Doctora O

Hyun Joong ha culminado su seminario con un cuadernillo repleto de anotaciones, él recibió un certificado de participación, los ponentes también reciben sus certificados, pero Audrey recibió una llamada de ayuda en plena clausura del seminario. Ella debe viajar está noche, y Hyun Joong aprovecha la oportunidad para almorzar con ella, pero tiene competencia.

- Doctora Walls , la invito a almorzar – se ofrece uno

- Audrey ¿Me acompañas a almorzar? – ofrece otro.

- Doctora, yo le puedo preparar lo que usted quiera. - Oferta Hyun Joong.

Todos guardan silencio, ¿un doctor que va a cocinar lo que ella desea? ¿Un asiático? Esas cosas pasan por la cabeza de los colegas.

-Por favor, acepte esta invitación. Sé muy bien que usted no dispone de mucho tiempo, pero quiero cocinar para usted cómo muestra de agradecimiento.

Hyun joong le da su mano, para que ella sólo tenga que apoyarse en la suya y salir como si se tratase de una gala. Audrey no sabía que hacer, ella veía la persistencia de Hyun Joong y no tuvo más remedio que aceptar la invitación del surcoreano. Los demás colegas murmuran, rajan a espaldas del joven surcoreano, a nadie le gustó perder la oportunidad de almorzar con Audrey.

Cómo la noticia de que ella rechazó el premio Nobel se ha viralizado, los paparazzi no se hicieron esperan, fueron a esperar a la salida del auditorio y actúan como si fueran visitantes para poder capturar fotos de la ex Nobel, cuando la vieron acompañada de un hombre alto y de rasgos asiáticos no dejaban de fotografiar a la pareja. De inmediato empezaron a circular por las redes sociales los rumores de que “La ex Nobel de la paz tiene compañero de vida”, “La ex Nobel es novia de un asiático”, ¡La ex Nobel es la esposa de un médico del nada conocido”, “La doctora O ha revelado en silencio su secreto mejor guardado”! y otros titulares por el estilo.

Hyun Joong invita a Audrey a que suba a su auto, un Hummer, y él mismo conduce hasta su departamento. El edificio donde Hyun Joong radica es de lujo, ella se queda asombrada al ver el estilo de vida que él acostumbra a tener.

- ¿Aquí vives? - lo ve y no lo cree.

- Al quinto piso.

- El edificio es muy bonito. – sin dejar de asombrarse.

- Entra, por favor. – la invita a entrar al ascensor.

Cuando el ascensor llega al quinto piso, se abre la puerta, dan dos pasos y están dentro del departamento. La sala está decorada con objetos de cerámica, la tecnología que tiene es de última generación, y tiene concepto abierto. Hyun Joong le da atención.

- ¿Qué te gustaría beber?

- Agua mineral, está bien. Gracias.

- ¿Qué te gustaría comer? ¿Pollo al horno?

- ¿De verdad puedes cocinar pollo al horno?

- Sí. Ponte cómoda.

Hyun Joong le dispone de un vaso servido con agua mineral y adicional la botella por si quería más, luego se va a la cocina para cocinar, el pollo lo retira de un contenedor que estaba en la encimera pues lo dejó macerando desde la mañana.

Charlan de temas triviales, hasta que el pollo ingresó al horno y mientras se cuece el pollo, él se sienta frente a ella con una lata de cerveza en mano. Busca sus ojos del color del jade, para perderse en ellos como si fuera un laberinto.

- ¿Qué planes tiene para el próximo mes? – Hyun Joong quiere conocer más sobre su rutina.

- Nunca se sabe lo que puede pasar un día por otro, es difícil hacer planes.

- Entonces ¿Qué le gustaría hacer?

- Me gustaría aprender a cocinar más cosas, hacer manualidades… cosas por el estilo.

- ¿Le gustaría tener su propio taller de manualidades?

- Si, pero para eso debería tener una casa. – se desanima un poco, ella no cuenta con medios para comprar una casa grande suficiente.

- ¿Si alguien le regalara una casa la aceptaría?

- Gracias, pero prefiero con mis propios esfuerzos. Ahora debo hacer mi maleta tengo que viajar esta noche para Sudan.

- ¿Está noche? ¿A qué hora es el vuelo? Te llevo al aeropuerto.

- No, no hace falta. Me van a recoger.

- ¿Qué tipo de trabajo es? Conflicto armado, desastre natural o...

- Campaña de la lucha contra la desnutrición. Son varios países que atender durante la campaña, a mí me toca Sudan específicamente la cuidad de Darfur.

- Es un viaje largo.

- Siempre estoy viajando. Cuando me llaman es porque ya está listo el boleto.

- ¿Cuánto tiempo dura una campaña?

- Por lo general dos semanas, pero a veces suceden imprevistos y se prolonga entre tres días hasta semanas.

- Entonces, se pierden vuelos.

- Sí, suele pasar. No son frecuentes, pero suceden.

Hyun Joong está acumulando información, muestra interés y pide información sobre culturas de ciertos países, condiciones climáticas y todo lo necesario, da la impresión de querer hacer lo mismo.

A cierto punto de la conversación, el olor a pollo invade la sala. Es hora de comer el pollo horneado por Hyun Joong.

A Audrey le sirve la mejor parte, esa que está más dorada y mejor sazonada, y para él se sirve lo que está algo pasado de cocción. La invitada de Hyun Joong quedó fascinada con las habilidades culinarias de un doctor, ella se chupaba los dedos de vez en cuando, Hyun Joong le extiende una servilleta, pero verla disfrutar cuando chupa los dedos la causa gracia. Fue un éxito para él.

- Me encanta este pollo. Nunca había comido algo tan rico.

- No es para tanto, sólo soy doctor y surcoreano.

- Pero está muy bueno, debo felicitarlo, me conquistó el paladar.

- Sólo hice mi mejor esfuerzo. Ese tipo de macerado es el que prepara en mi país.

- Entonces en Corea se come bien.

- Nos gusta mucho la comida picante, pero como yo no sé sus gustos en cuanto a comida, puse poco picante.

- Pues hizo bien, no soy muy tolerante con el picante.

Después que se hubo terminado de comer, Hyun Joong y Audrey lavan los trastes, luego toman una copa de vino para ayudar a la digestión y Hyun Joong la lleva a su edificio para que la doctora pueda preparar su maleta y hacer el gran viaje.

De retorno a su departamento, Hyun Joong se sienta sobre el sillón y su rostro esta inexpresivo, luego se le ve pensativo, nunca se había sentido así, quiere tocar su guitarra, pero nada. Su mente está hecha un desastre, no puede pensar con claridad, la presencia y compañía de Audrey ha puesto su mundo de cabeza, haber prestado tanta atención a los comentarios de la doctora, el haber investigado tanto sobre ella, y el saciar su curiosidad de tratar con ella tienen sus consecuencias y su obsesión por esos ojos color jade. Los minutos se hacen horas y se quedó dormido sobre el sillón.