En contra de su voluntad, Sara, una joven dulce, amable y ciega, al ayudar a su hermana Lize a escapar del matrimonio, se ve obligada a reemplazar a la novia y termina casándose con Adam, un multimillonario considerado por todos como un hombre atractivo, pero también extremadamente frío y cruel.
Lo que comenzó como una unión por conveniencia pronto se revela como un inmersión inesperada en emociones profundas y desconocidas.
En este matrimonio inesperado, los opuestos se enfrentan a desafíos imprevistos y secretos reveladores. Entre el hielo de la obligación y la llama de la esperanza, surge la incertidumbre: ¿podrá el amor nacer entre dos personas tan diferentes?
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Capítulo 9
Sara: Me despierto temprano y siento que Lara todavía está aquí, me siento muy avergonzada por lo de ayer. Salgo despacio de su abrazo y camino hacia el baño para hacer mi higiene. Me quedo pensando en cómo voy a salir de este lugar, no estoy segura aquí y Adam no se preocupa por nadie más que por él mismo y estoy segura de que jamás me defendería. Para ser honesta, todo lo que quiero es distancia de él. Salgo del baño y sigo mi rutina, estoy segura de que todavía tendré que enfrentar la furia de Adam por haberlo abrazado.
Lara: Buenos días nuera, ¿estás mejor?
Sara: Buenos días Lara, sí, lo estoy. Gracias por ayer.
Lara: ¿Quieres contarme qué ocurrió?
Sara: He tenido días difíciles, pasé por algunas cosas y creo que se acumuló.
Lara: Adam tiene un sexto sentido increíble, no intentes mentirle a él, mi nuera. Además de odiar la mentira, él es como un perro rastreador para ellas. Sé que él no se equivocó, algo muy grave sucedió para que estuvieras en ese estado, ten en cuenta que estaré aquí para escucharte cuando te sientas segura para hablar.
Sara: ¿Por qué él es tan cruel?
Lara: Soñé con la maternidad Sara, cuando quedé embarazada mi marido perdió el empleo y las cosas se pusieron difíciles. Él era muy inteligente y comenzó desde cero nuestra empresa, fui su mano derecha e izquierda y trabajé hasta el día que entré en trabajo de parto. Mal respeté el resguardo y Adam no fue la prioridad, nos enfocamos en construir un imperio para darle una vida confortable a él. Pensé que íbamos a disminuir el ritmo y cosechar los frutos con el tiempo, pero siempre queríamos más y más. Nos tomamos riesgos y no paramos, desafortunadamente no puedo volver en el tiempo y cambiar eso. Mal veía a mi hijo, no lo vi caminar por primera vez, no fui a las presentaciones de él de la escuela, ni siquiera lo amamanté porque tenía tanto trabajo que no daba tiempo y cuando estábamos con él, estábamos agotados. Él creció prácticamente solo, odiaba a las niñeras y después de un tiempo prácticamente se crió. Cuando nos dimos cuenta era tarde, él ya no necesitaba de cariño o amor, ni siquiera le gustaba, era algo que no había experimentado y no hacía falta. Intenté acercarme a él, pero él ya estaba frío. En fin, erramos mucho con él y difícilmente él daría lo que no recibió.
Sara: ¿Justificaría ser frío, pero cruel?
Lara: Él aprendió a valerse así, si nadie entraba, nadie iba a herirlo. Si él no tuviera cariño, no lo extrañaría y si fuera cruel sería invencible. Mi marido le enseñó eso, era para ser así en la empresa, pero él llevó esa enseñanza para la vida y se volvió implacable. Él es un hombre inteligente cuando se trata de negocios, triplicó nuestro patrimonio en tiempo récord. Sin embargo, nada sabe sobre sentimientos. No imagino lo difícil que debe haber sido para él tener padres y no tenerlos al mismo tiempo.
Sara: Se nota por el peso de sus palabras que se culpa, lo siento mucho.
Lara: ¿Te gusta él Sara, te gusta mi hijo?
Sara: ¡No! Él me prometió un infierno y cumplió, es imposible enamorarse de alguien que solo le hace sufrir día tras día sin remordimiento alguno.
Lara: Creo que él siente algo por ti.
Sara: Espero que no, porque todo lo que quiero de él es el divorcio.
Lara: Una pena, pero te entiendo.
Sara: Disculpa la sinceridad, pero ya viví un infierno y no me quedaría en él por opción.
Lara: Estaré alentándote, ¡con o sin Adam quiero verte feliz!
Abrazo a Sara que corresponde al abrazo.
Sara: Lara me envuelve en un abrazo caluroso, ella es muy cariñosa, pena no haberle dado ese amor a Adam en la infancia de él.
No te rindas Lara, no te rindas de acercarte a tu hijo. Perdí a mi madre temprano por el cáncer y te afirmo que daría cualquier cosa para tenerla conmigo. Después de que Adam experimente el amor de madre, él nunca más va a alejarla.
Lara: Converso con Sara un poco más y bajamos a tomar el desayuno. Luego del desayuno, Dimitri trae algunos vestidos para que Sara se pruebe, narré cada uno de los vestidos para Sara, que se probó todos conociendo con las manos cada detalle de ellos. Ella elige uno que me pareció perfecto el calce en el cuerpo de ella. Le explico todo sobre esos eventos para ella, le quito todas sus dudas y la dejo preparada para brillar. Iré con ellos al evento, quiero acompañar a Sara para no dejar que nadie se aproveche de ella.
Josiane: Vas a infartar a todos los hombres con ese vestido en ese evento Sara.
Sara: ¡Dios me libre, solo espero pasar desapercibida!
Josiane: No pasarías desapercibida ni vestida de payasada Sara, eres una mujer linda.
Sara: ¿Me dejas tocarte Josi? Quería saber cómo eres.
Josiane me deja tocarle el rostro y me va contando los detalles como el color de la piel de ella, el color de los ojos y el color de los cabellos.
Lara: Me quedo observando a Sara, ella es una chica simple, dulce y tierna. Puedo decir que me enamoré de ella primero que el novio.
Sara: ¡Eres linda Josi!
Josiane agradece y baja un poco para organizar algunas cosas. Lara pasa el día a mi lado.
Lara: ¿Qué te gustaría hacer Sara?
Sara: Con riesgo de escuchar un no, necesito pedirte algo importante para mí y entenderé si la respuesta es no.
Lara: Dime mi nuera.
Sara: Fui prohibida de ver a mi hermana por Adam. Ella es mi mejor amiga y sinceramente no aguanto más de añoranza, ¿podrías llevarme a verla?
Lara: Puedo pensar en algo, pero necesitas entender que si sale mal y Adam sospecha tendrá un precio alto para nosotras dos. Adam odia las mentiras y no acepta ser engañado.
Sara: Entonces no, afrontaría las consecuencias si fuera solo yo a pagar, pero creo que tienes chances de restablecer tus lazos de madre e hijo con Adam y no seré yo a estropear eso. Además de eso, hablo con Lize por teléfono escondida todos los días.
Lara insiste para que intentemos y no acepto, Adam nunca le pidió ayuda a ella y él jamás la perdonaría si ella lo engañase.