Debido a un trauma del pasado, Chaby creció siendo una chica muy mimada. Vive dependiendo de su hermano, el único familiar que realmente se preocupa por ella.
En su primer día de clases, conoce a Pika, una chica marimacho que la invita a saltar la reja. La mala suerte cae sobre ella: no sabe cómo bajar. Con los ojos llenos de lágrimas, intenta contener el llanto. Justo en ese momento, aparece un joven apuesto llamado Decklan y la ayuda a bajar.
Decklan es el hermano de Pika. Pero es un hombre muy frío y con mal carácter. Su mirada intimidante siempre hace que Chaby baje la cabeza, asustada.
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Capítulo 5
Ambos miraron a Chaby cuando Andra mencionó la presencia de la chica.
Después de pagar los bocadillos que compró, Chaby se volvió hacia donde estaba Pika.
"¿Por qué compraste bocadillos? Eres propensa a enfermarte si comes cosas poco saludables", la regañó Pika cuando la chica estuvo a su lado.
Tres chicos guapos que estaban sentados fueron testigos de cómo Pika regañaba a la chica.
Cuando Chaby estaba a punto de explicar por qué, Pika la tomó de la mano y la sacó de la cantina sin despedirse de Decklan ni de sus dos amigos.
"Se fueron sin despedirse", dijo Andra mientras seguía con la mirada a las dos chicas que casi desaparecían del lugar.
A Decklan no pareció importarle. Miró a Bara brevemente. Su mirada se posó en la foto de una pareja que Bara estaba viendo en el Instagram de alguien. Enarcó las cejas, la chica de la foto se parecía mucho a la amiga de Pika. Andra también miró el teléfono de Bara.
"¿Esa es tu hermana? ¿Por qué está en una foto con la amiga de Pika? ¿Están saliendo?", preguntó con curiosidad.
Bara miró a Decklan y a Andra. Por alguna razón, Decklan también sentía curiosidad.
"No lo sé", respondió Bara con indiferencia.
"Eres su hermano, deberías saberlo", dijo Andra.
Bara se encogió de hombros con indiferencia. No le importaba la relación de su hermana, Galen rara vez estaba en casa, así que ¿por qué le importaría?
\*\*\*
"¿Vendrás a mi casa, verdad?", preguntó Pika a Chaby en clase. La miró con esperanza.
Chaby miró a Pika mientras pensaba. No estaba segura de que su hermano Danzel le permitiera ir a casa de Pika. No es que no quisiera que tuviera amigos, sino que su hermano no conocía a Pika. Podía pensar que Pika era una mala influencia.
"By, ¿me estás escuchando?", preguntó Pika de nuevo.
"¿Qué pasa si mi hermano no me deja ir?"
Chaby respondió con otra pregunta.
"Dile que tienes que hacer una tarea para mañana".
"Pero..."
"Vamos, By, me lo prometiste", insistió Pika, poniendo a Chaby en un aprieto. Era cierto que se lo había prometido.
"Está bien, le preguntaré a mi hermano", dijo.
Pika vio a Chaby sacar su teléfono y llamar a alguien que supuso era su hermano. Hablaron largo y tendido por teléfono.
"¿Y bien?", preguntó Pika de nuevo después de que Chaby terminara su conversación telefónica.
"Puedo ir, pero mi hermano me recogerá esta noche. Dijo que le diera tu dirección a Danzel", respondió Chaby mirando a Pika. La chica asintió felizmente.
"De acuerdo, darle la dirección de mi casa es fácil. Venga, vamos a recoger tus cosas", dijo con entusiasmo.
\*\*\*
Ahora las dos adolescentes estaban paradas frente a una casa grande y lujosa que pertenecía a la familia de Pika.
Chaby miró la casa con asombro. En su opinión, la casa de Pika era como un palacio. La familia de Pika era muy rica.
"Cierra la boca", dijo Pika al ver la boca de Chaby abierta de par en par frente a su casa. Qué paleto, pensó divertida.
"¿Nunca has visto una casa así?", preguntó después. Chaby asintió rápidamente.
Su hermano tenía mucho dinero, pero no vivían en una casa con un jardín tan bonito, piscina y zona de juegos, vivían en un apartamento. Aunque el apartamento en el que vivía con su hermano también era bastante lujoso.
"Bueno, vamos a entrar", dijo Pika tomando la mano de Chaby para entrar en la casa. Fueron recibidas por la madre de Pika en la sala de estar.
"¿Así que esta es la amiga de la que siempre me hablas?", preguntó la madre de Pika con una amplia sonrisa. Chaby respondió con una sonrisa tímida.
"Sí, mamá, se llama Chaby", dijo Pika con entusiasmo.
"Buenas tardes, señora", saludó Chaby un poco incómoda. Pensó que la madre de Pika era muy guapa. No era de extrañar que sus hijos fueran tan atractivos.
"Tienes una cara muy dulce, te queda muy bien tu nombre", elogió la madre de Pika, a quien todos llamaban tía Lily. Chaby respondió con una dulce sonrisa. Esta vez no estaba tan rígida como antes.
"Bueno, mamá, Pika y Chaby subiremos a mi habitación", dijo Pika mientras subía las escaleras arrastrando a Chaby.
La chica se dejó llevar. Estaba acostumbrada.
Cuando llegaron al piso de arriba, Pika de repente recordó algo. Se detuvo y miró a Chaby por un momento. La chica la miró confundida.
"Olvidé algo abajo", dijo. Chaby la seguía mirando con la misma expresión.
"Ve a mi habitación, la puerta es blanca, ahora bajo", después de explicarle dónde estaba su habitación, Pika se dio la vuelta y bajó corriendo las escaleras.
Chaby observó a la chica irse por un momento y luego volvió a mirar hacia delante, hacia la habitación que Pika le había indicado. La puerta blanca que dijo que era su habitación. Caminó lentamente y se detuvo frente a la habitación de la puerta blanca. Cuando abrió la puerta, la chica se sorprendió al ver que un perro pequeño saltaba hacia ella.
Sin pensarlo dos veces, corrió tan rápido como pudo mientras gritaba y entró en otra habitación del piso.
"¡Aaaah!"
La chica corrió aterrorizada.
\*\*\*
Ese día, Decklan decidió irse a casa después del colegio. Normalmente, se quedaba con Andra y Bara, pero por alguna razón ese día no tenía ganas de quedarse y prefirió irse a casa. Tenía sueño.
Cuando estaba a punto de desabrocharse el uniforme, oyó un fuerte grito y alguien irrumpió en su habitación. No sólo eso, sino que la persona saltó sobre él, rodeándole la cintura con las piernas, lo que le sorprendió enormemente. No pudo ver quién era, pero estaba seguro de que era una mujer.
Decklan pudo sentirlo porque sus cuerpos estaban juntos. Sólo que seguro que no era Pika. Su hermana nunca se habría atrevido a entrar en su habitación así, y Pika era mucho más pesada que la chica, que le parecía muy ligera.
¿Pero quién?
No había otras mujeres en la casa aparte de su madre y su hermana. Era muy ligera, ¿era una niña pequeña? No, no. Sacudió la cabeza. Era imposible que fuera una niña pequeña. Con la forma en que estaban uno encima del otro, sabía que quienquiera que estuviera en sus brazos no era una niña.
Decklan levantó la vista para ver quién era la chica. Cuando la vio, la reconoció al instante. El chico resopló. Era la chica torpe otra vez. Chasqueó la lengua con molestia.
"Baja".
Ordenó con severidad, pero la chica no se movió.
"¡Te he dicho que bajes!", espetó furioso.
