Segunda parte de " Mi antiguo guardaespaldas "
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Capítulo 23
( Donato )
Desde que me enteré que mi peor pesadilla había regresado me sentía paranoico, nunca fui un hombre de temerle a nada, pero desde que Roma estaba a mi lado me aterraba pensar en que algo malo le sucediera y con mi ex rondando debía de estar muy atento, ya que de una loca como ella cualquier cosa se puede esperar
Lorenzo y los chicos me habían invitado a ir un rato al club pero justo esa noche tenía una cena con unos posibles socios, al terminar la reunión recibí un mensaje de uno de los guardias que había puesto para Roma sin que ella supiera avisándome de lo que había sucedido, salí literalmente corriendo del restaurante bajo la atenta mirada de las personas que estaban en el lugar
Llegué al club baje apresurado del auto y cuándo iba a entrar me encontré con mi pequeña que se iba a casa de Lorenzo, la abrace fuerte, de sólo pensar que podría haber estado en peligro me hacía hervir la sangre de odio
Se que Lorenzo jamás dejaría que nada malo le pasé a su hermana pero de cualquier forma no podía estar al cien por ciento seguro, decidí llevarla conmigo, yo daría hasta mi vida sin pensarlo por Roma, antes de subir al auto Giuliano me llamo y lo que me dijo alteró mi sistema nervioso, la droga no era para Giulia sino para Roma, de tan solo pensar que alguien tocará o intentará tocar a mi princesa me producía querer matarlo de la manera más lenta y dolorosa que pudiera existir, el tipo no quiso decir para quién trabajaba, le pedí que me lo enviaran a mí yo lo iba a hacer hablar aunque lo tuviera que despellejar vivo
Roma estaba algo tomada, cuando me detuve en el semáforo ella aprovechó para besarme, fue un beso apasionado, cómo pude estacione el auto y de un momento a otro ella estaba encima de mí, baje mis besos a su cuello y cuando llegue a sus pechos reaccione, no estaba bien lo que estaba haciendo
- Espera mi amor, este no es el momento - dije separándola de mi, ella me miró con tristeza.
- Hice algo mal - pregunto haciendo puchero
- No mí amor, claro que no.. - respondí acariciando su bello y angelical rostro
- Y Entonces porque me rechazas? - dijo con lágrimas en sus ojitos.
- No mi amor, no te rechazo, sólo que tú mereces algo mejor, tú primera vez tiene que ser especial, no contra el volante de un auto - dije y ella se levantó molesta de encima de mi
No había nada en el mundo que deseará más que estar con Roma, hacía mucho tiempo no estaba con una mujer y no fue fácil lograr contenerme pero no podía hacer esto ella merecía algo inolvidable y ahora estaba algo tomada, mañana hasta quizás ni se acordará de lo que habría pasado
Arranqué el auto y volví a conducir durante todo el trayecto ninguno hablo, Roma se había dedicado a observar por la ventanilla, tal vez estaba algo molesta porque pensaba que la había rechazado y yo estaba sumido en mis pensamientos, no paraba de pensar en cómo poner a mi pequeña a salvó, haría lo que fuera por ella, si algo le pasará por mi culpa no me lo perdonaría nunca
En mi mente pasaban Miles de ideas para proteger a Roma, no quería que la alejaran de mi, no de nuevo, pero se que apenas Mauricio se entere de lo que pasó, la volverá a sacar del país, sé que es por su bien, pero no creo poder soportar perderla de nuevo
Otra de las soluciones que cruzaban por mi mente y que no me enorgullecía para nada era terminar con la vida de mi ex esposa, jamás he dañado a una mujer, pero Ileana más que mujer era un demonio, aveces podía parecer algo tonta, pero solo es una máscara para ocultar la maldad que lleva en su alma, se que maneja una pequeña parte de la mafia de su padre, el cuál es otro problema, ya que ante lo más mínimo que le sucediera a su hija, no tardaría en atacarnos y con el si que no se jode, a su esposa jamás la conocimos, no se porque siempre se empeño en mantenerse oculta de todos nosotros, ni a la patética boda vino, jamás entendí porque demonios mi padre me obligó y juro que cuando digo que me obligó es literalmente así a casarme con esa desquiciada
Llegamos a mi mansión y Roma bajo sola sin esperar a que le abriera la puerta la observé en silencio, caminaba con sus brazos cruzados y con un evidente puchero, conclusión estaba enojada y ahora tendría que hacer méritos para que se le pase el enojó, lo peor fue cuando no quiso dormir conmigo y le pidió a la empleada que le preparará una habitación de huéspedes, sonreí frustrado desde cuándo se había hecho tan caprichosa?
