Capitulo 12

Cuando Ibrahim la soltó notó que le había quedado una marca roja en cuello, se le había quedado marcada su mano y se sintió terrible por haberlo hecho, puso sus manos a los costados y las apretó fuertemente tratando de controlar su ira.

-¿No tienes miedo de que te eche de mi casa por haber dicho eso? ¿Debo entender que estas de lado de tu familia? – Ibrahim trataba de controlar su furia

-No estoy del lado de mi familia y en realidad ellos no son mi familia, no tengo nexos de sangre con ellos, soy adoptada y te he conocido, me has hecho ver que ellos no tienen razón en lo nada de lo que me han dicho – ella negaba con su cabeza

-¿Quién te dijo que ellos no eran tu familia?, siempre escuché que eras la mas consentida de tu casa – todos sabían que la personalidad de Kendra era el resultado de lo mucho que su familia la mimaba

-Digamos que me enteré por casualidad, ellos me hicieron venir con la finalidad de hacerte daño, pero tu me gustas y nunca te haría daño – la mirada de Kendra mostraba la verdad que había en su corazón

Ibrahim la miró con una gran intensidad, no creía ni una sola palabra de lo que ella decía, sabía que había muchas personas intentando hacerle daño, pero ¿llegarían al punto de usar a una chica como ella?

-Voy a mandar a hacer una prueba de ADN y quiero que duermas aquí en tu habitación – se dio media vuelta y se fue cerrando la puerta detrás de él

Kendra quería seguirlo, pero tenia miedo de que volviera a rechazarla, luego de pensarlo mucho volvió a la habitación de Ibrahim y cuando intentó entrar notó que la puerta estaba cerrada por dentro.

-Ibra abre la puerta, no quiero dormir sola – comenzó a llamarlo

-Vuelve a tu habitación y si sigues molestándome te voy a echar de mi casa – le respondió desde su habitación

-¿Me darías por lo menos un beso de buenas noches? – un no rotundo se escuchó del otro lado de la puerta

Ella lo escuchó y se devolvió a su habitación, Ibrahim estaba demasiado molesto por lo que había escuchado, aunque aun tenia en su mente la imagen de Kendra con el cabello húmedo y con su camisa puesta.

Ibrahim se dirigió hasta su mesita de noche y abrió el ultimo cajón, allí estaba un álbum de fotos, lo sacó y buscó una foto en la que aparecía su mamá y su papá, visto a la ligera podría decirse que era una foto cualquiera, pero en ella se encontraba Kendra cuando era una niña.

En ese momento ella tendría unos once o doce años, y charlaba animadamente con ellos, la foto era hermosa, parecían una familia compartiendo, ese día al llegar sus padres a casa hablaron mucho de aquella niña que habían conocido en el parque, su madre llegó a afirmar que seria maravilloso tener a alguien como ella casada con uno de sus hijos.

Luego se enteró que era la hija menor de la familia Smith, además de que era arrogante y mimada, así que desechó la idea, pero algunos años después una noche se la encontró por casualidad y estaba acompañado de otra chica, esta otra chica le reclamaba porque le estaba dando dinero a un vagabundo.

-Kendra, ¿Qué haces?, a lo mejor le das tu dinero y dentro de un rato se va a casa a gastarlo quien sabe cómo – la chica lo veía con asco

El hombre tenia heridas en las piernas y algunas se veían infectadas, además estaba demasiado sucio y olía mal, sin importar lo que la otra chica decía ella se acercó y le preguntó porque no había ido a un hospital a la vez que le aconsejó que con el dinero que le estaba dando fuera a algún sitio a donde lo ayudaran.

Lo que hizo que Ibrahim pensaba que ella era una persona en ocasiones arrogante e irrazonable, pero debajo de todo eso había una persona que tenía un buen corazón. Después de ese día comenzaron o él comenzó a verla más seguido, a pesar de que ella ni lo miraba.

Luego sucedió el accidente de sus padres y él fue al hospital a ver si se habían salvado, pero las noticias que le dieron fue que a pesar de todos los intentos de ayudarlos ellos perdieron la vida, se sentó en una silla y su mente estaba en blanco, sus lágrimas amenazaban con salir y fue en ese momento en que una joven se acercó a él para ofrecerle una chupeta.

Él no la aceptó y fue entonces cuando la chica la destapó, era una chupeta de sabor a fresa y ella no sabia quien era él, solo se acercó por la tristeza que el chico reflejaba.

-Te la regalo, es mi chupeta favorita, se nota que estas muy triste, ¿tienes un familiar enfermo? ¿eres tu el enfermo?, ya vas a ver como todo va a mejorar – ella le metió la chupeta en la boca y se fue dejándolo allí, esa chica era Kendra

Luego de eso sus lagrimas comenzaron a salir y pudo sacar todo ese dolor que llevaba dentro, Kendra se había preocupado por él y le había dado el último momento dulce que tendría en muchos años.

-Mamá me comprometí con la chica que tanto querías y en unos días será mi esposa - Ibrahim pasó los dedos por la foto de sus padres

Nadie entendía porque él se iba a casar con una mujer como Kendra y el tampoco entendía porque lo hacía, sus padres solo habían mencionado que la chica les había gustado y la había visto tan feliz en ese momento, se preguntaba si de verdad ella lo haría tan feliz como su mamá creía.

Luego de observar la foto por un buen rato guardó el álbum y se fue a dar una ducha, hacia mucho tiempo que no sabia lo que era la felicidad, ¿sabría reconocerla cuando llegara a su vida?

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