Renaciendo Como La Villana: Bianca

Al día siguiente, tal como su padre le había dicho se presentó ante ella un hombre de aproximadamente 45 años, de cabello castaño y ojos miel, era dueño del mejor bazar del ducado.

- Mi lady buenos días, mi nombre es Fausto Lowell, su padre me pidió que viniera a enseñarle como llevar las riendas de un negocio, estoy a sus órdenes. - hizo una reverencia.

- Buen día sir Fausto. - correspondiendo la reverencia-, muchas gracias por tomarse el tiempo de venir hasta aquí, por favor sigame, pasemos a la biblioteca para comenzar las clases.

Camino a la biblioteca le pidió a una de las doncellas que les prepararan té y bocadillos, luego de entrar el profesor comenzó a explicarle lo básico para que se fuera familiarizando con los temas que iban a tratar durante el tiempo que duraran las clases, al cabo de 3 horas el profesor decidió que era momento de parar las clases y continuar otro día.

- Lady Bianca puedo ver las ganas que tiene de aprender, le está poniendo mucho empeño, vendré 3 veces a la semana mientras vaya estudiando los temas que le dejé.

- Gracias sir Fausto, así será.

Durante el almuerzo, estuvo hablando con sus padres sobre como le había ido el primer día con las clases y ella informó que habían sido productivas y esperaba pronto poder comprender todo a la perfección.

Por la tarde su padre la llamó a su despacho para presentarle a quien estaria a cargo de enseñarle a manejar la espada, este era Rafael Martinez, capitán retirado del escuadrón que vigilaba la frontera sur del ducado pero por una herida durante un enfrentamiento con unos bandidos que trataban de saquear una aldea no pudo seguir en servicio.

Estuvieron de acuerdo en comenzar con el entrenamiento al dia siguiente y que debería llevar ropas adecuadas que le permitieran libre movimiento, despues de hacer una reverencia ante los mayores en el despacho, salió de inmediato en busca de Molly para enviarla a comprarle ropas para entrenamiento y que le pidiera a la modista ir lo mas pronto posible al ducado ya que deseaba mandar a hacer algunas prendas, Molly así lo hizo y casi al anochecher estaba de regreso con el encargo que su señorita le habia pedido.

La mañana siguiente al rayar el alba ya Bianca estaba preparandose para dirigirse al campo de entrenamiento tal como habia quedadl con el capitán.

- Lady Bianca, veo que es usted muy comprometida con lo que se propone pero debo decirle algunas cosas antes de comenzar, espero pueda entenderlas sino es usted libre de retirarse cuando guste.

- Claro capitán, lo escucho digame.

- En el campo de batalla el enemigo no tedrá piedad con usted solo por ser mujer, así como yp tampoco la tendré al momento de entrenarla, mientras esté aqui no es la hija de un noble ni aunque fuera hija del mismisimo rey por lo tanto debe olvidarse de su estatus, mientras esté bajo mi mando será solo un soldado más y como tal será tratada, no habrá privilegios ni atenciones especiales a su persona, ¿ le ha quedado claro ?, ¿ esta usted dispuesta a continuar con el entrenamiento ?

- Por supuesto capitán, no esperaba menos.

En cuanto terminaron de hablar el capitán les pidió a los demás soldados que estaban preparándose para entrenar que guardaran silencio mientras presentaba a Bianca , después de las presentaciones los mandó a dar 5 vueltas completas al campo y luego tomaran un descanso de 5 minutos para continuar con el entrenamiento.

Al terminar de correr las 5 vueltas que les mandaron las piernas de Bianca quedaron temblando ya que ese cuerpo no hacia ni un poco de ejercicio y no tenia ni un gramo de músculo, además muy poca resistencia, pasado el tiempo de descanso el capitán les ordena que comenzaran con la lucha cuerpo a cuerpo pero a Bianca la mando a colgarse en una barra metalica que había en una estrucutura durante 10 minutos y luego que terminara fuera a descansar, le dijo que el primer mes antes de poder aprender a luchar cuerpo a cuerpo debia ganar resistencia tanto en brazos como en piernas y ella así lo hizo.

En cuanto entró a la casa le pidió a Priscila que le preparara su baño y un medicamento para calmar los dolores en sus músculos, una vez estuvo limpia se acostó y quedó profundamente dormida por el cansancio.

Cuando los primeros rayos del sol comenzaron a salir Bianca estaba lista para seguir el entrenamiento, sabia que seria doloroso pero no se rendiría aun a pesar de su cansancio.