...Ángel:...
Realmente no sabía que esa mujer podría llegar ser tan loca, en un avión, ¿En serio? Cuando alguien se ha atrevido tener sexo en un avión.
— Bájate ahora — Rugí furioso, porque ya estoy bastante enojado por tener que perder mi tiempo con ella, pero al parecer mis palabras le entraron por un oído y le salió por el otro.
— No me voy a bajar hasta que me complaces — sonríe de lado y rosa sus senos en mi cuerpo, algo que hace que todo mi cuerpo se estremece.
— Bájate, es en serio — No quiero volver a caer. No de nuevo.
— Has olvidado algo Ángel — Restriega sus dedos por mi cabello — Hace días te has convertido en mi esposo — se acerca a mi rostro rozando sus labios a los míos — Por lo tanto, es tu deber. — Dice como toda la mandona que es. — Te he dejado en paz por día — Sus manos se deslizan a mis pectorales hasta llegar a mi miembro apretándolo — Además tú también deseas eso — Sonríe satisfecha al ver cómo ya me tenía puesto.
— B-bájate no pienso hacerlo en un avión contigo
— Es un avión privado, solo nosotros estamos aquí — Besa mi cuello, dando pequeños besos que me dejan sin aliento — Solo estamos nosotros aquí — Mete su mano entre ms pantalón. — Además, parece que el mini Ángel ya quiere acción — Sonríe con burla.
^^^***^^^
Entre en el baño y la tomo en la cintura para arrinconarla contra la pared, ella enrolla sus brazos alrededor de mi cuello para besarme, y le sigo el ritmo devorando sus labios tal como hace como el mío, succionó y chupo sus labios como me da la gana, no sé ni cuántas veces he hecho esto con ella, pero no importa siempre Parece ser que es nuevo... sus labios es la parte favorita de su cuerpo, no importa cuánto la bese sigue siendo adictivo.
La alzó en mis brazos y ella enrolla sus piernas en mi cintura para no caerse. Meto mis manos bajo su vestido buscando su intimidad y deslizó dos dedos dentro de ella al haber apartado su braga, Jadea, y se aferra a mí con fuerza.
— Ángel... — Jadea mi nombre con tanta calidez, algo me hace querer aferrarme a ella, pero me niego a ello, debo recordar con quién estoy tratando, no es con cualquier persona. Muevo mis dedos más rápido para asegurarme que ella llegue al orgasmo algo que hace segundos después.
Saco mis dedos y se baja de mis brazos.
— Nunca he estado arrodillado en los pies de alguien, Ángel siempre ha Sido al revés— Confundido veo como se desliza al suelo enfrente mío.— Eres el primero. — Me mira tomando mi miembro entre sus manos mientras qué gruñido sale por mi garganta. — Recuérdalo muy bien — Ya con estas últimas palabras mete mi miembro en su boca, lame la punta y luego lo vuelve meter en su boca, aunque apenas Logra meter la punta.
— Lilith — gruño mirando como repite las mismas acciones, en este momento estoy demasiado excitado y mi mente no puede desear que ella vaya más rápido, así que hago lo menos pensé que haría.
La toma en ambos lados del rostro y hago que lo trague por completo. Ella abre los ojos sorprendidos y me mira, repito lo mismo varias veces hasta que se dejó ceder por completo.
Aprieto sus mejillas para terminar de librarme en su boca. Lilith se aleja tosiendo con fuerza.
«Carajo» No pude controlar, porque es tan difícil controlar mi bestia cuando estoy con ella.
— Escúpelo — Puse mi mano bajo si mentón esperando que escupe el semen; sin embargo, hace lo contrario. Lo trago.
— Eres un maldito ángel — Maldice mirándome enojada — Casi me matas ¿Acaso es un tipo de venganza? — Pregunta.
— Lilith.
— ¿Lilith? ¿Desde cuándo soy Lilith para ti? — Me pregunta y yo desvío la mirada porque ni siquiera me di cuánta cuando empecé a llamarla así, siempre la llamaba por su apellido.
— ¿Estás bien? — Pregunto levantándola y ella se aferra a mí
— Tienes suerte que no esté muerta o me hubiera convertido en un fantasma para venir a vengarme — Me rio por sus palabras y ella sonríe.
Sin embargo, al mirarla, ya estaba dormida en mis brazos.
«Maldita sea, eres una bestia Ángel» Me maldigo a mí mismo, no es fácil controlarme teniéndola cerca, y esto no me está gustando para nada.
Al terminar de limpiarla, la cargo en mis brazos para llevarla nuevamente al asiento.
— ¿Qué le hiciste? — pregunta el mismo chico que siempre está con ella y por lo que he estado escuchado su nombre es André.
— Está dormida por el cansancio — Me mira con desconfianza para luego salirse del camino.
— Más vale que no le hayas hecho nada, Amenaza
Llegando en asiento que estábamos, la dejo en su puesto dejando una pequeña manta sobre su cuerpo y yo me siento en mi puesto.
Se quedó dormida hasta el resto del vuelo, no se despertó hasta que finalmente el avión aterrizó en Italia.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 18 Episodes
Comments
Ana Leticia Morales
si que le dio duro jajaja 😂
2024-01-26
0