En esta versión, mí primera historia, "La herencia de la abuela", se explica desde los ojos de Max, explicando algunos interrogantes inconclusos
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capitulo 3: "La cómplice".
Luego de salir de la casa de la hermana de Camila, Max fue directo a casa de su madre y tomo la decisión de contarle lo sucedido. Es reflejo en el rostro de joys fue de sorpresa total, hasta que al fin reaccionó.
-Por lo menos te lo dejo a ti...- comento joys.
-Y a Camila...-
-Claro, por supuesto...- divago la mujer -Entonces, bien. Si haremos esto, hay que hacerlo sin levantar sospecha.-
-¿Entonces?-
-El fin de semana preséntala cómo tu novia, en la cena con tu tío...-
Mejor que esa oportunidad no había, en un restaurante, con mucha gente así todos los ven.
Al día siguiente se dirigió a la casa de la hermana de Camila para comunicarle lo que había sugerido su madre. Solo faltaba un par de días para el fin de semana y debían de hacer todo lo más rápido posible, por la cláusula del testamento.
Cuando llego, Abby le informo que camila trabajaba como recepcionista en un gimnasio, así que se dirigió hacía allí. En el camino paso por una joyería, y decidió dar la vuelta con el auto para comprar, ya, las alianzas. Dudo mucho en el tamaño del anillo de ella, Camí es una joven muy pequeña, pero no sé había fijado nunca en eso... Le pregunto a la vendedora si se lo podía probar. La chica aceptó, pero le dijo que no se preocupe, que de última opción puede cambiarlo.
Ahora sí, con las alianzas en mano, salió para el trabajo de su "prometida".
Cuando entro, la joven estaba muy entretenida haciendo algunas anotaciones.
-Hola Camí...- le dijo y la chica lo miro con los ojos desorbitados y luego hacia los lados.
-¿Max? ¿Qué haces aquí?- pregunto con, evidente, pena.
-Tu hermana me dijo que trabajabas aquí.- respondió él y ella bajo la mirada -¡Es muy lindo lugar! ¡Ahora se a donde venir a ejercitarme!- exclamó y ella sonrió.
-Bueno... No me has respondido...- continuo Camí tomando un mechón de su cabello y llevándolo detrás de su oreja.
-Ahh, sí. He comprado las alianzas y me gustaría saber si te queda bien.- le informo sacando la cajita roja del bolsillo
-¡Oh!- exclamó Camí -¡No me lo esperaba!-
Max abrió la cajita, ella tomó el anillo y se lo probó.
-¡Si, me queda! ¿Cómo sabías mi medida?- pregunto sorprendida.
-De hecho... Solo lo adiviné.- respondió Max con gracia y ella lo miro con una sonrisa.
Se quedaron viendo por un momento. No podía creer lo que provocaba esa muchacha en él, ¡Lo paralizaba!... Pero trato de reaccionar.
-También quería preguntar si estarías dispuesta en una reunión el restaurante Brasserie, con toda mi familia...-
-¿En Brasserie? ¡Es muy elegante!- exclamó ella con temor.
-Sí, estará mi tío y mi madre dice...- trato de decir él.
-¡¿Tu madre sabe?!- pregunto Camí alterándose...
-Es que necesitaba un cómplice...-
-¿Y qué te ha dicho?-
-Nada, que necesitamos pruebas para que parezca real...-
-¿de veras?- pregunto la chica con desconfianza, y no la culpaba, él era consciente de que la personalidad de su madre era complicada -Bueno... Pero Max, ¿Qué debo vestir para un lugar tan elegante?-
-Lo que tengas.- respondió él sonriendo -Un vestido, tal vez.-
-¿Vestido?, puedo pedirle a mi hermana... Es que no sé mucho de moda...- contesto ella y él Sonrió.
-Pero heredarás una revista de moda.- bromeo.
-Esa verdad, tendré que hacer un campo de investigación.- respondió Camí riendo.
Ese sábado, Max paso a buscar a su prometida. En cuanto la vio quedó boqui abierto, apareció con un vestido largo con lunares y una camperita negra, se subió al coche, pero evidentemente, la chica se sentía algo incómoda con esa vestimenta.
Cuando llegaron, entraron. De reojo veía a Camila viendo toda la elegancia con una cara de susto y luego su vestido, que lo más probable era que no se sentiría a la altura.
En el lugar ya estaba su madre, su padre y su tío Rafael, quien se había presentado solo, por fortuna, ya que no deseaba ver a su esposa.
Joys se acercó a ellos, con un traje muy elegante, Max tomo de la mano a la chica, para empezar el "show",
-Bienvenida, hija.- dijo la mujer saludando a su futura nuera, en voz alta para que todos escuchen.
-¿Alex no está?- pregunto Max, viendo hacia la mesa.
-No, tuvo que acompañar a Estefy a Italia.- informo la mujer -Vamos hacia la mesa.-
Todos se acercaron
-Te presento, hermano, a mi futura nuera... hoy se comprometen.- dijo la mujer en voz alta, en eso apareció un paparazzi y les tomo una fotografía -¡No, no! ¡Solo queremos comer en paz!- exclamó la mujer echando al fotógrafo.
Camila quedó algo desorbitada por la situación y confundida. ¿Qué había ocurrido?
Max tomó del brazo a su madre y la alejo un poco y la joven lo siguió.
-¡¿Qué fue eso, madre?!- le pregunto por lo bajo.
-Fue solo una ayudita... Para evidencia.-
-Pero no nos consultaste...-
-Me has confiado esto porque necesitas ayuda. ¿La quieres o no?- pregunto la madre.
Max la miro, suspiro y tomo la mano de Camí nuevamente.
-Mejor volvemos a la mesa...- sugirió él.
Cuando regresaron hasta donde estaban los demás, decidieron sentarse.
-¿Está todo solucionado?- pregunto Rafael.
Max estaba por responder, pero su madre se adelantó.
-Solo necesitábamos arreglar este tema del periodista... Esto es lo que sucede cuando estás en una familia de artistas famosos, querida,- le dijo a Camí, la mujer y la chica Sonrió en silencio. Aparentemente, estaba muy nerviosa.
-Así que pasaste de cuidadora a esposa... Todo un logro ¿Verdad?- prosiguió el hombre.
Max lo miro con irá y estaba a punto de atacar.
-Hijo...- dijo su padre, quien era muy callado.
-Es que Max...- estaba por decir joys.
-No madre, puedo responder.- la interrumpió su hijo -Tío, nosotros mantuvimos nuestra relación en secreto por respeto a la familia, pero en el momento que faltó la abuela me di cuenta de que no puedo separarme, ya, de ella y...- continuo tomando la mano de la chica -No te sorprendas al saber que nos casaremos dentro de un mes...-
El hombre quedó viéndolo por un momento con cinismo.
-Entonces, abramos una botella de vino para brindar...- respondió Rafael con toda mala intención.
-Prefiero brindar con refresco, "Tío".- respondió él con ironía.