capitulo 20: “no hay perdón"

Poco días había pasado luego de ese anuncio público sobre el casamiento del emperador. Lucy, ya no era vista como una mera sirvienta. Sin embargo, como era su don y su gusto, siempre mantenía el jardín en un estado radiante, solo para que Gabriel pudiera admirar su belleza sin importar su poder.

Era un día radiante, y para ella recoger un ramo de flores y entregárselo a la persona que quiere no era impedimento. De hecho, Gabriel le había llegado de sorpresa a su lado.

— que costumbre la tuya aparecer sin avisar...— dijo ella, con burla.

— ¿Y eso que?... Eres la única que no se asusta y no es divertido.

— ¿Acaso a mi futuro esposo le gusta el sufrimiento de los demás?— acercándose más, Gabriel le besa con cariño.

— el de lo demás si, pero jamás me gustaría ver tu sufrimiento... Me aseguraré de eso.

Ambos seguían caminando por el sendero del jardín que una vez estuvo marchitado, con ramas seca y mala vegetación, ahora era una hermosura que muchos nobles han querido visitar por el hecho de tener rosas exóticas y preciosa, pero como este es un jardín privado del emperador era imposible.

Lucy quién aún iba de lado de Gabriel con las flores silvestres, ella estaba pensativa sobre un tema que los nobles le pidieron en secreto, pero como ella confía en su majestad, no tienes problema en contarlo.

— Gabriel...

— ¿Si, Lucy?

— como sabrás, desde ese banquete con los ministros, ellos han estado insistiendo en que me una a su congreso para dar idea sobre la economía, pero que no te dijera nada a ti porque lo podrías matar.

— y eso es lo que voy hacer, le dije claramente que no quería que te molestarán...— Lucy con velocidad, le toma de la mano a él para bajar su temperamento.

— te lo conté porque pronto serás mi esposo, y no me gustaría guardarte secreto a tu espaldas. Pero no le hagas nada ya que ellos solo quiere que yo aporte ideas...

— ¿A ti te gustaría?

— por supuesto... Me gustaría ayudarte en el reino, cargar con ese peso tú solo no me gustaría. Tal vez mi pasado sea el de una sirvienta, pero quiero que mi futuro contigo sea el de una pareja de verdad apoyándonos mutuamente.

— y así será... No dejaré que nadie me aleje de ti...— besando la mejilla de Lucy, ambos continuaban su recorrido.

________________ rato después...

Gabriel cómo de costumbre, en su oficina solo estaba, realmente le gustaba trabajar de manera individual, pero el hecho de pensar que su Lucy trabajará a su lado, le hace sentir ansioso para que llegue ese momento. Ahora ella se encontraba ocupada hablando con los ministros y por eso no se encontraba al lado de él.

Con un suspiro exasperante, Gabriel veía la ventana que lo conducía al jardín, recordándole que las hermosas flores se parece tanto a ella, sin querer, él sonríe.

Sin embargo, alguien toca la puerta y no se anuncia, Gabriel, pensado que era Lucy, le da el permiso de entrar... De repente, la mirada del emperador cambia radicalmente, nuevamente ella estaba aquí.

— Valeria— anunció su nombre afincando su voz.

— Gabriel...

la mujer había logrado colarse al palacio sin ser detectada o eso es lo que ella pensó, solo con el fin de poder hablar con él. Ella, con una pequeña sonrisa le pregunta sin vergüenza.

— ¿Como has-...

— no tienes derecho en hablarme, ni en regresar a mi palacio...— habló él, con total frialdad en su voz, poco a poco la habitación se iba congelando— vete de una vez, no lo volveré a repetir...

Con valor, Valeria alza un poco su tono dejando aquella cobardía.

