Mi Falso Prometido.

Mientras ambos seguíamos disfrutando de playa, mire a mi jefe por un momento y sonreí al verlo tan infornal y desprolijo, era la primera vez que hablaba con él de esta manera, desde que había empezado a trabajar en la compañía, Dylan se mantenía serio y distante de todos sus empleados, no esperaba que fuera alguien tan elocuente.

De pronto quiso comenzar a charlar y preguntó.

— ¿Por qué decidió estudiar arquitectura?

Lo miré de reojo y volviendo mi vista al mar conteste.

— No lo sé, me gustaba el diseño...

— Y si es así ¿por qué no siguió los pasos de su madre? — Volteo a verlo y este agrega — lo siento, mi padre siempre habla de usted, sentí curiosidad.

— El señor Felipe es un hombre muy bueno, me recuerda mucho a mi papá. — hago una pausa después de decir eso y agregué — La moda no es lo mío, mi madre y mi hermana son excelentes en su trabajo, ella adora diseñar y crear sus prendas, pero cuando descubrí que no era lo mío, me costó un poco decirles que el diseñar ropa no era para mí. Yo soñaba con crear hogares, puentes, edificios... no lo sé, de todo menos ropa, toda la vida había vivido en ese mundo tan superficial en el que mi madre vive y nunca me llamo la atención. ¿Usted porque lo hizo?

— Es obvio, alguien tenía que tomar el mando de la empresa cuando mi padre ya no esté.

— Pero... sé que es muy bueno en lo que hace, pero ¿le gusta? ¿Este era su sueño?

— De niño adoraba ver las creaciones de mi padre hechas realidad, así que sí... se podría decir que siempre soñé con un día poder ser como él.

— Pues ponte en la fila, ese también es mi sueño. — Veo como sonríe y agregó — No sé si lo sabes, pero tu padre y el mío son buenos amigos.

Veo como sonríe al oír como lo tuteo, pero no dice nada y contesta.

— Lo sé.

— Cuando termine mis estudios a la primera empresa que le envié mi currículo fue a la suya, pero había una lista de espera muy larga. Mi padre le contó esto y pidiéndome otro currículo él se encargó personalmente de enviarlo a recursos humanos y desde entonces me he esforzado para que nunca tenga que lamentar esa decisión.

Estoy agradecida con él por eso. En su empresa he podido crecer y aprender mucho tanto de él, como de usted. En este último año he aprendido muchas cosas.

— ¿Volverás a tratarme de usted? Creo que ya puedes tutearme.

— Solo si tú haces lo mismo.

Veo como asiente y agrega

— Puedo hacerte una pregunta algo personal...— Asiento y este agrega — ¿Por qué rompiste tu compromiso?

Guarde silencio y al ver que él iba a volver a hablar dije.

— Yo no lo rompí... De hecho mis padres aún no lo saben.– Veo como me mira y agregó — Mateo... mi ex decidió terminarme. No me dio una explicación clara de porque lo hizo, pero decidí aceptar su decisión. No puedes obligar a alguien a que te quiera.

Veo como solo me observa y luego dice.

— Entiendo... — Veo como quiere preguntar algo más pero calla.

— Adelante. Pregunta.

— ¿Por qué no le dijiste a tu familia aun?

— Porque apenas me acabo de enterar, ellos iban a venir para conocerlo en un mes, voy a aprovechar esa fecha para decirles la verdad en persona. No quiero que se preocupen por mí y vengan dejando sus trabajos tirados. Ya soy una adulta, puedo con esto.

— Y si no les dices.— Volteo a mirarlo y agrega— Espera no me mires así, tal vez es una locura lo que te estoy por proponer, pero escucha mi propuesta y luego me dices. — Asiento levemente y este luego de un suspiro dice— Este proyecto es mi prueba para saber si estoy listo para tomar el mando de la empresa. Mi padre junto con mi abuelo han decidido que ya es momento de que las próximas generaciones tomen el mando y nos han puesto a competir por el liderazgo a mi primo y a mí. Ambos estamos capacitados, tal vez mi reputación pese un poco más que la suya, pero... mi abuelo es un hombre chapado a la antigua, él quiere que ambos contraigamos matrimonio antes de que eso suceda.— Veo como voltea a ver el mar y dice. — No te digo que nos casemos, solo que finjamos estar en una relación o compromiso y cuando tome el mando de la empresa separarnos.

