Ahori y su madre continuaban con la discusión, la noche esta muy próxima, el ambiente en la sala es tensa. Ambos no coinciden en sus ideas tan distintas, uno opta por la riqueza y el poder. La madre opta por el amor, la familia y una vida sencilla.
—Mamá tú y yo somos tan distintos. En cuanto a la pregunta que me hiciste... Ninel me ama y yo la amo, no importa nada más.
—Ese amor que pregonas, no te ayudo a cambiar de parecer. Ahori quiero que sepas una cosa y quiero que la tengas en cuenta, porque esto que te diré es importante para que sepas cual es la gran diferencia entre amor y obsesión.
—Ja... ¿Qué me vas a decir tú? Cuando fuiste tú quien abandonó al hombre que dio todo por ti.
Sale a flote un resentido hijo, que defiende la memoria de su padre.
—Ahori una persona no cambia por amor... Al contrario, mejora estando al lado de la persona correcta y lo hace por que esa persona se lo merece. Tú no has encontrado aún a la persona que logre ese gran cambio en ti...
—Eso crees tú, pero Ninel es la única que se merece mi amor y jamás habrá nadie que...
—¡Luvian, regrese! ¡Yo prepararé la cena!
El llamado de Ningyō interrumpe la conversación. Él se extraña al oír esa voz desconocida.
—¿Tienes compañía mamá?
La curiosidad lo lleva a ordenar.
—Donnie ve a revisar y asegúrate que no sea una ladrona—
—¡Donnie! No lo hagas. Es una sobrina mía.
Se interpone.
—¿Una sobrina mamá? Que tenga entendido, te apartaste de tu familia hace años.
—Ahori no le hagas daño a esa chica por favor.
—Mamá, solo tengo curiosidad.
Su madre no puede evitar que él baje a comprobar a la cocina, mientras Donnie la sostiene.
—Luvian que bueno que viniste, quiero que me veas cocinar y a la vez me corrijas, pues vi en un canal de recetas, que...
Ningyō cree que la persona que está tras suyo es Luvian, pero al darse la vuelta para que vea lo que está preparando, queda asombrada de ver a otra persona y es nada más que él mismo que le obsequio la muñeca, pero quién más asombrado queda, es él, por ver que la compañía de su madre es la distribuidora de regalos. Ella queda en shock y él no le quita la vista.
—¿Tú eres la chica que me trajo la muñeca? ¿Ningyō verdad?.
Ahori, nuevamente despierta esa curiosidad por conocerla.
—Señor, yo...
Ningyō no sabe que responder, obviamente ver a ese hombre la dejo sin habla.
—¿Qué haces acá con mi madre?
Comienza a cuestionar su presencia, pero ella no se atreve a contestar por lo que deja lo que está haciendo para ir a buscar a Luvian. Ahori la detiene. —¿A dónde crees que vas? Te hice una pregunta.
Nuevamente Ningyō lo ignora y decide continuar su camino, pero como la paciencia de Ahori es como una pequeña mecha, este se abalanza sobre ella arrinconándola contra la pared, pensando que ella temerá y se quedara quieta. Él no contaba conque ella supiera defenderse, así que se saca de sus manos, aplicándole un golpe en el brazo para que este la deje ir, lo cual funciona y ella corre hasta la habitación de Luvian, pero Ahori la detiene en las escaleras haciendo que ella tropiece. La sostiene con toda esa fuerza que él posee.
—¡¡Suéltame!!
Ningyō se retuerce en los brazos de Ahori, pero Luvian que escuchó los gritos, teme lo peor. Se zafa de Donnie para ir a ayudar a su compañera querida.
—¡¡Ahori suéltala!!
Luvian se llena de furia al ver el comportamiento de su hijo, a quién le exige que la suelte, pero este hace caso omiso y se la lleva a la otra habitación, que le pertenece a Ningyō. La arroja con fuerza a la cama.
—¡¿Quién eres?!
Ahori se asoma a ella para intimidarla con esa mirada despiadada.
—¡¡Te pregunté ¿quién eres?!!
Continúa su arremetida en contra de Ningyō, pero ella solo mira la salida.
—¿Quieres escapar?
