Capitulo 15

Guido:

Noté a Valentina algo molesta con la mirada que mantenía sobre Laila. Se dio la media vuelta para salir del cuarto sintiendo unas palmaditas en mi pecho.

Valentina: La próxima vez que digas que entre Guido y yo hay algo. Daemon vendrá para arrancarte esa lengua.

Me quedé en completo shock al escuchar a Valentina ante esas palabras que había mencionado. Negué con la cabeza mientras miraba fijamente a Laila. Se estaba metiendo con quien no quería. Escuché que la puerta se cerró, giré para asegurarme que Valentina haya salido por completo.

Guido: ¿Se puede saber por que dijiste eso y precisamente a ella?

Laila: No dije eso. Ella lo interpretó así.

Caminé hacia el suero para revisar como iba la cantidad de sus medicamentos. Tomé la inyección para ponerle su siguiente toma.

Guido: MUCHO CUIDADO LAILA. VALENTINA NO ES DE LAS MUJERES QUE TOLERAN LAS FALTAS DE RESPETO Y MUCHO MENOS VINIENDO DE SUS ENEMIGOS.

Laila: No soy su enemiga.

Guido: PARA ELLA SI.

Ella negó con la cabeza, sus ojos se llenaron de lagrimas intentando pasar como culpable a Valentina.

Laila: Ustedes no me quieren aquí… ¿Para que me mantienen?

Levanté mis hombros de manera que tenía que entender que sus preguntas no estaban para ser respondidas si no son por la misma Valentina o Daemon.

Guido: Te voy a dar un consejo niña. Valentina es tolerante, soporta cualquier cosa, menos las mentiras o peor aun que se mencione algo que pueda involucrar a su familia. Justamente como lo acabas de hacer.

Laila: No dije nada. Ella…

Guido: ELLA ES LA JEFA… TE GUSTE O NO TE MANTIENES CON VIDA POR ELLA. ASI QUE COMO DIJO SI VALENTINA LE DICE ALGO A DAEMON, ÉL NO VA A DUDAR. SOLO ACTUARA.

Ella soltó sus lagrimas. Rodé los ojos, ella no podía ponerse en contra de Valentina. Ni siquiera sé como se le pasó por su cabeza en decir algo así. Sabe que la situación no es para mantenerla con vida y va y busca juntamente a Valentina para hacer sus tontos comentarios.

Guido: Tendrás que caminar un poco.

La puerta se abrió mirando ahora entrar a Daemon, negué con la cabeza, de seguro Valentina ya le había ido a decir algo…

Daemon: ¿Cómo va el brazo?

Laila: Mejor. Gracias.

Giré un poco mi rostro mirando a Leila que miraba a Daemon de una manera que sabía que esto para nada era lo que me hubiera esperado. Daemon se acercó demasiado cerca.

Daemon: Lo que estes pensando… más te vale que no lo intentes.

Laila: si te refieres por lo que le mencioné a Valentina, solo fue un comentario por decir. Jamás afirmé que Guido y ella se estuvieran acostando.

Daemon: ¿Qué HAS DICHO?

Laila: Que ella me cuestionó por Guido y le dije que si eran pareja. Ella interpreto que aseguré.

Daemon: ¿DISCULPA?

Negué con la cabeza soltando un fuerte respiro, no… dime que esto lo dijo esta mujer.

Daemon: ¿Qué LE HAS DICHO A VALENTINA?

Laila: Solo eso.

Daemon: VALENTINA ES MI ESPOSA… NO, NO SABÍA NADA DE LO QUE HABÍAS DICHO. ME REFERÍA A TU ESTUPIDA MANERA DE VERME. CONOSCO ESA MIRADA DE QUE NO ROMPES UN PLATO. INOCENTE PARA MI NO LO ERES. NO NOS PROVOQUES. POR QUE SI POR ESA PUERTA UN DÍA ENTRA VALENTINA CON UNA ARMA Y TE DISPARA ENTRE CEJA Y CEJA ENTONCES NO MOVERÉ NI UN SOLO DEDO PARA DETENERLA. GUIDO VEN.

Rodé los ojos al escuchar cada palabra llena de verdad, caminé hacia la salida donde Daemon se quedó dentro del cuarto, él después de unos segundos se dio la media vuelta para salir. Cerró la puerta.

