Alexa Scarlett deberá cambiar, pues debido a un sueño, vio como el príncipe William acababa con ella, por todos el daño que le había hecho, entre ellos, impedir que el fuese feliz con la princesa de la cual se enamoró ¿podrá cambiar o sufrirá el mismo destino que en su sueño?
NovelToon tiene autorización de Arhuchim para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
capítulo 21- partida.
William preparó todo para poder irse, aunque serían solo unos días, no piensa retroceder ante su decisión, su partida estaba contemplada para la mañana, pero como no ha podido ver a Alexa y no puede irse sin que ella lo sepa; fue hasta medio día que ella le permitió entrar en su estudio, pero ahí estaba el ministro más importante del Imperio, William ya sabía el porqué de su presencia pues es el mismo hombre que dio validez al matrimonio, Alexa le paso el documento ya firmado por ella al mayordomo Walter, para que este se lo entregara a William junto con una pluma.
- alteza, voy a firmar, pero, es una promesa de que pienso volver.
- ya te he dicho que no vuelvas.
William firmo el documento y se lo regreso al mayordomo, ya que la firma de ambos estaba puesta, el ministro firmo y sello el documento, para después guardarlo, pues será llevado a la oficina de registros.
- eso es todo, majestad, con su permiso.
- claro. Walter, antes de que William se marche, entregale una compensación por el año que estuvo aquí.
- no! No quiero nada, ya le dije que volvería.
Sin esperar una respuesta, William se marcha del estudio, debe ir rápidamente al carruaje, aunque Carol aun no llegaba, el cochero le dijo que había ido por una maleta; solo le tomo unos minutos y llego, ambos suben, para ya irse, aunque William esta decidido a volver, aunque Alexa ya no sea su esposa, no piensa dejarla sola, a menos que ella tenga planes de casarse de nuevo, solo entonces se retirará.
Alexa observa irse el carruaje desde le ventana, mientras Walter acomoda los archivos.
- ¿esta segura de dejarlo?
- si Walter, continuar con él, solo me traerá desgracias y aun debo ver por mi gente, no me puedo permitir dejarlos solo por celos.
- ¿celos? ¿Acaso el príncipe William esta viendo a otra mujer?
- aun no, pero, podría pasar. Walter, el amor te ciega y no quiero ser cegada, no quiero sentir nada, enamorarse es peligroso, más para alguien como yo.
- alteza, quizás solo él no es el correcto, no se preocupe, siempre ha tomado buenas decisiones y esta es igual.
- gracias Walter.
El mayordomo asiente y ya que ha juntado pos archivos suficientes, los recoge para llevárselos, deben ser almacenados pues ya no son útiles por el momento.
Por otro lado, el Rey Francis del Oriente espera ansioso la llegada del Rey Julius del país de Granate; al ver finalmente que llegaba en compañía de un gran número de solados se alegro y se acerco a recibirlo.
- Rey Julius, bienvenido, he preparado el mejor de los banquetes para usted.
- Francis, no seas hipócrita, vine porque me interesa saber, que problemas tienes con el Imperio.
El hombre baja del caballo, el Rey era un hombre joven, cerca de los treinta se podría decir y además era lo suficientemente atractivo, incluso las sirvientas no pudieron evitar mirarlo atentas.
- Rey Julius que dice...venga, venga, platiquemos dentro.
Julius le sigue hasta la sala, donde le sirven el mejor de sus vinos, también ya están sirviendo la comida.
- tengo entendido que te interesa conquistar el Imperio.
- así es, no me gusta esa idea de que una mujer sea quien gobierne un país tan poderoso, la bruja escarlata no es más que una chica rebelde.
- si, si, una cualquiera, que busca a los hombres para su beneficio.
- eso no interesa, yo quiero el Imperio, pero ¿a que viene todo eso?
- el hombre de esa mujerzuela, hirió a mi hijo, quiero venganza, unamos fuerzas para acabar con ella, el Imperio será todo suyo, Rey Julius.
- no es mala idea, pero ¿que obtienes tú? ¿Solo venganza?
- por supuesto, es lo único que me importa, matare a ese niño que se atrevió a dañar a mi hijo.
- lo pensaré. No puedo atacar solo así, si esa mujer sabe lo que hizo su esposo, estará prevenida.
- ya envié gente para que vigile el Imperio, le aseguro que estaremos listos para atacar.
- bien, me organizare y veremos si se puede formar esta alianza.
Julius nisiquiera probó la comida, nunca se sabe que pueda contener, solo se levanto y salió a prisa de ahí, pero El rey Francis esta seguro que no desaprovechara esta oportunidad.