La Tormenta Perfecta

—¡vete de aquí! No necesito nada de ti Demian ya me las arreglaré yo solo.

—que equivocado estás hermanito no vengo en malos términos, solamente vengo a ayudarte.

—eres un maldito, ¿crees que no escuché todo lo que decías?

—hermanito, tal vez el accidente te dejo secuelas, llamaré al doctor porque creo que tienes alguna alucinación.

—¡basta Demian!, no estoy loco yo te escuché claramente cuando venías y hablabas conmigo, sé lo que hiciste y si no estuviera atrapado en esta cama, me pararía y te mataría con mis propias manos.

Dylan había intentado pararse,pero no pudo estar tantos meses en coma le pasó secuelas, tardaría un poco de tiempo en volver a caminar pero lo haría, con la ayuda de fisioterapia sus piernas volverían a tomar fuerza nuevamente y podría caminar de nuevo, pero por el momento debía permanecer en cama y utilizar una silla de ruedas para movilizarse.

—pero no tienes pruebas, así que aunque vayas y le cuentes a todo el mundo, nadie te creerá, no eres más que un moribundo, solo mírate Dylan. Piensas que madre y padre te ayudarán, pues déjame decirte que estás muy equivocado ellos están de viaje y créeme en estos momentos se encuentran demasiado lejos para hablar contigo.

—todo lo planeaste bien Demian, pero encontraré alguna falla, bajarás la guarda y entonces, yo aprovecharé está oportunidad.—ahora dime en donde está isabelle, ¿qué hiciste con ella?

—¡ella se fue!, cuando supo qué su esposo le había sido infiel, sin contar las miles de peleas, y la indiferencia; hicieron que ella se vaya, no oporto la muy infeliz, no es nada más que una cobarde.

—¡cállate! El único infeliz eres tú, como no pudiste tenerla planeaste toda esta mierda verdad.

—digamos que fue la venganza más dulce que pude tener hermanito, la venganza más deliciosa.—me encargue de destruir tu matrimonio poco a poco, estoy seguro de que esa mujer no siente más amor por ti, acabarás solo hermanito.

—¡ estás loco Demian,eres un enfermo mental!,¡ Isabelle es mi esposa y déjame decirte que la voy a recuperar!

—oh antes de que lo olvide, aquí tienes un último regalito de mi parte, ella no es más tu esposa, todo termino para ti Dylan, ella firmó el divorcio hace meses.

—¡eres un maldito Demian Tremblay!, me las pagarás, ya sabrás de mi, te lo juro, ella nunca será tuya, no importa cuánto lo desees jamás será tuya.

Demian salió de la habitación luego de aventarle los papeles del divorcio a Dylan, mientras que a Dylan no le quedó más que llorar por haber perdido al amor de su vida, sin embargo se propuso encontrar y enmendar todo el daño que Demian le había causado. Pero ¿podría Dylan reparar todo el daño?

Londres, Inglaterra

3 años después.

Cada día que pasaba el pequeño Matt crecía, era un niño muy inteligente, sin embargo todo el era igual a su padre.

—¡vamos Matt!, mamá está por regresar. debemos ir por ella.

—¡papá!, ¿por qué mami no me llevo con ella?

el niño corrió a los brazos de Samuel, el lo cargo y le dijo:

—mama no pudo llevarnos porque tuvo que hacer un largo viaje y tú mi pequeño no debes faltar a clases,pero pronto estará de regreso, anda debemos darle la bienvenida y para eso hay que preparar la casa.

La semana de la moda en Milán había empezado isabelle tenía preparado un gran desfile, era la semana más agotadora, pero ella había cumplido con las expectativas, siendo la diseñadora más joven había logrado llegar muy lejos, apenas tenía 29 y la vida le sonreía de gran manera todas sus creaciones se vendían sin excepción alguna, habían dejado el pequeño departamento en donde vivía con Samuel y los tres se habían cambiado a una mansión llena de lujos y la cual tenía un gran jardín, en donde sin falta el pequeño Matthew se divertía con su padre.

Samuel había decidido adoptar y criar al bebé de isabelle ante el público eran una feliz pareja casada, pero dentro las cuatro paredes de su hogar eran amigos, aunque Samuel amaba con mucha intensidad a isabelle, la cual había cambiado hace poco su apellido y había seguido creando sus diseños. isabelle Storm había muerto y una nueva persona había nacido Rose Rivera, su empresa de moda dresstorm fue nombrada como la mejor tienda de moda, había ganado cientos de reconocimientos, aunque siempre tenía que ocultarse con una peluca y maquillaje para no ser descubierta no perdía su belleza la cual había aumentado con los años, tenía miedo de que dylan le arrebatará al pequeño Matt, así que conforme su fama fue creciendo tuvo que ocultar muy bien a Matt.

En esta ocasión tuvo que asistir sola a la semana de la moda en Milán, porque Matt no podía faltar al preescolar había entrado hace unos meses y solo el estar con ella habría provocado que él perdiera muchas de sus clases, así que no le quedó de otra que Samuel cuidara del pequeño, Sam amaba a Matt. tanto que le había pedido cientos de veces a Isabelle que se casará con él, pero no podía por más que isabelle deseaba aceptar su amor no podía, ya que ella solamente amaba a Dylan Tremblay. Sin embargo, Samuel había aceptado estar con ella, el se había encariñado con Matt, el cual lo llamaba papá, el niño al ver qué sus amigos eran llevados por sus papás, se sintió mal así que dejo de llamar tío a Samuel y un día Matt se acercó a Samuel y le dijo que él quería un papá. Samuel le dijo que él podía ser su papá así que desde ese día Matt tenía un padre y uno que lo amaba demasiado y lo consentía sin igual.

Mientras que el infeliz que lo había abandonado se volvía en un recuerdo que nadie quería traer a la vida. Sin embargo el destino se encargaría de reunirlos ya que tarde o temprano la sangre llama a la sangre.