Esperé una hora y fui a su habitación, era tan hipnotizante observarla dormir, me llenaba de paz de solo mirarla, la amaba más que a nada en este mundo, deje un beso en su cabeza, la tapé y salí de su habitación, baje a la sala y deje a mis mejores hombres cuidando de ella y fui Hasta donde estaba el tipo que había agarrado Giuliano, estaba bastante golpeado y aún así no quería decir para quién trabajaba
De los cuatro era el que menos paciencia tenía para estas cosas, después de utilizar algunos de mis lindos juguetes de tortura con el, habló y tal cómo presentía Ileana era la que le había pagado, esa maldita mujer, no se porque había vuelto o que quería, estoy seguro que jamás sintió nada por mi, no entiendo porque venir a romperme las pelotas a mi y a Roma, no se que quería ganar con todo esto, pero me iba a escuchar
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( Ileana )
Desde que era niña me ha gustado Donato, lo conocí en un campamento de la escuela, intenté muchas veces en llamar su atención, pero el nunca me miraba era como si fuese invisible, un día escuché hablar que el estaba enamorado de alguien más, pero poco me importó, soy una persona que desde que nació prácticamente mi padre me ha consentido en todo, en mi vida la palabra No, no existe, todo lo que quiero lo consigo por las buenas o por las malas, así que no me quedé con eso, después de llorar le por algunos minutos a mi padre decidió ayudarme, cuando le hablo a Antonio de un matrimonio entre sus hijos el se negó, rotundamente, pero después de varias amenazas debió aceptar
Ese día fue el día más feliz de mi vida, me casaría con el hombre más guapo y fuerte del planeta además de uno de los más poderosos de Italia, juntos podríamos haber Sido invencibles, pero la primer decepción llegó cuando en la ceremonia ni siquiera me dedico una mirada, cuando debimos besarnos el iba a darme un beso en la mejilla, al ver su intención, lo tome del cuello y bese apasionadamente, el se separó de mi, cómo si mi boca quemará, pero eso no fue lo peor sino que en nuestra noche de bodas, se negó a tocarme, me había comprado un sensual ajuar de novias que cualquier hombre abría enloquecido, pero el se negó, tuve que recurrir a uno de mis guardaespaldas con el cuál solía mantener encuentros sexuales, que patético no? En mi noche de bodas teniendo que tener sexo con otro hombre porque mi esposo se negaba a tocarme
En el transcurso de las semanas seguía igual o peor, ya me estaba cansando, en varias ocasiones le puse algunas sustancias en sus bebidas pero por alguna razón siempre terminaba tirando la bebida.
El quería el divorcio pero jamás se lo daría el era mío y jamás lo iba a dejar ir, mi madre me aconsejó que me embarazara de el, con el asco que le tengo a los niños, pero total de no perder a Donato estaba dispuesta a hacer lo que sea, total para eso existían las niñeras no?
Tuvimos que asistir a una fiesta y aproveché para pagarle a un camarero para que le pusiera una droga en su comida y afortunadamente funcionó, fue la mejor noche de mi vida, había soñado años con este momento, la primera vez que ví a Donato tenía once años y desde entonces me exitaba de solo pensar en el, solía tocarme sola mientras observaba su foto
Con un semental como el, quedé embarazada esa misma noche, cuándo le di la noticia desistió del divorcio y hasta comenzó a tratarme mejor, con cada día que pasaba odiaba más y más a la cosa está que llevaba dentro de mi, pies se hinchaban, mi ropa ya no me entraba, era demasiado molesto, no veía la hora de que naciera no para conocerla sino para que ya no me estorbara más, me sentía tan horrible con esa panza, cuando nació me sentí aliviada, al fin podría volver a mi vida normal, Donato estaba embobado con esa niña, deseaba tanto que me presta al menos la mitad de la atención que le daba a ella.
Nunca le preste atención al nombre que el le dió hasta hora que me di cuenta que la nombró Romanela por la estúpida de Roma Leone, menos mal que está muerta sino no hubiera soportado ni verla sabiendo la procedencia de su nombre
Cuando paso lo que pasó mi padre me obligó a firmar el divorcio cosa que nunca le perdonaré y me envió a vivir a otro país algo escondida, el termia que la verdad saliera a la Luz, cosa que no pasó y no va a pasar, hace unos meses volvi dispuesta a luchar por su amor, así tenga que hacer lo que sea y Roma Leone no sera un problema para mí, es insignificante para alguien cómo yo
Cuando me enteré que saldría esa noche se me ocurrió mandarla a drogar, tenía cinco hombres ansiosos esperando por ella, no me importaba lo que le hicieran, la violaran, golpearán o matarán me daba lo mismo mientras la sacarán del medio pero la muy idiota salió toda de feliz abrazada de Donato, maldije mil veces al ver que mi plan se había arruinado
Dos días después recibí una llamada de un número privado, no iba a atender, pero al final lo hice y me sorprendió mucho al escuchar la voz de Donato diciéndome que quería hablar conmigo en persona me cito en un restaurante en el centro de Nápoles, parecía molesto de seguro ya se había enterado quién había mandado a drogar a su estúpida noviecita, al cortar la llamada sonreí, bebí todo el contenido de mi copa
- Vas a ser mío Donato lo juro - con ese pensamiento decidí salir de compras debía de verme súper sexi en mi encuentro con Donato