Destinados

En los último meses Noah empezó a cambiar cada día había menos detalles, lo veía más estresado y cansado, le preguntaba si había algo que quisiera preguntarme pero siempre me decía que eran asuntos de la empresa que no entendería, poco a poco el hombre que me enamoró se alejaba de mí, era como una brecha que me alejaba cada día un poco más. Hasta que ese día llegó...

Noche que chicas:

- bien prepárate Kate que está noche será una noche solo para ti y para mí entiendes, desde hace mucho que no vamos a la disco a bailar todo el tiempo es tú y Noah.

- eso es mentira te acompañe de compras hace apenas unos días Sam, no seas una exagerada.

- bien y créeme te agradezco por ello a mi guardarropa ya le hacía falta unos cambios.

- en fin dime a dónde iremos

- mmm te aviso más tarde

- ok entonces pasa por mí a mi casa saldré temprano del trabajo y le llamaré a Noah para cancelar nuestra cita.

- genial esa si es mi amiga y por cierto dile a ese imbécil que si sigue ignorando te seré yo quien le pinche las llantas de su auto y de paso le rompa la cara.

- tranquila solo estamos pasando por una bajada, todas las relaciones pasan por esta etapa Sam así que por el momento no vandalizaremos el auto de nadie y tampoco golpearemos a nadie entendido.

- bien espero no se quiera pasar de listo.

- bye nos vemos en la noche

- bien te dejo y no lo olvides pasaré por ti a las 9:00

*********

Le colgué a Sam para comunicarme con Noah, después de cuatro intentos por fin me respondió.

- hola amor buenos días

- hola Kate solo días ok

- ¿qué pasa Noah?, últimamente estás muy gruñón.

- no pasa nada Kate estoy ocupado necesitas algo.

- solo quiero avisarte que tendré que cancelar la cena de hoy, saldré con Sam a una noche que chicas así que no podremos estar juntos.

- ok yo tengo una reunión de negocios así que tampoco me iba a poder reunir contigo que bueno que llamaste pero debo colgar.

- está bien cariño te amo.

- si yo igual

Fin de la llamada...

Quería saber que era lo que le pasaba los mensajes de buenos días ya no llegaban, dejo de pasar al trabajo por mí siempre diciendo me que era porque la expansión de la empresa ahora le estaba consumiendo más tiempo, era rara la vez que podíamos estar solos, las flores cada día dejaron de llegar y si por suerte me mandaba un texto eso ya lo consideraba un milagro, me preguntó ¿qué fue lo que pasó?, o mejor dicho ¿qué nos está pasando? Cada día él estaba más distante y cortante conmigo además de que había bloqueado su móvil y esas llamadas extrañas que recibía solo me hacían dudar más de el, algo extraño sucedía y ya no podría ocultarlo más tiempo, llegaría al fondo de este misterio así haga hasta lo último descubriré que me ocultas Noah Brown.

Esa misma tarde...

salí de la oficina y apenas eran las 4:30, baje al estacionamiento y en el parabrisas de mi auto me encontré con una extraña nota que decía:

Tu querido novio oculta algo, guarda un secreto grande que solo te romperá en mil pedazos ese bello corazón, mi venganza está por empezar Kate Anderson, este es solo el primer paso...

- por Dios lo que me faltaba un acosador en la oficina.

- no tenía tiempo para investigar aunque me llenaba de intriga el saber porque mencionaba a Noah, no le di importancia, tenía mejores cosas que hacer que ocuparme de algún loco rondando por ahí, hoy tenía la noche de chicas con Sam y con ella me desahogaría.

Llegue a casa y empecé a alistar me saque de mi armario un vestido color nude, era corto y de tirantes, tome una larga y relajante ducha en la bañera y después de leer las noticias y ver mis redes, decidí cambiarme.

No tardo mucho en llegar el mensaje de Sam.

- lista voy en camino

- estoy lista

- a dónde iremos.

- es una sorpresa cariño créeme te va a encantar iremos a cenar y por último a un bar a beber unas copas.

- está bien entonces te estaré esperando.

- claro que sí está noche será solo para ti y paga mi, dos bellas y sexis amigas.

- bien nos vemos entonces bye.

- bye...

*******

Sam paso por mí y fuimos a un restaurante ubicado en el centro de Nueva York, era lujoso y solamente podía entra la crema Hinata de la sociedad, para suerte nuestra las dos podríamos estar aquí debido a nuestras posiciones económicas, Sam era una reconocida abogada una de las mejores que por supuesto trabajaba para mí como mi mano derecha y pues yo era la heredera del grupo Anderson.

En fin subimos al segundo piso en donde solamente se ubicaban las reservas vips, cenamos ligeramente, ya que conocía a Sam y sabía lo que nos esperaba en el bar.

Nos encontrábamos a gusto platicando cuando de repente vi a Noah llegar acompañado de una mujer guapa y sexi, podría haber dicho que eran socios, pero, bien sabía que los socios no se hablaban con tanta confianza y mucho menos se reían como ellos lo estaban haciendo, esto era el colmo pude haber guardado la compostura y haberme comportado como la dama que era, pero ahora entendía el porqué el distanciamiento conmigo, el porqué tantas citas canceladas ahora me quedaba claro que Noah todo este tiempo solo me vio la cara de tonta...

Camine hasta ellos y decidí saludar

- hola querido por lo que veo está debe ser tu socia o¿me equivoco Noah?

- Kate… Eh buen… ¿ qué haces aquí?

- lo mismo pregunto cariño me dijiste que te quedarías hasta tarde en la oficina por asuntos con los socios.

— dejame explicar-te Kate.

— no!!! Adiós Noah te deseo una linda noche.

salí corriendo con todas mis fuerzas, nuevamente me habían roto el corazón y está vez estaba segura de que no podría volver a repararlo. más tarde le llamaría a Sam el teléfono no dejaba de sonar y yo solo quería estar sola, al salir el cielo me recibió con un diluvio, pero no me importo salí y la lluvia empapó todo mi cuerpo, mientras corría por la calle alguien sujeto mi mano y me detuvo...