La Venganza Perfecta

Ir de compras nunca habia sido una prioridad importante para mi. Siempre me bastaba con lo justo y lo indispensable y gastar en cosas de moda nunca habia sido lo mismo pero en estos momentos me  apetecía ir al centro comercial y despejar mucho mi cabeza.

La pelea con mama y el poco trabajo que habia tenido me habian colapsado  la cabeza; además de que  papa me estaba pidiendo ver lo del nuevo negocio de Kate… Ya tantos asuntos, con mi recuperación, eran absolutos. Por eso habia avisado a mi padre y partí de la empresa. Ahora, una ola de gente me rodeaba mientras caminaba por la plaza  centra de la ciudad. Era una de las mas grandes por lo que siempre era común ver a mucha gente transitar por aquí.

Observaba todas las tiendas  tratando de ver que llamaba mi atención. A lo lejos  de la plaza, casi al terminar el pasillo de bolsas femeninas divise un Sephora por lo que decidía camine con un poco mas de prisa.

Amaba el maquillaje. Aunque pasaba  la mayor parte con muy poco de este y la mayoría de  mi rostro solo trajera el maquillaje justo y necesario; no podia evitar comprar paletas de maquillaje y mucho labiales.

Y eso era justo lo que pensaba hacer.

Caminaba tranquilamente con mis audífonos puestos, pero no fue hasta que la música se corto. Una llamada entrante sonó  y la respondí algo enojada. Era un momento de mi completa tranquilidad.

—¿Hola? — acomode el cordón de mi bolsa, que se  estaba bajando de mi hombro. Esta cerca de llegar a la tienda. La observe y vi que tenia una escaleras,  fue cuando capte que esta tienda estaba debajo de los demás pisos de la plaza. Entre a esta y comencé a bajar las escaleras hasta que las luces de los stands y todo el maquillaje inundaba mi vista.

—Entonces Oliver tenia razón, ¿No? — sonrei porque la voz de Marcus inundo mis audífonos. Era el.

—Ya vi que a mi papa no se le pasa nada—comencé a caminar, con una pequeña canasta de la tienda, empezando mi recorrido. Marcus sonrió del lado de la línea.

—Es claro que lo sabes nena; Oliver se preocupa mucho por ti…Y yo también. Por eso en cuanto me aviso que te ibas de la oficina te marque. ¿Todo bien? ¿Te empezó a doler la cabeza? — visualice a una chica, muy joven, de la tienda que me sonrió. Yo seguí observando todo el maquillaje que llamaba mi atención.

—Todo bien joven— solté una ligera carcajada—es solo que me apetecía por primera vez salir del trabajo temprano e ir de compras. ¿Y tu? ¿Cómo estas? — caminaba por el pasillo de paletas de sombras para ojos, mi debilidad—¡Por cierto! ¿Cómo  es que no me habías dicho sobre mis pendientes? ¿Por qué los asumiste Marcus?

No lo estaba regañando, ¡Por supuesto que no! Al contrario; no le habia agradecido por haber hecho eso por mi cuando no tenia que hacerlo.

—Porque te quiero Katy, y quise hacerlo porque me nació hacerlo.

—Pero, ¿ Acaso estas demente? ¡Tu también tenias tu trabajo!

—Y lo tengo nena, pero eso no me impidió hacerlo y como te lo he dicho. Lo hice porque quise Katy, y no tienes que agradecer. Eres mi chica y si puedo ayudarte lo hare; siempre.

La calidez de su voz y de sus palabras me llenaron por completo. Cada que Marcus me hacia ese tipo de comentarios me hacían sentir muy bien, pero sobre todo me hacían sentir acompañada en este largo camino.

—Hiciste demasiado Marcus; gracias. No debiste hacerlo, de verdad.

—Lo haría una y mil veces por ti Katy; no dudes de ello. — los latidos de mi corazón se aceleraron y una enorme sonrisa salto de mis labios mientras veia las paletas de maquillaje, buscando una con muchos colores vibrantes.

Seguí caminado por el mismo pasillo hasta que una paleta, con  lo que deseaba capto mi atención. Me acerque hasta donde estaba y la observe mas de cerca aun con Marcus en la línea.

—Entonces ya lo tendré en  cuenta, ¿Estas de acuerdo? — tome  la caja de esta y vi los nombres de las sombras. Era una paleta muy linda, con colores dúo cromados y brillantes. Así que de una vez la coloque en mi canasta, continuando con mi recorrido.

—Uhm, me parece un buen trato. —ambos sonreímos y seguí con mi camino. Tome unas cremas para mi rostro, perfumes, mascaras para rostro hasta que por fin entre al pasillo de los labiales. — ¿Oliver te dijo algo? ¿ Te dio nuevos anuncios?

Vi los tonos y terminaciones de los labiales, ¡Eran tonos tan lindos! Por lo que  me fue difícil empezar a elegirlos

—¿Te refieres al negocio de Macao? — tome unos labiales con terminación matte y de barra, siguiendo con mis pasos por el pasillo.

—Entonces si te dijo…

—No solo me dijo Marcus, me pidió involucrarme en este nuevo trato y la verdad, aun no me lo creo.

—¿Te tomo por  sorpresa?

