...Denle me gusta para más capítulos 👍🔥...
Mi mejor amiga me mira cuando como si estuviera loca, tal vez lo estaba, pero necesitaba saber si mis padres habían sido sinceros en todo momento conmigo o me habían estado ocultando otra vida que tenían fuera de casa.
-¿Estás loca, cierto? Si están afuera persiguiéndote no lo vas a tener tan fácil poder moverte además de que vida corre peligro cada segundo – muerdo mi labio.
-Tal vez esté loca, pero como decía mi padre sin locura no se vive – la digo sincera. - Tengo miedo, ¿¡No lo entiendes!? Necesito saber que hay detrás de todo esto Bianca, no me puedo quedar tranquila hasta que no lo sepa y si no puedo moverme sin que me amenacen tal vez no me quede más remedio que preguntárselo al que participo en toda esta mierda que ha puesto mi vida patas arriba – me mira de nuevo como si estuviera loca.
-Perdiste la cabeza por completo Antonella, por lo que me contaste esa gente es peligrosa, él que está afuera lo es y sin dudarlo te utilizara porque eso hacen esas personas – camino hasta la puerta de la entrada.
-Puede ser, pero tengo que intentarlo – abro la puerta.
-Antonella – me llama, pero cierro la puerta no dejando que saliera.
Camino por la hierba hasta salir a la cera de la calle viéndole en la otra calle con su capucha puesta aun esperando a que yo me moviera.
-Te deben de pagar mucho para que te guste perseguir a la gente y más a una adolescente como yo – le digo tragándome mi miedo pareciendo como si le estuviera vacilando o retando.
Se me queda mirando fijamente, aunque no pueda verle nada porque iba bien tapado, pasa un coche por la calle viendo como comienza a cruzar la calle cuando él coche se aleja.
Primer paso, llamar su atención y ya lo había conseguido.
-¿Tanto llorar en él hombro de tu amiga hizo que perdieras el miedo? - me dice con burla.
-¿Te diviertes jodiendo la vida de los demás? ¿Cierto? - paso por su lado sabiendo que me iba a perseguir.
-¿No te dijeron tus papis antes de morir que podían cortarte la lengua por niñata? - siento sus pasos cerca de mí.
Me quedo unos segundos en silencio alejándome de la casa de Bianca.
-Ya que sacas él tema de mis padres muertos a cuál tu mataste – me doy la vuelta mirándolo viendo como se había encendido un cigarro que mantenía entre sus dedos. - Me gustaría saber porque lo mataron porque no solo lo mataron, sino que también me prohibís buscar la verdad así que menos que me lo digáis - me observa y juraría que tiene una sonrisa en sus labios, aunque no la pueda ver.
Me pego un pequeño susto cuando con un solo paso acaba enfrente de mí sin nada de distancia de por medio viendo como sus ojos me penetraban.
-¿Me creíste estúpido? - su tono cambia por completo a uno más serio dejando su tono juguetón aun lado.
Por lo menos lo había intentado, mi intención no era que solo me contara porque los mataron si no sonsacarle quienes fueron para así tomar medidas, aunque con eso me mataran.
Acabaría muerta, sí, pero por lo menos me iría al otro mundo sabiendo la verdad de todo.
-Deberías de volver a lo que queda de tu casa, dicen que las niñatas si caminan tarde por la calle acaban siendo secuestradas – lo decía aposta él muy idiota.
Niego con mi cabeza dándole la espalda caminando rápido hacía mi casa.
Más tarde termino llegando a casa sintiéndole en cada momento detrás de mi hasta que cierro la puerta volviendo a estar dentro de la casa cuando no quería estar ya que todas las imágenes volvían a mi cabeza atormentándome, todo seguía siendo demasiado reciente.
Subo las escaleras caminando por él pasillo deteniéndome observando la puerta del cuarto de mis padres.
¿Y si mis respuestas estaban en su habitación?
Abro despacio la puerta viendo que todo seguía como lo dejaron, trago fuerte saliva dirigiéndome a los cajones del mueble donde guardaban algo de ropa.
Tal vez podía ver algo entre la ropa, nunca se sabe por eso me tengo que asegurar.
Comienzo a sacar la ropa tirándola al suelo sin importarme que se arrugara, había jerséis de mi padre.
Me detengo cuando veo un sobre algo grande de color marrón no muy oscuro, lo cojo viendo que pesaba algo.
Lo abro llevándome una gran sorpresa.
Dios mío...
Mis ojos se abren de sobremanera cuando veo una gran cantidad de dinero en billetes con una cinta blanda a su alrededor.
Cojo los billetes observándolos pasando mi dedo por ellos viendo que eran todos billetes de cien euros y quinientos euros.
Nunca en mi vida había visto tanto dinero junto.
¿En que estabas metido papa?
Estaba entre su ropa así que tenía que ser de él.
Rápido guardo los billetes de nuevo dentro del sobre marrón dejándolo donde estaba volviendo a coger la ropa poniéndola encima sin doblarla.