Él me miró, sonreí levantando mis manos en forma de rendición.

Guido: No tuve nada que ver.

Daemon: Ya lo sé tonto. Tenemos que ir por los permisos del químico del gas sarín.

Guido: ¿Trabajaremos con eso nuevamente?

Daemon: Tenemos que ir a Singapur y en vez de somníferos quiero el gas salir en los dardos.

Guido: Vamos.

Daemon se veía tranquilo… Laila para él era el menor de sus problemas. Quien le preocupa en su reacción tendría que ser Valentina.

Valentina:

Estaba jugando un rato con Loretto y Beida. Dimitri solo miraba a Beida lo buena madre que sría cuanto tengan a su bebecito.

Escuché que estaban llegando Guido y Daemon donde nos encontrábamos.

Daemon: Dimitri quiero que estes pendiente de esa loca que tengo en mi villa.

Dimitri: Si yo las veo.

Reímos, tomé el osito que tenía Beida arrojándoselo causando una tremenda carcajada por parte de él. Daemon se acercó a mi, quedando a mi altura ya que estábamos sentadas en el piso. Tomó a Loretto cargándola, le dejó un gran beso… Mientras la volvió a dejar en el piso. Me miró sonriendo.

Daemon: Tenemos que ir por unos permisos.

Valentina: ¿Para?

Daemon: Dimitri te va enseñar a seccionar los químicos para las armas nucleares. Beida por ningún motivo puede estar ella allí.

Valentina: De acuerdo. Yo me encargo.

Beida rodó los ojos… Daemon le puso su mano encima de su cabello revolviéndoselo un poco. Guido… ammm como siempre, mirando a Beida. Hay si esto seguía así terminaría uno de los matándose. Esperemos encontrarle una novia a Guido antes que esta loca de Laila también empiece hacer de las suyas.

Daemon se acercó dejando un beso muy sabroso en mis labios, se apartó donde tomé su mano.

Valentina: No me agrada Laila.

Daemon: Ni a mi, pero trata de hacer que hable. Eso siii de buena manera.

Valentina: ¿Yo? Jaaaa…

Él se levantó apretando un poco mi hombro. Ellos salían a la par. Escuché cuando la puerta se cerró.

Dimitri: ¿Qué pasa?

Valentina: No me agrada esa tal Laila. Hay algo, hay algo.

Dimitri: Es hija de Corina.

Beida: Se refiere que algo oculta y para ser sincera lo mismo pienso. Guarda algo. Quizá como dijo no esta para pelear pero si para meternos en problemas.

Dimitri: Hay niñas.

Dimitri se levantó tomando el portátil para ir hacia el despacho y seguir en lo que estaba. Levanté mi mirada escuchando la voz de Dimitri…

Dimitri: PASARAS AL LABORATORIO VALENTINA.

Rodé los ojos, pero me causaba mucha curiosidad para aprender lo mismo que Daemon hacía. Miré a Beida…

Valentina: ¿Qué tal te fue anoche?

Beida: Ufff, a Dimitri ni le importa que este embarazada me da con todo.

Valentina: Probé la nueva droga de Daemon.

Beida: Ya la has probado.

Valentina: No, esta no. L puso Adán y Eva.

Ella sonrió golpeando mi hombro en forma de broma… A decir, la droga funcionó muy bien, no he tenido secuelas y mucho menos efecto secundarios. Me encantaba lo que que me hizo sentir mientras hacíamos el amor.

Beida se puso de rodillas sentándose en sus piernas. Me miraba queriendo saber lo que había sentido.

Valentina: Fue una sensación diferente. Pude hacerlo por atrás sin necesidad de estimulación.

Beida: ¿Te entró todo sin dolor?

Valentina: al principio si dolía solo que cuando entró por completo, fue una sensación diferente. Tienes que probarla. Claro cuando nazca mi sobrinito.

Las dos reímos al saber que al menos tendríamos un poco para nosotras cuando pase el embarazo de Beida, ella estaba emocionada escuchando cada detalle de lo que me hizo sentir Daemon… sus ojitos l brillaron igual cuando empezó a contarme lo que le hizo sentir Dimitri. Siempre lo he dicho. Daemon y Dimitri son unos muy buenos amantes.

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Valentina

Daemon

Laila

Guido

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Dimitri

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