—Lo hizo—le confirme— sinceramente pensé que lo que habia dicho  no era del todo cierto, pero ya vi que no. Quiere que le apoye con el diseño interno de este nuevo hotel y con las cosas administrativas…

—¿Y porque dudas Katy? Yo te lo dije, Oliver te lo dijo; ¿Por qué dudas de ti?

—No es que siga dudando Marcus, ¿Sabes?  Solo sigo impresionada por todo esto.

—Es mucho por asimilar, pero estamos poco a poco… Y se que puedo hacerlo.

—Eso es lo que quiero escuchar de ti Katy. No mas inseguridad nena, tu puedes, ¿Estamos de acuerdo?

—Estamos de acuerdo— termine de elegir mis labiales y al ver que era todo me dirigí a la caja a pagar —¿También estamos de acuerdo para vernos? —queria invitar a Marcus a comer para agradecerle por apoyarme con todo. — Podemos vernos para comer. No voy a regresar a la oficina.

Con todo mi maquillaje pagado salí con mi bolsa mientras veia mi siguiente tienda para entrar. Esto sin duda era una buena terapia para olvidar el estrés.

—Uh nena, no creo que pueda, perdón— fruncí el ceño pero lo escuche. — Estoy estudiando la negociación de Macao y tengo otros asuntos que atender, de verdad lo siento Katy.

Escucharlo negar la invitación si me ocasiono una pequeña desilusión pero una idea llego  a mi mente.

—¿Te parece si comemos ahora en tu oficina, señor Lee? ¿O también me dirás que no?

Marcus soltó una carcajada, contagiándome de esta. —Esa idea me encanta nena. Petición aceptada.

—¡Bingo! — entre  a una tienda de bolsas de mano, muy lindas por cierto, y de nuevo caminaba para verlas. Las negras y las vino eran sin duda hermosas, además de que traían el logo de la  marca en forma de llavero, haciéndolas lucir mas elegantes. —¿Te apetece pasta carbonara? ¿Y baguette especiado?

—Perfecta elección nena, me parece bien. ¿Te espero aquí en una hora? Además estaría bien que vinieras conmigo. En los negocios necesito que chequemos unas cosas.

—¿Es sobre este negocio? — elegí una bolsa grande, con los llaveros dorados y me fui a la caja, de nuevo a pagar.

—Si. Como socio también de Oliver, este negocio es de suma importancia, pero la verdad es que veo algunas inconsistencias en algunas partes.

Fruncí el ceño porque esto me parecía algo irregular. En este tiempo dentro  delos negocios de papa nunca habia pasado esto. Mucho mas si era un negocio de suma importancia.

—¿Están seguros? Digo, eso siempre es primordial para nosotros, mucho mas para papa, que es quien lo revisa a  detenimiento.

—Lo se  Katy, pero ¿Si sabes quien cerro el trato?

Me quede en silencio mientras empaquetaban mi bolsa. Iban a tardar unos minutos en hacerlo. Mientras terminaban a lamente seme  vino la conversación que tuve con mi padre, hasta que recordé esa parte…

Kate era quien habia firmado el contrato y la aceptación del negocio.

—Fue  Kate; papa  me  lo dijo pero aun así, ¿No lo reviso bien? Mucho mas con la  percepción tan  fina de papa por los negocios.

—Oliver me dijo que si; pero no lo suficiente. Me paso todos los datos  y estoy notando algo con la inversión que Oliver dará.

Esto si estaba muy extraño. Todo en general. Si, Kate habia encontrado y firmado el negocio, pero ¿Inversiones? ¿Qué estaba mal?

—¿El monto no cuadra?

Marcus suspiro en la línea. Ya estaba estresado— Siento que es mas que eso. El monto que la empresa invertirá es demasiado para lo que se tiene contemplado. No se; a lo mejor es algo que pueda cambiar esta vez… pero dado a los antecedentes de Oliver me sorprende que no haya comentado nada a Kate sobre esto.

Pensaba exactamente lo mismo. Papa con los números era indiscutible, pero quiera suponer que s ele habia pasado y que se podria discutir con mas calma.

—Bueno en ese caso… Ya solo paso por la comida y lo revisamos. Sirve que me enseñas mas de ese negocio con mayor, ¿Te parece? — Marcus asintió en la línea— no te estreses, que ya voy camino.

—Esta bien— sonrió— esperare tu llegada y mientras mantendré mi mente en blanco. Te cuelgo, ¿Si nena? — asenti saliendo de la tienda— y por favor vuelve con mucho cuidado—dijo esto  ultimo con un aire preocupado, pero era obvia la razón. A pesar del accidente pude tomar el volante como normalmente lo venia haciendo  per se entendía su preocupación por esto.

—No te preocupes; manejare con cuidado. Nos vemos. — colgué la llamada, quitándome mis audífonos y camine por la plaza para encontrar el restaurante, que también era de mis favoritos, para pedir la comida.

Mientras llegaba a este me puse a pesar sobre lo que Marcus habia dicho.

Todo esto era muy inusual. Que Marcus encontrara esto  sin que papa lo notara me era muy extraño, y mucho peor que aun así se hubieran firmado los papeles. Sin duda era algo que teníamos que revisar porque todos estábamos involucrados y cualquiera que este presente en un negocio así tiene responsabilidad sobre el.

Y lo menos que queríamos era que cada uno de nosotros sufriéramos consecuencias.