Ahori la desafía, alejándose de ella y al ver la habitación, ve diferentes herramientas de entretenimientos para artes marciales mixtas.
—¿Qué es esto? ¿Eres una espía?
Ahori vuelve asomarse a ella, pero recibe un derechazo que lo deja desconcertado, mientras ella salta de la cama para ir a la salida, habré la puerta y encuentra a Luvian huyendo de Donnie, quien la estaba deteniendo para que no entre en la habitación.
—¿Donnie?
Ella lo reconoce, pero este la ignora aunque por dentro también la reconoció y está mucho más sorprendido. Ella se acerca lentamente a Luvian por la conmoción de haber encontrado a Donnie y lo peor de todo es que él trabaja para Ahori. En ese momento en el que Ningyō quiere tomar a Luvian, para apartarla de Donnie y salir corriendo, El Cruel Ahori la sorprende con un fuerte empujón contra la pared.
—¡¡Basta Ahori!! ¡¡No la lastimes más!!
Su madre se opone a él, poniéndose enfrente suyo para que no siga con su abuso.
—¡¡Déjame!! ¡¡¿Acaso no sabes que está mujer es una espía?!! ¡De seguro fue enviada por un enemigo del clan para tomarte como rehén!
—¡¡No!! ¡Ellla es inocente! ¡Kattier..! ¡Quiero decir Ningyō! ¡Ella no tiene nada que ver con criminales!
—¡Entonces ¿Cómo me explicas esas herramientas que tiene en su cuarto?!
—Ella es una...
—¡¡Solo es un hábito que yo tengo!!
Ningyō se pone de pie, confrontando Ahori.
La noche se volvió ensordecedora por los gritos de Ahori. El reloj marcó las ocho de la noche, el caos en casa de Luvian había empezado, todo porque Ahori desconfía de Ningyō.
—¡¿A qué te refieres con eso?! ¡¡Habito, mis narices!!— Ahori, rápidamente la toma por el cuello de su blusa para ponerla al borde de la baranda del primer piso, amenazandola con arrojarla si no confiesa su identidad.
—¡¡Dime ya!! ¡¡¿Quién eres?!!
—¡¡Aaaaah!!
Ningyō siente temor y en su desesperación le pide ayuda a Donnie.
—¡¡Donnie ayúdame por favor!!
Su pedido de ayuda deja al sádico hombre, perplejo.
—¿La conoces?
Pregunta con amplia curiosidad, pero Donnie niega conocerla.
—No sé quién es.
Ningyo, siente una decepción desagradable tras oír esa negación.
—Ahori, hijo. Por favor sueltala, te lo suplico. No lastimes a mi sobrina.
Luvian insiste en salvar a su protegida.
—¡Aléjate mamá o la arrojo!
—Basta Ahori. Eso es suficiente, déjala ir.
Interviene Donnie, con cierto grado de remordimiento.
—¡¡¿Qué?!! ¡Entonces tú si la conoces!!
—No es eso. Ya has hecho mucho escándalo.
—¡¡Cállate!! ¡¡Está estúpida me golpeó e incluso se muestradesafiante!! ¡Eso me hace suponer que esta mujer sabe sobre luchas y más! ¡No dudo que es una espía!
Mientras discute con su primo, Luvian intenta arrancar a Ningyō de las manos de su hijo, pero este se da cuenta y la esquiva. Luvian no puede controlar la fuerza de su cuerpo, por lo que tropieza y cae delante de todos. Una caída seca, impactando directamente contra el piso.
—¡¡¡Luvian!!!.
Grita horrorizada Ningyō, quien aprovecha la distracción de Ahori para correr a auxiliarla.
—M-Mamá.
Ahori está en completo shock, al ver como su madre está bañada en sangre.
—¡Ahori reaccióna, debemos llevarla al hospital! ¡¡Ahori!!
Son vanos los gritos de Donnie, no logra que Ahori reaccione, quien está recordando las palabras de su madre, cuando él se fue de casa con su padre.
《 —Esperare tu regreso Ahori. Eres mi hijo y siempre estaré aquí para ti.
—Mamá, prometo volver contigo. Vendré a verte seguido, porque te amo mamá y eres lo más importante para mí en esta vida.》
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