Veo que me vuelve a mirar y al oír lo loco que suena todo río y contestó.

— ¿Esto es una broma?

— Hablo muy enserió.

— Esto es una locura, sin mencionar que mi trabajo corre peligroso en todo este circo.

— No, prometo que eso no pasará, cuando tome el mando prometo hacerte líder de proyecto.

— Eso siempre y cuando tú ganes. ¿Qué pasara con nuestras familias? Nuestros padres son amigos, se conocen desde antes que tú y yo naciéramos. ¿Cómo vamos a explicar esto? Además puede que mis padres no conozcan a mi ex, pero si saben como se llama.

Veo como lo piensa por un momento y dice.

— Que tal si le decimos que lo ocultamos porque no queríamos apresurarnos, sabíamos que las familias eran amigas y que quisimos ir con calma antes de decirles la verdad... Y con respecto al nombre bueno es lo de menos, lo hicimos para despistar.

Me levanté de la arena y mirando seriamente a mi jefe dije.

— No va a funcionar, la empresa sabe que estoy de novia con Mateo.

— Pues no se nota, yo hasta hoy supe de su relación. Estoy seguro de que mi padre no lo sabe, y a él es a quien tenemos que convencer. Por favor piénsalo. Necesito ganar, he trabajado toda mi vida para esto, no es justo que me lo quieran arrebatar. Tú eres la candidata a novia perfecta, trabajadora, de buena familia, ambos somos del mismo círculo social. Tanto mi padre como mi abuelo no podrán decir nada con respecto a ti.

— Lo siento, pero no puedo. Mi familia no va a perdonarme si se enteran de que les mentimos.

Al ver como bajo el rostro iba a disculparme e irme pero pronto dijo.

— Voy a ser sincero contigo. Cuando el abuelo puso esa estúpida cláusula, empecé a buscar a la mujer con la cual fingiría estar en una relación y al ver que ninguna mujer podría aceptar un trato así sin involucrar los sentimientos estaba a punto de desistir, pero hoy cuando oí tu discusión con el arquitecto, esta idea estuvo dando vueltas en mi cabeza nuevamente. No estás preparada para iniciar una nueva relación y mucho menos por como dices que terminaron las cosas, tal vez ambos podamos ser beneficiados con este trato. Tú no tendrás que decirle a tus padres lo sucedido, podrás conseguir un ascenso y podrás demostrarle a ese tipo que no te derrumbó. — Miró directamente a los ojos de Dylan y escuchando atentamente a sus palabras, este agrega. — Por lo que dijiste cuando te pregunte por él, sé que su sorpresivo arrepentimiento te lastimo. No te culpó, me sorprende lo bien que sabes disimular tu humor. Pero por favor piensa en mi propuesta, esto puede ser un ganar, ganar para los dos.

Me mantengo en silencio y pensándolo por un instante, recordé todo lo que Mateo me dijo al salir del restaurante y como me terminó, no quería admitir que él tenía razón, además en cuanto volviera todo mundo sabría lo que había pasado y su lástima y miradas de burlas comenzarían. Con este trato también me evitaría toda esa humillación.

En silencio volví a tomar asiento a su lado y conteste.

— Sin sentimiento, ni mentiras. Conozco tu reputación y tú no estás solo porque quieres. — Veo como sonríe y agregó — Sé discreto mientras nuestro trato dure y estaremos bien. No me gustaría que la humillación qué me estoy ahorrando ahora, en un futuro sea peor.

— ¿Eso quiere decir que aceptas?

— Solo si tú aceptas ser mi falso prometido. Mi familia cree que en seis meses me voy a casar, debemos seguir con todos los preparativos hasta que decidamos terminar esta relación.

— Muy bien, en cinco meses tendremos este proyecto terminado, eso nos deja un margen de un mes para acabar con nuestro trato.

— Dios ¿y si no lo logramos?

— Por supuesto que lo haremos. Confía en mí.

Suspiré frustrada y luego de eso ambos decidimos volver a nuestras habitaciones, no sabía como iba a terminar esto, pero cinco meses no eran nada, solo tenía que aparentar, ¿Qué tan difícil podía ser eso?