capítulo 12

Abro los ojos y lo primero que veo es que tengo una intravenosa en la mano, ¡estoy en el hospital! Lo último que recuerdo es a Kristo saliendo del baño y yo yendo tras de él pero un dolor muy fuerte en mi vientre me impidió seguirlo y todo se volvió negro, cómo es que llegue aquí, y por qué estoy aquí, me siento por completo en la cama y distingo un sofá a pocos pasos de mi,en el se encuentra lía y mi hermano Marco, no veo a Mariano ni a mis padres, supongo que están en el club distrayendo a los invitados. Lía alza la mirada y ve que ya me desperté, enseguida se levanta y veo que lágrimas corren por sus mejillas, no sé lo que está pasando.

-Lia por favor- es lo único que alcanzó a decir antes que ella se me pusiera a mi lado y me abrazara para llorar descontroladamente.- Me estás asustando qué me pasó, no recuerdo nada- veo a Marco y también tiene una cara de tristeza.

Al ver que lía no paraba de llorar, Marco se acerca y se para tras de lía para abrazarla poniéndole su cabeza en su pecho

-Isabella, Lía te encontró en un charco de sangre en los lavabos, se asustó mucho por qué no respondías, tuvimos que llamar una ambulancia para que te trasladarán, te hicieron unos exámenes pero creo que hubo un error con los resultados, pedí que se volvieran hacer otros, no debe de tardar en regresar el doctor con los nuevos resultados.

Toda la información que me da Marco la trato de procesar… sangre, me acuerdo que antes de desmayarme sentí un fuerte dolor en mi abdomen y que me golpee la cabeza, levanto la mano y tengo un vendaje en la sien , bajo la mirada y veo que mi vestido se ha ido en su lugar llevo puesto una bata de hospital, no entiendo nada. En ese momento entra un hombre de edad avanzada seguido de la ginecóloga de lía la doctora Sullerman .

-Buenas noches señorita Salvatore me alegra que ya esté consciente, tuvo una pequeña hemorragia que debido a su estado es siempre importante tenerlo en cuenta ,se le realizó un análisis de sangre para determinar los niveles de beta GCH cuantitativa para determinar si todavía hay embarazo, ya que todo indica que tubo una posible amenaza de aborto.

-¡Que! No estoy embarazada, eso es imposible.No he estado con nadie...- apenas digo las palabras recuerdos de la noche de su boda de marco y lía llegan a mi mente, cómo es posible que me haya olvidado que en ninguno de nuestros encuentros Kristo utilizó preservativo, esto no puede estar pasando , que voy hacer, Me acarició el vientre ahí se está formando una vida que yo cree con Kristo, noto que lágrimas caen sobre mis manos que tengo sobre mi abdomen, tengo que encontrarlo, tengo que decirle sobre el bebé aunque no sé si me crea cuando le diga que es de él.

-Señorita los resultados salieron positivos las dos veces que se le realizó los exámenes, los niveles de GCH están más elevados de lo normal lo que confirma un embarazo, la doctora Sullerman le realizará una ecografía para saber exactamente de cuántas semanas de gestación esta.

La ginecóloga Sullerman le indica a una enfermera que entre a la habitación y está arrastra un aparato que tiene una pantalla en ella, enseguida me descubre el abdomen y me pone un gel frío sobre el, empieza a pasar el ecografo sobre mi y lo deja fijo en un lugar, sobras negras y grises aparecen en la pantalla, escribe algunas cosas, me pregunta cuándo fue mi último periodo, cuando tuve relaciones sin protección, si estaba tomando algún tratamiento anticonceptivo.

-ahí se puede observar la bolsa gestacional lo que nos confirma el embarazo, por las medidas y los datos que me proporcionó indica que tiene un embarazo un poco más de 6 semanas, el sangrado pudo ser causado por diversos factores, anemia, infección, pero no sé preocupe se le realizará más exámenes y tendrá que guardar reposo por algunas semanas, le recetare algunas vitaminas prenatales para que empiece a tomarlas enseguida. Por esta noche la tendremos monitoreada por si se presenta otro sangrado y felicidades Isabella- la doctora se levanta de la banca y sale de la habitación dejándonos a los tres sumidos en nuestros pensamientos.

El primero en romper el silencio es Marco -Al menos no va ser un escándalo nuestro padre cuando se enteren que estás embarazada ya que Mariano y tú están comprometidos- suspira cómo para reconfortarse.

No sé cómo reaccione cuando lo contradiga, Lía como leyendo mis pensamientos me aprieta la mano.

-No es de Mariano, él y yo nunca…

-¡Que!- grita marco- nunca nos dijiste que estuvieras viendo a alguien a escondidas , nos mentiste Isabella- reclama, se lleva las manos a la cabeza y camina de un lado a otro de la habitación,- Dime si se va a ser cargo del bebé cuando se lo digas- me enfrenta

-No lo sé, solo fue cosa de una noche, ni siquiera sé cuál es su apellido y no quiero volverlo a ver después de lo que me dijo esta noche.

-Dime quien es- demanda Marco- yo haré que se haga responsable, tiene que responder

-¡No, yo sola me haré cargo de mi bebé!

-¡Repite lo que acabas de decir Isabella!-Una voz fuerte nos llega desde la puerta de la habitación los tres dirigimos nuestra hacia ese lugar, es mi padre detrás de él se encuentra Mariano que me mira como si quisiera matarme.

Inmediatamente Marco se pone delante de la cama, como si intentará protegerme de la ira de mi padre y Mariano.

-Padre déjela descansar ya mañana cuando ella se sienta mejor hablara con usted- lo persuade

-Estoy esperando Isabella Salvatore, por tu bien espero haber oído mal, por qué no permitiré que ningún bastardo manche el apellido Salvatore, a menos que Mariano tenga algo que ver en este asunto- voltea a ver a Mariano que no ha dicho ninguna palabra.

-No señor, yo siempre he respetado a su hija,- confiesa

Me armó de valor, se que nunca seré la hija que a él le hubiera gustado tener así que ya no me importa lo que pueda decirme, pero que no se meta con mi bebé por qué lo defenderé con uñas y dientes.

-No oíste mal padre estoy embarazada y el bebé no es de Mariano.- Mi padre el gran Lorenzo Salvatore cruza la habitación a grandes zancadas y me planta una cachetada que me rompe parte de mi labio y me deja una gran marca en la cara, me duele hasta el alma su comportamiento hacia mi.

-Como pudiste hacerle algo así a tu familia, tirar por la borda tu futuro,serás el hazme reír de todos, todos hablarán a tus espaldas por el bastardo que llevas en tu vientre, me dejaras en ridículo ante los demás- vocidera- hablaré con el médico no mancharas nuestro apellido solo para llevarme la contraria, una vez que te recuperes te casarás con Mariano lo antes posible…

-No abortaré si es lo que están pensando que haga, nadie podrá quitarme a mi bebé y menos tu padre, yo lo cuidaré y le daré el amor que tu no me supiste dar.

- Si esa es tu decisión, desde este momento te desconozco cómo mi hija, no eres nada para mí ni tú, ni ese engendro que llevas en el vientre, espero que tengas en cuenta que ya no te seguiré manteniendo y todas tus cuentas quedan congeladas, espero y no te arrepientas de la decisión que estás tomando hoy, por qué no tendrás una segunda oportunidad para redimirte, Dicho esto se va echando humo de la habitación.

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