El padre mafioso de mi hija

Después de pasar la tarde en el hospital hablando con el médico y organizando todo para el viaje de Mavie, Sabrina aceptó la oferta de Don Mauricio de llevarla a casa, necesitaba comenzar a empacar sus maletas y las de su hija. Se despidieron y al entrar en la casa de Ieda, encontró a Soraia, Ieda y Camila en la cocina preparando la cena, ansiosas y esperando por Sabrina.

- Hija, qué bueno que llegaste, estábamos preocupadas - dijo Soraia al ver entrar a Sabrina.

- Fui a el hospital después de almorzar con Don Mauricio - comentó Sabrina, sentándose en una silla cerca de la mesa.

- Intenté llamarte, Sah, pero tu teléfono estaba apagado - Camila estaba poniendo la mesa para cenar.

- Se me agotó la batería - explicó Sabrina sacando su sencillo y dañado teléfono de la bolsa y poniéndolo sobre la mesa.

- ¿Cómo fue el almuerzo? - preguntó preocupada Soraia.

- Bien, antes que nada quiero decirles que he reflexionado mucho sobre la salud de mi hija, he aceptado casarme con Don Mauricio - anunció Sabrina.

- Sabrina, entiendo que quieres lo mejor para Mavi, pero casarte con un mafioso no es la solución. Hay otras formas de conseguir ayuda, no puedes hacer esto - Soraia se mostró seria.

- Comprendo tus preocupaciones, pero nadie más está dispuesto a ayudarnos. No puedo simplemente ignorar esta oportunidad - explicó Sabrina.

- Sabrina, escucha a tu madre, necesitas alejarte de ese hombre. Es demasiado peligroso. No puedes involucrarte con la mafia - Ieda manifestó nerviosa.

- Entiendo sus preocupaciones, madre, Ieda. Es aterrador y complicado manejar todo esto. Pero también debo pensar en Mavi y en la cirugía que necesita. Don Mauricio se ofreció a pagar todo, está resolviendo las cuestiones de nuestros visados y nos iremos a Estados Unidos para hacer la cirugía de Mavi - Sabrina dijo luchando por controlar sus emociones.

- Sabrina, no puedes simplemente involucrarte con un hombre peligroso como Don Mauricio. ¡Es el líder de la mafia siciliana! ¿No tienes idea del problema en el que te estás metiendo? - preguntó Soraia con preocupación.

- Lo sé, madre. Conozco los riesgos, las consecuencias. Pero se trata de la vida de Mavi. ¿Y si esta es la única oportunidad de salvarla? La cirugía de Mavi es extremadamente costosa, y yo no tengo recursos para cubrir los gastos. Don Mauricio ya está arreglando todo.

- Sabrina, no puedes involucrarte con el líder de la mafia siciliana. No quería hablar de esto, pero ya viví ese tipo de vida en el pasado y sé que no trae más que dolor y peligro. No puedo permitir que pongas tu vida y la de Mavi en riesgo de esa manera - dijo Ieda con indignación.

- Ieda, entiendo tus preocupaciones, pero la decisión final es de Sabrina. Necesitamos apoyarla, independientemente del camino que elija. Ella es una adulta y sabe lo que es mejor para ella y su hija. No podemos olvidar que cada día que pasa, las horas de Mavie están contadas - interrumpió Camila en el debate.

- Comprendo sus preocupaciones y también tengo mis propias dudas y temores. Nunca pondría en peligro la vida de Mavi, pero tampoco puedo ignorar la oportunidad de salvarla. Sé que Don Mauricio está involucrado en asuntos oscuros, pero mostró genuina preocupación por Mavi. Debemos considerar todas las opciones.

- Entiendo que estás luchando por el bienestar de Mavi, pero debes entender que las consecuencias de involucrarte con Don Mauricio pueden ser impredecibles. La mafia es un mundo peligroso y cruel - Ieda insistió con una expresión grave.

