El Romance Prohibido Del Emperador

En el imperio de Marbella.

Una joven de nombre Anabel Cortés, hija única del señor ministro de justicia Alexander Cortés, y su esposa Mónica.

La familia de tres estaba saliendo en su carruaje con la intención de ir a tomar unas vacaciones al imperio Avalon, imperios donde habitan los elfos y hadas y toda criatura mágica, a excepción de los amigos.

Allí irían a visitar a los abuelos maternos de Anabel, quienes eran reyes de ese imperio, y a los que llevaban sin verle unos cuantos años.

❤️Anabel

La joven, con su 20 años de edad, es una joven talentosa en los negocios, y es buena usando la espada y la magia elemental, ya que su familia de parte del padre son descendientes de magos y buenos guerreros, y ella heredó los genes de ambas partes, lo que la hacía aún más poderosa.

Anabel es una joven muy bella, con buen cuerpo y de noble corazón; todo el que le rodea se da cuenta de eso con solo verle.

Muchos pretendientes tienes detrás, pero ella no ha tenido ninguna relación con ninguno de ellos, ya que ella espera al indicado para dar el sí.

Muchos hombres casados la han tratado de seducir, pero ella tiene muy claro en su vida, que no será amante, ni tampoco concubina, pues hacer eso, es humillar el buen nombre de su familia, y también humillarse a sí misma.

❤️Los padres de Anabel

Sus padres nunca han tratado de buscarle un matrimonio por conveniencia, pues ellos desean que su única hija se case con alguien por amor y no por negocios, ya que el deseo de todo padre es, que su hijo o hija sea feliz y que también lo sea en un matrimonio, dónde el amor y los valores sean el centro de todo.

Una vez por semana, Anabel va a verificar los negocios de su padre, el ministro de justicia, y gracias a eso, ha hecho muchos aliados en ese imperio.

Además de aliados, ella ha despertado la envidia de las mujeres, ya que todas allí desean ser como ella, bella, inteligente, libre e independiente.

Ese día, Anabel y su familia iban felices, puesto que por fin tendrían unas vacaciones familiares, luego de meses de estar planeando dichas vacaciones.

Todo iba muy bien, hasta cuando los caballos que sostenían el carruaje pasaban cerca de un precipicio, una serpiente cascabel salió de entre las piedras y al ver aquello los caballos estaban como locos.

El cochero no lo pudo detener y estos, sin que nadie se lo espere se lanzaron al vacío. El cochero, al estar desprotegido murió al instante en la caída.

La familia que estaba dentro del carruaje estaba en pánico, pero el ministro de justicia fue rápido y uso magia para detener la caída, pero no pudo evitar que su hija, quien iba cerca en la ventana del carruaje, se diera un golpe fuerte en la cabeza, el cual le dejó muerta al instante, ya que los vidrios de la ventana se incrustaron en su cabeza, de una manera muy profunda. La mujer del ministro estaba desmayada por el susto.

El señor ministro de justicia sin poder creer aún lo que había pasado, llevó con magia el carruaje hasta tierra firme, y luego de eso, fue a verificar si su hija estaba con vida, pero no, ella ya estaba muerta, y la sangre que salía de su cabeza era prueba de aquello.

Un grito de horror salió de su boca, y ese grito despertó a su mujer, quien cuando vio la situación, supo lo que estaba pasando, y también empezó a llorar.

Sus llantos fueron tan lastimeros, que unas personas que pasaban por el camino lo escucharon y se detuvieron para ver aquella tragedia.

Ellos conmovidos le ofrecieron su ayuda, y ellos aceptaron, y ese mismo día, se tuvieron que regresar a su mansión para así, al día siguiente darle una sepultura digna a su hija muerta.

En otra parte

Al momento de morir, el alma de Anabel, al igual que la de Abigaíl, por alguna razón se encontraron en el vacío al que llamamos nada.

Las dos, al verse, decidieron hablar para conocerse, pues de todas maneras, ya no había más que hacer allí.

—¿Tú, por qué moriste?—pregunta Anabel a Abigaíl y esta le cuenta lo que vivió siendo Abigaíl. Ella al escuchar su historia tenía deseos de darle una paliza, ya que esa muchacha no solo es tonta, sino mensa —¿Eres tonta o te haces?, tú no necesitas a nadie para sobrevivir, eres bella, yo en tu lugar, no le hago caso a ese hombre tan mujeriego, ese que solo desea usarte como un objeto— dice ella indignada totalmente.

—No sabes nada, el amor es algo loco. Sé que él no me amaba, pero yo a él sí. Sé que fui una tonta, pero quien no se enamora de un hombre así —dice ella.

—De un hombre así no me fijaría, aunque él sea el único hombre que exista en el mundo, y menos sería amante o concubina— dice Anabel indignada.

—Bueno, cuéntame de ti— dice Abigaíl avergonzada, y Anabel le cuenta su vida feliz, y Abigaíl sintió envidia de ella, ya que desearía vivir así de ese modo, libre de hacer lo que le dé la gana, y en un lugar donde todo sea diferente.

El padre tiempo, quien ve la situación con mucha curiosidad, se le ocurre una idea.

Si las dos tienen tantos deseos de ser la una de la otra, él hará que sea de este modo, y de paso se va a divertir mucho con eso.

Por eso, sin que ellas se den cuenta, poco a poco sus cuerpos estaban cansados, y entraron en una especie de sueño, y luego de eso, el padre tiempo retrocedió el tiempo y sus almas fueron intercambiadas, y al final, cada una estaba en dónde debe y desea estar, cada una se llevará sus recuerdos, y como premio extras, los recuerdo del cuerpo que habita, cada una usará la magia que tiene ese cuerpo.

Además, una de ellas tendrá que hacerle frente a su destino, ese que estaba destinada a cumplir y que, por azares de la vida, no pudo hacerlo.

Al finalizar esa acción, el padre tiempo se limitaba solo a ver lo que pasaba.

Cuando fue el tiempo de Anabel despertar, siente un dolor en todo su cuerpo, en claras señales de que lleva mucho tiempo durmiendo.

Al pensar en eso, ella termina de adaptarse y al hacerlo ve que está en una habitación la cual nunca ha visto en su vida.

Preocupada, ella trata de levantarse de la cama, y al hacerlo, su cuerpo no le responde en lo absoluto, cosa que le hace lanzar un grito de horror, pues creyó que era paralítica.

El grito llamó la atención de los empleados que pasaban cerca de la habitación, y estos fueron a ver, para darse cuenta, que su señorita, acaba de despertar luego de mucho tiempo en coma.