Que pensarías que hay un mundo donde todos tienen habilidades asombrosas, dónde hay niños con la fuerza de díez hombres o que un simple oficinista tiene la capacidad de mover objetos a su voluntad.
Todos tienen algo que los caracteriza, que los vuelve diferentes al resto o eso sería así si fuera por qué soy el único sin un poder con el que pueda destacar.
Soy ........... Y nací como una persona normal literalmente no vuelo, escupo fuego o me muevo con gran velocidad, solo soy normal.
Se deben de imaginar cómo es vivir en un mundo donde puede hacerte papilla sin mucho esfuerzo, dónde los villanos son el día a día y dónde personas con disfraz salvan el día
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CAPITULO 5
Aoki se sintió atrapado. No había pensado en la academia y en cómo explicaría su ausencia. Se levantó de la cama y se dirigió a la sala, donde su madre lo esperaba con una expresión de preocupación.
- Mamá, lo siento - dijo Aoki, intentando sonar convincente. "He estado estudiando mucho y me olvidé de ir a la academia".
Su madre lo miró con escepticismo. "Aoki, sabes que no puedes faltar a la academia sin una buena razón. ¿Qué está pasando? ¿Estás bien?"
Aoki se sintió incómodo. No quería mentir a su madre, pero tampoco quería revelar su secreto como vigilante. Se encogió de hombros y dijo: "Estoy bien, mamá. Solo necesito un poco de tiempo para mí mismo".
Su madre lo miró con preocupación, pero finalmente asintió. - Está bien, Aoki. Pero prométeme que irás a la academia mañana y que hablarás con tu tutor sobre el porque faltaste estos día - .
Aoki asintió, sintiéndose aliviado. "Lo prometo, mamá. Gracias".
Después de la conversación con su madre, Aoki se sintió un poco más relajado. Se dirigió a su habitación y se puso su traje de vigilante, sintiéndose listo para salir a patrullar las calles.
Aoki se sintió nervioso mientras se preparaba para su primera noche como vigilante. No había tenido entrenamiento formal, pero había estado estudiando técnicas de combate y estrategias de patrulla en línea.
Se puso su traje de vigilante, que había diseñado y creado él mismo, y se dirigió a las calles, patrullando los barrios más peligrosos de la ciudad. Aoki se sintió un poco más seguro con su traje y su determinación, pero sabía que siempre había un riesgo de que algo saliera mal.
Mientras caminaba por las calles, Aoki se sintió un poco más relajado. La ciudad estaba tranquila, y no parecía haber nada fuera de lo común. Pero entonces, escuchó un grito de ayuda proveniente de una calle lateral.
Aoki se lanzó hacia la calle lateral, sin pensar en las consecuencias. Corrió lo más rápido que pudo, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. Al llegar a la calle lateral, vio a un grupo de matones atacando a un hombre inocente.
Aoki se lanzó hacia ellos, intentando utilizar sus habilidades limitadas para detenerlos. Pero pronto se dio cuenta de que estaba en desventaja. Los matones eran demasiado fuertes, y Aoki se encontró recibiendo golpes y patadas de todos lados.
Aoki se sintió mareado y confundido. Había recibido demasiados golpes, y se sentía como si estuviera a punto de desmayarse. Intentó defenderse, pero era demasiado débil. Los matones lo golpearon una y otra vez, hasta que finalmente se desplomó en el suelo.
.......Punto de Vista de Vendetta........
Me encontraba patrullando las calles, buscando cualquier señal de problemas o peligro. Había estado haciendo esto durante años, y había visto cosas que la mayoría de las personas no podían ni imaginar.
De repente, escuché un grito de ayuda proveniente de una calle lateral. Me lancé hacia allí, mi corazón latiendo con fuerza en mi pecho.
Al llegar a la calle lateral, vi a un grupo de matones atacando a un hombre inocente. Y entonces, vi a un chico joven, vestido con un traje muy parecido al mío lanzándose hacia ellos.