- Escucho sus palabras, sé que la vida está hecha de decisiones difíciles, pero al final del día, lo que cuenta es el amor y la seguridad de Mavi. Haré lo posible por protegerla, pero necesito salvar su vida en este momento. Cuento con su apoyo y confidencialidad para que nadie se entere de esto - afirmó Sabrina con determinación.

- Hija, entiendo tus preocupaciones, pero, como madre, te apoyo. Si esta es la única manera de asegurar que Mavi tenga la cirugía que necesita, entonces quizás sea el mejor camino a seguir - Soraia dijo, poniendo su mano sobre el hombro de Sabrina.

- Sabrina, no es una decisión fácil de tomar, pero no estás sola. Estaremos a tu lado, enfrentando todos los desafíos que surjan. Lo importante es la salud y el bienestar de Mavi - comentó Camila con una mirada solidaria.

- También estaré a tu lado, Sabrina, pase lo que pase, y claro que este tema no saldrá de aquí, puedes confiar en nosotras - agregó Ieda todavía preocupada.

- Vamos a fumar uno, realmente estoy tensa - dijo Camila encendiendo un porro que tenía en su bolsillo y comenzó a fumar.

- Yo también aceptaré, perdí el apetito - dijo Sabrina y Camila le pasó el porro.

- También voy a fumar, estoy completamente nerviosa - dijo Ieda yendo a su bolso, sacó un porro delgado y lo encendió.

- Ieda, hoy incluso yo fumaré para recordar los viejos tiempos - agregó Soraia después de apagar las hornallas.

- Lo más importante es que Mavie se someterá a esa cirugía tan necesaria - comentó Camila mientras fumaban.

- Sí, Camila, estoy deseando que llegue - comentó Sabrina.

- Extraño mucho ver a esa pequeña jugando aquí en casa - dijo Soraia fumando.

- Tienen razón, lo importante es que Mavie pronto estará bien y aquí con nosotras.

- Ahora vamos a cenar o la comida se enfriará - dijo Soraia sentándose a la mesa.

Asintieron y se sentaron a la mesa para cenar, dejando de fumar, y mientras disfrutaban de la deliciosa comida, conversaron tratando de aliviar la tensa atmósfera de la cocina. Sabrina sabía que tendría que lidiar con las consecuencias de sus decisiones, independientemente de cuál fuera la elección que hiciera. Sentía el peso de las responsabilidades que había asumido para salvar la vida de su hija.

Mensaje de la autora: Deseo pedirles educadamente a aquellos que estén en contra del uso de cannabis (marihuana) que dejen de leer este libro, pues encontrarán múltiples ocasiones en las que ellas fuman, y quiero dejar claro que Sabrina no fumó durante el embarazo, ni fuma cerca de la niña. Mavie nació con problemas respiratorios por una desgracia de la vida, estoy cansada de hipócritas que culpan a Sabrina por la enfermedad de la niña. Nunca he visto tantas brujas adivinando por qué o por qué no la niña tiene esta enfermedad, parece que no leen lo que escribí al principio y solo vienen a criticar. Nunca he escrito que Sabrina fumara durante el embarazo, así que dejen de comentar tonterías en mi obra, dejen de decirme qué escribir o no, esta historia ya está terminada y no cambiaré porque no les guste el tema que estoy tratando en MI LIBRO. ¡Sean conscientes y dejen de leer! Simplemente voy a bloquear a todos los que hagan comentarios sobre esto en la obra, ¡porque no trabajo para ustedes! Sepan apreciar una obra o vayan a leer otra, porque criticar no me hará cambiar, seguiré hablando del tema y al que no le gustó, que luche. En fin, este mensaje es solo para aquellos que no les gusta el tema y se quedan aquí criticando en lugar de ir a leer otra historia o escribir la suya. No entiendo que pierdan tiempo con este texto largo sobre lo que es ilegal o no, tortura, muerte, robo, mafia, todo eso también es ilegal, así que no tiene sentido que la persona solo venga a hablar de que el porro es el problema.