Miro a mi alrededor sintiéndome observada, sé que no estaba dentro de la casa, pero pensar que estaba afuera vigilando hacía que me sintiera de esa manera.
¿Y si estaban buscando este dinero?
Entraron con la intención de encontrar él dinero, pero no lo consiguieron por eso cogieron a mi familia llevándolas al salón y con eso comenzaron a torturarlos para que dijeran donde estaba, pero no hablaron y por eso terminaron por matarlos...
Podía ser que hubiera sido así no estaba segura, solo era uno de los tantos pensamientos que estaba teniendo.
Pero él mismo que me estaba vigilando me dijo...
No queremos tú mierda de dinero preciosa, la pasta que debía tú familia ya nos la cobramos
¿Entonces si no era él dinero que me había encontrado que era?
Más preguntas sin respuestas, cada vez tenía más dudas por todo.
Observo él armario grande acercándome a él viendo toda la ropa de mis padres, me agacho metiendo mis manos debajo donde había pantalones perfectamente colocados.
Toco las telas, pero no encontraba nada oculto a que me llevara a alguna pista o me respondiera mis preguntas.
Todo esto era frustrante...
Me levanto llevando mis dos manos a mi pelo tirando de él observando toda la habitación intentando encontrar algo.
Ahora no sabía que pensar de mis propios padres.
Me asusto cuando él reloj que tenían en su cuarto suena avisando que ya era las dos de la madrugada.
Suelto un suspiro saliendo del cuarto, era muy tarde tenía que intentar dormir algo para que se me fuera él dolor de cabeza.
Mañana comenzaría a buscar algo por la casa, no se él que exactamente, pero tenía que haber algo.
Cierro la puerta de mi habitación cuando entro caminando hasta la ventana viendo que estaba aparcada una furgoneta sospechosa.
Seguro que era él.
Suelto un suspiro metiéndome en la cama con la ropa que llevaba, no tenía ni fuerzas para eso, me sentía demasiado agotada.
Cuando menos lo espero acabo quedándome dormida por él agotamiento.
[...]
Me alzo asustada de la cama cuando se escucha por toda la casa un ruido de un móvil.
Miro hacía la puerta confundida hasta que me acuerdo de que se trataba del móvil fijo que tenía mi padre en su pequeño despacho.
Llevo mi mano a mi rostro intentando acostumbrarme a la luz que entraba por mi ventana.
Me levanto caminando despacio al despacho de mi padre retumbándome él sonido del fijo en mi cabeza molestándome.
Es como si tuviera resaca era horrible.
Abro la puerta escuchándolo más fuerte, lo cojo llevándolo a mi oído.
-¿Sí? - mi voz sale apagada y soñolienta.
-¿Antonella? - frunzo mi ceño.
-Si soy yo, ¿Quién eres? - le pregunto.
-Antonella lo siento mucho por todo lo que estas pasando y lo que le paso a tu familia, estoy al tanto de todo lo sucedido – frunzo aún más mi ceño. - Soy el abogado de confianza de tu padre, tenemos que hablar – llevo mi mano a mi frente frotándola.
-Lo siento, pero mi padre nunca me hablo de ti y ahora no estoy pasando un buen momento – no me fiaba de nadie.
-Me llamo Guillermo y tú padre antes de morir me dejo un testamento y más cosas para ti por si algún día le pasaba algo – me siento en la silla apoyando mi codo en la mesa.
-¿Testamento? Mi padre tampoco me hablo de eso - aún estaba ida por haberme levantado tan corriendo.
-Tenemos que vernos Antonella – niego con mi cabeza, aunque no me vea.
-No, eso es imposible – le confirmo recordando que me vigilaban las veinticuatro horas del día.
-¿Por qué? - muerdo mi labio.
-Me vigilan – es lo único que le digo.
Se presenta un pequeño silencio como si estuviera pensando.
-Es importante Antonella yo solo hago mi trabajo y tú padre me dejo las cosas claras, tenemos que quedar sé que está todo muy reciente, pero esto es serio, tú padre te protegía tengo que contarte así que por favor piénsatelo y cuando tengas una respuesta llámame a este número de teléfono estaré esperando tu llamada...
Entreabro mis labios para contarle, pero ya era tarde había colgado la llamada.
De nuevo mi cabeza estaba dando demasiadas vueltas a todo.
¿A qué se quería referir con que mi padre me protegía?
¿De quién?
¿Y de qué?
Mi Instagram donde estaréis informadas de todo: @mishistoriascontadasenpapel
Antonella
Ashton
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 142 Episodes
Comments
irma cuellar
tu manera de relatar nos lleva adentro del personaje ...👏👏
2024-09-10
0
Nancy Quintero
Divina lástima que halla pasado por tanto sufrimiento tan joven.
2023-12-09
1
Lorena Angulo
Antonella es hermosa 😍
2023-08-14
0