Maximiliano Lombardi es un exitoso empresario. A sus 24 años ya es el presidente de la Multinacional Lombardi Enterprise. Sus padres deciden que ya es hora de contraer matrimonio si quiere conservar la presidencia.
Isabella Saheenz, quien a sus 19 años se encuentra terminando su carrera en medicina, al igual que su mejor amiga Mía Lombardi, hermana menor de Maximiliano.
Ambas chicas regresan a Estados Unidos, después de estudiar tres años en Londres.
¿Qué pasará cuando Maximiliano se reencuentre con Isabella?, ¿Se atreverá a confesar su amor por ella?; ese amor que ha mantenido en secreto desde que él tenía 19 años y ella 14 años.
¿Será Isabella la solución a sus problemas? o ¿Todo se arruinará en una noche?
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Capítulo 10
Esto último lo dijo y salió de la sala, no sin antes escuchar la fuerte voz de su padre.
Andrew: Maximiliano Lombardi. Te vas a casar quieras o no, claro a menos de que quieras salir de la empresa y de esta casa.
Max dio media vuelta y regresó frente a su padre, observándolo de una manera desafiante.
Max: Papá piensa muy bien lo que dices, porque si tomas la decisión de sacarme de la empresa y de esta casa. Créeme yo no dudaré en irme de inmediato.
Andrew sintió una punzada en su pecho, por lo cual cayó al piso llevando su mano derecha a su corazón.
Max: PAPÁ, PAPÁ. ¿Qué te pasa? Respóndeme.
Margareth: Andrew ¿Que tienes mi amor?
Max levantó a su padre y le dijo a su mamá que avisara al chófer para llevarlo de inmediato al hospital.
Como pudo cargo a su padre, adentrándolo en el vehículo y saliendo rumbo al hospital.
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Pasaron dos horas después de que Max llegara con sus padres al hospital.
Max se encontraba en la sala de espera consolando a su madre, cuando salió el médico.
Doctor: Familiares del señor Andrew Lombardi.
Max corre con su madre y llegan donde el doctor.
Max: Doctor soy su hijo y ella es su esposa. ¿Como esta mi padre?
Doctor: El señor Lombardi, sufrió un infarto. Ya lo hemos podido estabilizar, pero es necesario que se quede en el hospital para hacerle seguimiento y practicarle algunos exámenes.
Max: ¿Como que un infarto?, ¿Lo podemos ver?
Doctor: Por la noche de hoy ya no será posible, lo podrán ver mañana en la mañana.
Max salió con su madre rumbo a casa, mientras en su mente retumbaba las últimas palabras que cruzó con su padre.
Al llegar a casa Max, ingreso con su madre quien no paraba de llorar, después de haber escuchado las palabras del médico.
Max: Madre, perdóname sé que soy el culpable de que papá esté en el hospital.
Margareth: Hijo no digas eso, tu padre venía con algunas molestias desde hace días, pero nunca me hizo caso en ver a un doctor.
Max: Mamá ¿Por qué nunca me dijiste nada?, tal vez esto se hubiese podido evitar.
Margareth continuó llorando desconsolada, mientras tomaba las manos de Max y decía:
- Max solo te pido que analices lo que te dijo tu padre. No quiero que su salud empeore.
Max: Lo sé madre. ¿Le vas a avisar a Mía, lo ocurrido con papá?
Margareth: Según lo que nos diga el médico mañana, decidiré si le avisamos o no; además no me gustaría que tu hermana tuviera que adelantar su regreso, solo faltan tres semanas, pero si es necesario entonces lo haré.
Max: ¿Como así que tres semanas?, ¿Por qué no me habías avisado que ella regresaba?
Margareth: Hijo la verdad se me paso, pero ella al igual que Bella regresarán en tres semanas, además Rebeca me comentó que un tío de Bella quiere que ellas terminen sus prácticas en su clínica. Es una buena oportunidad para tú hermana.
