Pronto llegaria la primavera y las rosas comenzarian a florecer, Julia se encargaba de cuidar los rosales, asi habria suficiente flor para la fiesta de San Juan. Ademas las Dalias llenaba el ambiente de aromas y pronto los camotes entrarian en temprada de reproduccion. Cuando empezo con el jardin se esmero por investigar los cuidados que necesitaban pues no hay flores en la ciudad mas que en establecimientos y en areglos florales.
Hoy estaba pensando en el regalo de Sebastian, en la casa se hizo una pequeña reunion para celebrar su cumpleaños y cuando regreso a su habitacion encontro una medalla con el santo Juan Bautista pero lo que realmente le intrigaba era el grabado en el reverso, dos simbolos una flama y gotas de agua.
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El abuelo no dejaba de pensar en la peregrina y en que el dia que vendria se aproximaba. Le asustaba que Julia ultimanete parecia distraida, a veces le tenia que hablar varias veces para llamar su atencion y lo mismo pasaba con Sebastian, al menos habia dejado de beber y sentia que la responsable era Julia. El es viejo pero puede darse cuenta de lo que estaba pasando, esos dos se miran con estrellas en los ojos pero algo los detiene, la peregrina hablo de que la proxima vez no se iria sola y que se llevaria a un caballero y una mujer con flores en la cabeza. Esperaba que se estubiera confundiendo como aqulla noche en la que el destino de Julia y Sebastian cambio, pero si las cosas seguian su curso como aseguraba la peregrina nadie podia detenerla.
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Julia extrañaba a su madre, poco sabia si habia gente de este lugar que fuera de su familia, en su propio rostro podia ver facciones conocidas por aqui y alla. Cuando vivia en la ciudad llego a sentir un poco de verguenza, ya que mientras otras niñas tenian cabellos rubios, chinos o lacios y podian teñirlo de colores, su cabello es castaño y sentia que no tenia chiste, solo quebrado, ni bien lacio ni bien chino. Ademas en la escuela habia niñas que se burlaban de sus ojos verdes no porque fueran feos solo fuera de lo comun, la crueldad de los niños no siempre es fundamentada y la mayoria tenian ojos a azules, sin embargo su madre le enseño a estar orgullosa de sus razgos, ella y su tia eran muy parecidas a su madre y segun ella los ojos que las caracterizaban solo a Julia y a su madre fueron herencia de su padre.
La abuela les contaba que su padre habia sido un musico fuereño que llego al pueblo y que se enamoraron pero un dia simplemente desaparacio y la abuela jamas se recupero de ese dolor y murio cuando su tia y su madre eran muy jovenes dejandolas encargadas con unos tios, que si bien no las trataban mal y tenian lo necesario tampoco las llenaron de afecto de ningun tipo. Mas tarde su tia viajo a la ciudad y su madre fue en su busqueda por que era su unica familia. Ella trabajando de mesera conoceria al padre de Julia que eventualmente se haria cargo de Darla tambien. No sabia mucho de su tia, cual era la razon de tan cerrado corazon, nunca le mostro afecto ni siquoera en los peores momentos de su vida, jamas la vio llorar por su hermana ni su cuñado. Incluso se veia muy tranquila cuando le dio la noticia del quiebre de la empresa de su padre. Olivares era una empresa que se encargaba de comercializar productos agricolas y tenia una gran participacion en el mercado cafetero por su exportacion de semillas de cafe y sus deribados. No era una experta en la empresa pero comenzaba a dudar que lo que habia dicho su tia fuera verdad y peor aun, la noche que fue atacada podia jurar que habia sido Braulio quien estaba detras de la mascara, evitaba pensar en ese insidente por que le provocaba panico saber que lo que decia su mirada de ese degenerado era odio y obsecion. Comenzo a sentir escslofrios y sentia que alguien la obserbaba pero seguramente seria su imaginacion por estar pensando tantas tontetias y siguio caminando hacia la escuela.
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Comments
Lumilla Naranjo
su abuelo es el que la peregrina beso y se quedó ciego
2021-10-28
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