STONE

Te va a asesinar como lo hizo con Roxanna!!- le grito

Río se acerca y me da una bofetada

- ¿Quién crees que eres para nombrarla?- me grita

Veo confusión en el rostro de Dallas, puedo notar que no sabía de qué le hablaba.

-¿Quién es Roxanna?- le pregunta a Río

- No la escuches- le dice severo

Se acerca a ella y la toma en sus manos para darle un beso.

No podía creer lo que veía, en que momento Dallas se convirtió en esto, ella amaba su trabajo, me amaba a mí y me entregó a esta mafia, ella misma me saca de mis pensamientos.

- Stone, es mejor que cooperes y entregues a Tall- me dice.

- Y como, si Río arruina todo, no entiendo, si quiere que lleve a cabo la misión porque la sabotea- le digo

- Es solo por distracción, entre más te haga la guerra mi hermano más se va a aferrar a la idea de tenerte, lo conozco- me dice tranquilo.

- Además, recuerda que sabemos el paradero de tu madre y de stefan, no tienes opción Stone- dice Dallas.

Esas palabras me calan los huesos, ella sabe cuan importante es mi familia y ahora los utiliza para que yo termine toda esta mierda, nunca había sentido un dolor más grande que ser traicionada por tu mejor amiga, la observó fijamente a los ojos esperando una señal de que me dijera que era mentira y que jamás me traicionaría, pero veo son los ojos de una mujer enceguecida por Río, sería capaz de matarme sí él se lo pidiera.

- ¿Por qué yo Dallas?, ¿Por qué me usaste a mí?, en la agencia hay mujeres hermosas y capacitadas para esto- le recriminó.

- Porque eras virgen, esa es la debilidad de cualquier hombre, sabía que serías la indicada y así lograr que George se obsesione contigo- me grita.

- Es la más inteligente, ¿No lo crees Stone?- dice orgulloso Río, mientras se acerca y la besa.

Observó la escena con asco, mis lágrimas salían sin parar, ellos estaban locos y pienso en George, le dolería mucho cuando se entere de la traición de Río, él jamás sería capaz de traicionarlo, la ambición acaba con las uniones, con las familias.

- Cariño debo llevarla de vuelta, me mantendrá al tanto de todo- le ordena a Dallas.

Esta se pone a mi altura y me da un beso en la mejilla

- Sé una buena niña- me dice

No puedo ni mirarla, no puedo con tanto dolor.

Río me saca a empujones de allá y me sube a la camioneta, mientras intenta limpiar la herida de mi labio, yo le quito el hisopo y lo hago yo misma.

- No se atreva a contarle a George, no va a creerte y tu familia morirá, esta vez si de verdad - me amenaza.

- No estropee más la misión, si quiere que la terminé no se meta entre nosotros- le afirmó.

Arribamos a la propiedad nuevamente, no sabía como actuar y mostrar mi mejor actuación, ya las cosas no eran iguales, no las veía de la misma manera.

George sale rápidamente hacia nosotros, podía ver preocupación en su rostro.

- ¿Qué te pasó?- pregunta George preocupado mientras me acaricia la herida del labio.

- Salió a caminar y trataron de atacarla, para su suerte pasaba por aquí, después de dejar a Fiorella, escaparon, no le hicieron nada- le dice Río.

Su historia era tan convincente que quien no creería esto.

- Quiero descansar, les pido un permiso- les digo

Y sin esperar que dijeran nada subo de nuevo a la habitación, me meto rápidamente al baño y me encierro a seguir llorando por todo lo que había pasado, me siento y me abrazo las piernas mientras permito que el agua caiga y me alivie todo el dolor, George entra con cautela y sé que de verdad se preocupa por mí.

- Cariño, ven- me dice con una toalla en la mano.

- Solo un rato más, no me siento bien- le respondo.

- Pagarán los que te hicieron esto, lo prometo- me dice.

Entonces que pague su hermano, digo internamente.

Me dejo enrollar de la toalla y salimos a la cama, George se acuesta conmigo sin dejar de abrazarme, me siento terrible, ahora hago parte de ellos sin querer.

- ¿Qué sientes por mí?- le pregunto

- Muchas cosas que jamás he sentido por otra mujer, no puedo separarme de ti, Kathy!!- me dice fijamente.

Lo beso, busco desesperadamente sus labios y lo acercó a mí, necesitaba sentirme suya de nuevo, necesitaba que él sanara este dolor que llevaba muy dentro, necesitaba olvidar, así que hacemos lo que mejor sabemos hacer, nos entregamos toda la mañana, esta vez no quería parar, lo necesitaba más que nunca, esto era la cura para mis males.

Despierto y la cama estaba vacía, escucho la ducha y supongo que George, vuelve a mí las imágenes que viví y esperaba de verdad esperaba que hubiese sido una pesadilla, sale sonriente mientras se seca con una toalla.

- Pensé que dormiría hasta más tarde - me dice.

- No te sentí eso me despertó- le contesto.

- Estabas ardiente, te disfrute más que nunca- me dice sonriente.

- Estoy aprendiendo- le digo cortante.

- Vamos a almorzar, no te estás alimentando bien y eso me preocupa- me dice serio

Se sube a la cama y me besa la cabeza.

- Vamos, toma una ducha rápida y te espero en la mesa - me ordena.

Yo asiento mientras beso sus labios y me levanto.

Salgo de la ducha y busco algo que ponerme, estaba tan triste que era imposible que no se notará, así que busco algo rápido y salgo a la mesa.

Allí Río y George sonreían como unos verdaderos hermanos que se amaban, ver esa escena me da asco, porque conocía perfectamente los planes de Río, George extrañamente era la víctima.

- Querida cuñada, se ve radiante - me dice Río.

Yo no respondo nada y me siento al lado de George.

- ¿Qué quieres comer, cariño?- me pregunta George.

- Lo que sea esta bien- respondo.

- Ustedes son imparables, los rumores dicen que cogen de noche y de día, ya paren o quieren tener pronto un bebé- dice Río con suspicacia.

Casi me ahogo con el comentario, comencé a toser, mientras observó a George carcajearse

- Un bebé, vaya es algo que no había pensado- dice George.

- Es hora de darle un hijo a esta familia hermano mayor- dice Río.

George me mira con curiosidad.

- ¿Es posible?- pregunta

- No, no es posible, me cuido y no quiero bebes, gracias- les respondo molesta.

Ambos hermanos se carcajean con mi reacción, sigo comiendo en silencio.

Salgo al jardín mientras Río y George se encierran y hablan de negocios, me recuesto en un sofá y sigo procesando todo lo que pasó, tengo miles de preguntas, pero la que más me importaba era como había entrado Río en la vida de Dallas y arruinarla, a pesar de todo la quería, así ella hubiese acabado conmigo. Qué debía hacer, mi familia estaba en la mira de todos, siempre fui la Imbécil, pero debía tener un plan, algo que me permita salir de los tentáculos de todos.

La empleada me trae algo de beber, le agradezco y se marcha rápidamente.

Me siento a divisar el paisaje, hasta que veo a George venir hasta mí.

- ¿Qué pasa?- pregunto

- Tenemos a los hombres que intentaron atacarte- me dice.

- ¿Qué?, hay que llamar a la policía respondo dudosa.

Este se queda mirándome dudoso, no has entendido Cariño, accidentalmente murieron con un disparo en la cabeza.