Entre El Amor Y El Odio

Marcus se sentía un miserable porque recordó lo que él dijo la primera vez que estuvieron juntos,

- Como pude ser tan estúpido para decir que la mejor noche de mi vida había sido un error? Nunca me lo perdonaré

Renata llegó a su casa y se metió a bañar recordando todo lo que acababa de pasar

- Lo amo tanto, incluso más que el primer día pero yo

Ella empezó a llorar, pues aunque quería creer en las palabras de Marcus, no podía ella sentía que el volvería a herirla y ya tenía suficientes heridas como para añadir una más

- Como te fue con Marcus ?

- Tu lo sabías?

- En realidad nos pidió ayuda a todos, Reno queremos verlos felices, juntos, dejando el dolor atrás

- Lara aunque quiera no puedo

- Porque?

- Porque se lo jure a mi hijo, jure en la tumba de Luciano que lo dejaría ser feliz

- Pero tu eres su felicidad

- No, yo solo soy la mujer que lo apartó de su verdadero amor

Renata bajó la cabeza con expresión triste, pues le dolía reconocer su error

- El verdadero amor de Marcus eres tú

- No insistas

- Luciano habría querido a sus padres juntos

Lara ya no dijo más y se fue

Al día siguiente llegó Bruno, diciendo que había conseguido un patrocinio muy bueno pero había que viajar a Nueva York, Renata se lo pensó pues ella no quería estar lejos de su hijo. Después de pensarlo dijo que no, que enviarían a alguien más, pero Bruno insistía en que debía ir ella

- No Bruno por favor no insistas, no voy a alejarme de Palermo

- Solo serían 3 días

- Ni siquiera me iría 1 día

Bruno siguió insistiendo cosa que no hizo más que molestar a Renata, ella le dijo que agradecía su interés y ayuda en la fundación pero que comprendiera que ella estaba de luto

- Ya pasaron 6 meses Renata, reacciona!!!!

- Podrán pasar mil años y aún así nada me alejara de mi pequeño, por favor vete

Bruno se fue molesto pues el quería sacarla de Palermo, en realidad no era necesario que ella viajará pero el quería tiempo a solas con ella

- Serás mía Renata, cueste lo que cueste

Bruno la llamo más tarde para disculparse por su insistencia y por como le había hablado, ella dijo que estaba bien, y le pidió que en el futuro no se volviera a repetir, pues ella seguía firme en su decisión y que él le caía muy bien y no quería terminar su amistad

- Tu serías capaz de dejarme a un lado

- Escucha Bruno, ya dejé mi vida de lado por un hombre, ignoré lo que yo quería por dar gusto a un hombre que no importará lo que hiciera jamás le daría gusto, así que no pienso volver a pasar por el mismo camino. Ahora mi prioridad soy yo, lo que yo quiero y exijo respeto a mis decisiones si no puedes respetar mi voluntad, tendré que retirarte mi amistad

Bruno no creía lo que escuchaba, esta mujer parecía otra, no era la Renata dulce y abnegada que el conocía.

- Está bien Reno, se hará como tú quieras

- Gracias

Renata colgó el teléfono, tenía que hablar también con Marcus y con su familia, pues ella no podía permitir que las cosas se salieran de control, agradecía su buena intención, pero ella ya había tomado su decisión y no daría marcha atrás

Marcus no podía sacar de su cabeza a Renata, ni la noche anterior, recordó el olor de Diana y de pronto sus ojos se abrieron, el olor le había resultado familiar

- Es el mismo jabón que uso, como no me dí cuenta

Sabía que lo amaba y descubrir estás pequeñas cosas lo alentaba a no rendirse

- Lo compensaré mio cuore, todos mis errores y mis estupideces no importa lo que tardé, no me rendiré, no lo haré mientras este seguro de que amas

Los días pasaron con tranquilidad, Renata recibía todos los días un ramo de flores ( orquídeas) que eran sus favoritas y una nota con un ( Ten un lindo día mío cuore, ti amo) al principio la sorprendió, ahora siempre que despertaba corría a preguntar a Fredda por las flores. Marcus no la había buscado y aunque Renata daba gracias por eso, algo en el fondo de ella estaba triste. Esa noche Lara le dijo que ya se regresaría a casa de sus padres, pues estos necesitaban de su ayuda

- Está bien, no puedo más que agradecer por todo lo bueno que has hecho por mi

- Aunque ya no esté aquí, no te librarás de mi tan fácilmente, vendré tan seguido que no notarás mi ausencia

- Eso espero

Ambas se abrazaron y se despidieron.

Esa misma noche cuando Renata estaba ya por dormir escucho ruidos en la ventana, se asusto pero aún así se acercó a la ventana, tomó un adorno de cerámica y lo tomó

- Qui.. quién anda ahí?

Cuando abrió un poco la cortina vio a Marcus apunto de caer por la ventana

- Dios mío, Marcus que haces aquí?

Ella lo ayudó a subir y entraron a su habitación

- Quería verte, necesitaba darte tu espacio pero no aguante un día más sin verte

- Si sabes que hay puertas, y horas adecuadas para las visitas

- Si, y también se que te negarias a verme

Ella ya no dijo nada pues él tenía razón. Marcus le dijo que la había extrañado mucho y la besó, Renata correspondió al beso pues ella también lo extrañaba, una cosa llevo a la otra y ellos terminaron en la cama otra vez. Cuando amaneció Renata se reprendió nuevamente

- Marcus esto

El no la dejo terminar

- No, no digas que fue un error, porque para mí cada noche, cada hora, cada minuto que paso a tu lado es estar en el cielo, esto nunca será un error. Nuestro amor jamás será un error