle que quise preparar para ti.

— Te quedó muy bonito, gracias.

— Gracias a ti por darme otra oportunidad.

— Solo no vuelvas a lastimarme de nuevo.

— Te lo prometo, antes de hacerte daño de nuevo prefiero morir.

— Bueno y que preparaste de comer?

— No tenía muchas cosas en la cocina así que solo pude preparar una ensalada con pizza.

— Ja, ja, ja qué combinación más extraña, pero bueno comamos que tengo mucha hambre.

Noah me sirvió la comida y empecé a devorar todo y es que desde ayer no comía nada.

— No sabía que supieras cocinar tan bien.

— Hay muchas cosas que no sabes de mí, no solo sé cocinar bien, también sé hacer otras cosas con mis manos.

Me atragante ante aquel comentario, había olvidado lo atrevido que podía llegar a ser Noah, y eso me encanta de él.

Más populares

Comments

Martha Serrato Cisneros

Martha Serrato Cisneros

Espero y no la vuelvas a cagar Noah porque ahora si no te la vana perdonar así que ponte las pilas.

2024-01-23

4

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play