Lía, una chica muy joven que empieza a iniciar su vida independiente, cree que su vida al fin será como ella quiere y todo tendrá un nuevo camino…
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Capítulo 10
Lía bajo su mirada un poco y su jefe empezó a hablar
Estéfano: primero que nada quiero presentarles a mi asistente Lía, Lía ellos son mis hermanos Damiano y Fabritzio Salvatore, él es mi sobrino Damiano, por el nombre ya sabrás quién es su padre
Lía: mucho gusto señores
Los hombre respondieron que igualmente y que el gusto era de ellos, Damiano el hijo no dejaba de verla y eso parecía a Tamara no gustare pero Lía no prestaba atención a distracciones, ella solo estaba tomando nota de lo más importante pero vino algo que le causó mucha inquietud, las palabras que su jefe le dijo a los hombres
Estéfano: soy el mayor de ustedes y ya estoy tramitando mi retiro, como comprenderán mi hijo Estefan se quedará en mi lugar
Damiano Mayor: hermano tú sabes que siempre respeto tus decisiónes pero creo que eso sería muy malo para nuestros negocios, perdóname que te lo diga pero tu hijo es un valagardo que no mueve un dedo ni por el, con decirte que tengo algunos años sin verlo
Damiano Joven: yo concuerdo con mi padre, mi primo se la pasa solo en fiestas, creo que aún no tiene la madurez para tener ese cargo
(Lía solo pensaba en que por lo que oía se quedaría sin trabajo, su jefe se iba a retirar)
Estéfano: bueno creo que están un poco esquivovados respecto a él, en otro momento de mi vida los habría comprendido pero ya no, recuerden que somos 5 socios, mi esposa, yo, Damiano y tu hijo, recuerda que tú a él lo hiciste socio prácticamente sin tomarnos en cuenta y no menos importante Fabritzio, al parecer tú tienes la última palabra Fabritzio
Fabritzio carraspeo y aunque vio las miradas fusil antes de su hermano y su sobrino decidió hablar
Fabritzio: por mí está bien, creo que tú haz trabajo muchos años por este imperio y tienes todo el derecho de poner en tu lugar a quien quieras
Estéfano: gracias hermano, bueno somos 3 contra dos así que ganó la mayoría, por mi parte es todo, sigan en sus empresas trabajando y cuando esté todo listo para mi retiro prepararemos una fiesta de Bienvenida a mi hijo (se puso de pie y les dio la mano a sus hermanos y sobrino) y a ustedes no se les olvide que gracias a mi están donde están (les dijo a su hermano Daminao y su sobrino y después se retiró)
Lía no sabía qué hacer, había sido un momento muy incómodo pero salió detrás de su jefe, Tamara se quedó a despedir a los socios
Estéfano: por favor acompáñeme a mi oficina
Lía: claro señor
Estéfano abrió la puerta pero como todo un caballero le dio el pase primero a ella
Estéfano: una disculpa por ese incomodo momento
Lía: no se preocupe señor
Estéfano: como e escucho, pienso retirarme, ya estoy viejo y eh trabajado mucho, pero noté su preocupación y quiero decirle que no es necesaria, los acuerdos que tenemos se van a cumplir, ahora le pido que me ayude a organizar una reunión con los encargados de cada puesto de la empresa para el próximo mes, mi hijo regresa de Francia y aremos oficial su lugar en en esta empresa, además quiero que haga una fiesta para anunciarlo públicamente, no quiero que escatimé en gastos, la fiesta será una semana después
Lía: claro señor, yo me encargo
Estéfano: es todo por el momento, gracias
Lía: con permiso señor
Lía salió de la oficina de su jefe y se fue a la de ella, a su jefe le parecía tan gracioso que aunque ella era su asistente y podía tener acceso a toda la empresa ella no cruzaba la línea aún y salía y entraba por la puerta principal, no usaba el acceso privado pero no le decía nada si a ella le parecía cómodo así él no le decía nada
Lía entró a su oficina y empezó a trabajar, comenzó a planear todo lo que su jefe le había pedido, tenía 1 mes y medio para organizar esa fiesta, su jefe le mandó algunas sugerencias de acuerdo al gusto de su hijo así que ya tenía un avance, estaba tan hundido en su trabajo que no se dio cuenta que pasaron algunas horas hasta que tocaron su puerta y reaccionó
Lía: adelante
Era Tamara con un enorme arreglo de flores
Tamara: son para ti
Lía se imaginó que su novio se las había ordenado desde allá y se emocionó
Tamara: veo que tu plan de escalar está funcionando
Lía no le entendió, Tamara dejó las flores en la mesa de centro y salió cerrando la puerta con ella, Lía buscó la tarjeta entre las flores, seguro era su novio para disculparse, sacó la tarjeta de un lindo sobre y leyó lo que decía
“Bienvenida al mundo de los Salvatore, quedé encantado con tu belleza y tu sonrisa…. ( número de teléfono) de Damiano Salvatore”
Lia sintió que su corazón latía a mil no sabían cómo reaccionar ella solo sentía que le estaba fallando a su novio como si tuviera la culpa de algo malo (si, es muy inocente) sin pensarlo rompió la tarjeta y la tiró en el bote de basura, agarró el arreglo y justo lo iba a tirar cuando sonrió un poco y le habló a las flores
“Lo siento, ustedes están muy hermosas pero no puedo aceptarlas, perdónenme”
soltó el arreglo en el bote de basura, Lía se supuso a recordar, Daniel antes era muy detallista y con el tiempo se le fue quitando, tenía mucho sin recibir algo de él hasta el día de su graduación, aún tenía esas flores en su departamento en agua
Se sentó en su silla y siguió trabajando, no tenía hambre, desde que habló con Daniel se le quitó el hambre así que mejor siguió trabajando y avanzando en la petición de su jefe, empezó a buscar en los mejores salones, a hacer reservaciones pero la mayoría estaban vendidas las fechas
Lía: Dios que voy a hacer (se agarró con sus dos manos la cabeza)
ya sentía hasta la vista cansada de tanto estar en la computadora
Lía: necesito descanzar, seguiré en mi casa
Ya era hora de salida así que Lía cerró su cuenta y apagó la computadora, tomo sus cosas y salió de su oficina, se despidió de su jefe, checo su hora de salida y se fue a su departamento