Me sorprendió ver al chico. No había visto a nadie más como yo en la ciudad, y no sabía qué pensar. Pero lo que me sorprendió aún más fue ver cómo el chico se lanzó hacia los matones, sin pensar en su propia seguridad.
Me lancé hacia allí, intentando ayudar al chico. Pero cuando llegué, vi que ya había sido golpeado hasta el suelo. Los matones se estaban preparando para darle el golpe de gracia, pero yo no les di la oportunidad.
Me lancé hacia ellos, utilizando todas mis habilidades para detenerlos. Los matones se dieron cuenta de que estaban en desventaja y se dieron a la fuga.
Me acerqué al chico y lo ayudé a levantarse. Estaba sangrando y tenía varios golpes, pero parecía estar bien.
"¿Estás bien?", le pregunté.
El chico asintió, aún aturdido. "Sí... gracias", dijo.
Me sonreí. "No hay problema. Pero debes tener cuidado. no sé porque estás haciendo esto pero no te párare ya que es tu decisión, pero este tipo de vida no es fácil así piensa si quieres seguir en este mundo "
El chico me miró con curiosidad. "¿Eres... un vigilante?", preguntó.
Asentí. "Sí. Y tú, ¿quién eres?"
El chico se encogió de hombros. "Me llamo Aoki. Y soy... un vigilante, supongo".
Me reí. "Bueno, Aoki. Parece que tenemos algo en común. Pero debes tener cuidado. La ciudad no es un lugar seguro para un vigilante inexperto".
Aoki asintió, aún aturdido. "Lo haré", dijo. "Gracias... gracias por ayudarme".
Me sonreí. "No hay problema, Aoki. Pero recuerda, la vida de un vigilante no es fácil. Debemos estar siempre preparados para cualquier cosa".
Vendetta vio como Aoki se desmaya por lo que esté lo toma y toma la decisión de llevarle a su lugar seguro.
Aoki se despertó después de un largo sueño, sintiendo que su cuerpo estaba aún dolorido por la paliza que había recibido. Se sentó en la cama y miró alrededor sin saber dónde estaba.
Se levantó de la cama y se dirigió al bar, donde encontró a Vendetta sentado en una silla, bebiendo un trago de whisky. Aoki se sentó en una silla cerca de Vendetta y lo miró con curiosidad.
"¿Dónde estoy?", preguntó Aoki.
"Estás en mi bar", respondió Khaos. "Es un lugar seguro para personas como nosotros".
Aoki miró alrededor y vio a varias personas sentadas en el bar, bebiendo y charlando. Pero había algo en ellos que parecía... diferente.
"¿Quiénes son?", preguntó Aoki, señalando a las personas en el bar.
Vendetta sonrió. "Son amigos míos", dijo. "Personas que, como nosotros, han decidido tomar la justicia en sus propias manos".
Aoki miró a las personas en el bar con nuevos ojos. Ahora podía ver que eran vigilantes, como Vendetta y él mismo. Pero sin sus trajes, parecían personas normales.
"Hay muchos de nosotros en la ciudad", dijo Vendetta. "Personas que han decidido luchar contra la injusticia y proteger a los inocentes".
Aoki se sintió emocionado al escuchar esto. Había pensado que era el único que se sentía así, pero ahora se daba cuenta de que había muchos más como él.
"¿Qué es esto?", preguntó Aoki, señalando al bar. "¿Un refugio para vigilantes?"
Vendetta asintió. "Algo así", dijo. "Un lugar donde podemos descansar y recuperarnos, sin tener que preocuparnos por ser descubiertos".
Aoki se sintió agradecido por haber encontrado un lugar como este. Sabía que iba a necesitar un lugar seguro para descansar y recuperarse, especialmente después de la paliza que había recibido.
"Gracias", dijo Aoki, mirando a Vendetta. "Gracias por traerme aquí".