— aún te sigo importado ¿O, no?, de lo contrario, ya me hubiese matado. Por favor, Gabriel, piénsalo otra vez, deshacerte de esa sirvienta, ella solo te quiere por tu corona para ser emperatriz, sé que me quieres hacer sufrír casandote con esa mujer, pero piénsalo bien, no tienes que rebajarte de tal manera tomándo en matrimonio a esa sirvienta...

Sin seguir soportando tales calumnias, Gabriel de inmediato se va al frente de Valeria, tomándola del cuello éste no le importaba alzarla del suelo.

— ¿Que yo sigo sintiendo algo?... ¿Y por tí?...— el hielo va cubriendo el cuello de Valeria...— para eso congelé mi corazón, para dejarme de importar los malditos sentimientos que una vez tuve por tí... No hay perdón está vez.

Valeria ahora sí conocía el miedo, puesto a que veía su vida pasar por sus ojos... Pero, Gabriel la tira al suelo con total fuerza, ya que escuchó la voz de Elton afuera de su puerta.

La mujer tose y tose en el suelo...

— y Lucy no es tu reflejo para que digas esas estúpides, ella es mucho más superior que tú... Lucy no es una zorra que se acostó con un maldito noble solo porque le calentó el oído...

— ¡Su majestad!— entra Elton con un par de guardias— hemos visto a la señorita Valeria entrar sin permiso al-...

Elton ve la escena, la habitación congelada por completo, la frialdad en los ojos de Gabriel, era como esa vez que se lanzó el hechizo el mismo, ya que Elton estaba en ese momento...

— llevénsela a la torre oscura, está mujer a entrado al palacio sin mi consentimiento, se le dará un juicio por sus acciones...— ordenó él sin ver hacia atrás eh irse.

— s-si mi señor.

“realmente quería matarla, quería hacerla callar de una vez y para siempre, pero al escuchar la voz de Elton, de inmediato volví en si y recordé a Lucy..."

Gabriel no quería que Lucy pensará que era el mismo tirano que antes, sanguinario y que no le importaba matar, por eso se detuvo antes de la tragedia. Así que para dejar de pensar en ese sentimiento vacío, se va aún lugar que espera que lo llegué a calmar.

Al rato después, Valeria estaba siendo escoltada por los guardia y por Elton. Lucy, quién había regresado de su pequeña charla con los ministros, se encontró con ellos en el mismo pasillo. La joven ve el escenario y no duda en preguntar.

— ¿Elton?... ¿Que ocurrió?...— Lucy ve más a la mujer y la reconoce de inmediato, puesto a que son las mismas características de la protagonista, a susurro, Lucy pronuncia— Valeria...

— señorita Lucy... Ella intento-...

Valeria interrumpe a Elton. Al parecer, la pelirosa tenía la ira eh impotencia acumulada en el pecho que decidió descárgala con Lucy.

— así que tú eres la golfa que sedujo a Gabriel. Eres un don nadie, no eres nada sin el poder del emperador... Maldita Bruj-...

Cuando iba a completar esa palabra, Lucy no se detuvo y le lleno la boca de las flores más amargar posible, la joven tampoco se iba a quedar con ese insulto, y de inmediato la abofeteó fuertemente haciendo que Valeria escupiera la flores.

— ¡Señorita Lucy, deténgase!— sostuvo Elton a Lucy para no seguir abofeteado a Valeria.

— ¡No eres más que una mala creación mía!—... La pelirosa aún seguía en shock por el golpe que no escucha nada...— eres tú quien no eres nada sin Gabriel, mírate, ha venido hasta aquí por el hecho de que el estaba bien sin tí... Y ahora-...

Lucy se detiene en pensar en algo con preocupación, de inmediato supuso que si Valeria estaba aquí, tal vez hubo una confrontación entre ella y Gabriel, además que es posiblemente que él recordará el porqué se había congelado su corazón, y que tal vez su poder de hielo se intensificó para no sentí nada otra vez...

Lucy teme por las emociones de Gabriel, así que dejando a un lado a lo que no importa, ella va rápidamente en busca de Gabriel.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***