Mila Grud tiene un gran secreto que desde aquella noche lluviosa cuando cumplió sus quince años intenta ocultar, ¿un maleficio o un beneficio?.... lo único que ella sabe es que su vida cambió y no pudo ser una chica normal, tener que huir antes de que sean las 10 de la noche se ha vuelto parte de la rutina.
Frédéric Villamil un día mientras iba sumido en sus pensamientos chocó con un hermoso gato en la oscuridad de la noche, pero aún así logró admirar los hermosos ojos de este bello animalito , algo en el despertó curiosidad.........
NovelToon tiene autorización de Lida Marín para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 18
Nosotros solo nos dejamos llevar por el momento, nuestros labios tenían el ritmo perfecto y encajaban muy bien los suyos con los míos, por mi parte no quería que este beso acabara, pero un golpe de realidad me llegó de repente.
_ Discúlpame, me tengo que ir _ le dije tratando de apartarme.
_ Ven, no actúes de esta forma, ¿no te puedes quedar un rato más? _ insistió.
_ No, ya te dije que antes de las 10 tengo que estar en casa y ya me quedan 10 minutos _ le recordé.
_ Entonces déjame te llevo _ el me ofreció.
_ Nooooo, no te preocupes, así estoy bien, pero te agradezco _ no podía permitir eso, me iba a descubrir.
_ ¿Pero puedo saber qué está mal?..... Si fue por el beso, tú fuiste la que comenzó todo _
_ Sé que fui yo quien lo propició, y te digo algo, no me arrepiento, si tuviera más tiempo no me habría detenido, pero bueno, así están las cosas y me tengo que ir _ fui sincera.
Di media vuelta para irme cuando sentí un jalón en mi brazo que me hizo perder un poco el equilibrio, pero ahí estaba el causante, listo para recibirme en sus brazos, él me tomó de la cintura y me levantó a su altura, haciendo que yo abrazara su torso con mis piernas, él me besó apasionadamente y yo solo me dejé llevar, mi cuerpo quería más, pero esta desgraciada maldición no me lo permite, así que tuve que cortar la situación bruscamente.
_ De verdad, ya me tengo que ir _ de nuevo le dije.
_ Está bien, no te voy a insistir, pero por favor dame tu número de teléfono _ asentí.
_ Está bien _
Le di mi número y salí rápidamente de aquel lugar.
Pero mis pasos eran pesados, inseguros, el corazón me latía con fuerza, no solo por el beso, sino por la angustia, faltaban minutos, tal vez segundos, sentía que el reloj avanzaba más rápido solo para burlarse de mí.
No era solo una rutina, era una sentencia, a las 10:00 en punto, sin excepción, mi cuerpo comenzaba a transformarse, mis huesos crujían, mi piel se estremecía, mi visión se distorsionaba, y el mundo cambiaba, lo sabía de memoria y lo odiaba.
Corrí por una calle lateral, intentando evitar miradas, faroles y autos, mis zapatos golpeaban el asfalto con torpeza, sabía que no iba a llegar a casa a tiempo, no hoy, me resigné a buscar un sitio oscuro donde esconderme, específicamente un callejón... pero fue entonces cuando algo muy extraño pasó.
Me detuve en seco al ver un reloj digital en un cartel luminoso, marcaba las 10:01 p.m.
Mi primer pensamiento fue, "ese reloj está dañado" Pero no sentí el hormigueo, ni el escalofrío, ni ese zumbido interno que anunciaba lo inevitable.
Nada.
_ ¿Qué está pasando? _ murmuré, él silencio del lugar me devolvió solo su eco.
Apoyé las manos en mis rodillas y respiré hondo. Volví a mirar mis brazos, estaban normales, mi piel, mi forma, mis sentidos... todo estaba igual.
Me toqué la cara, palpé mi cuello, salté un poco sobre mis talones.
_ No puede ser... _ estaba incrédula.
Me acerqué a un charco para ver mi reflejo, aunque era tenue y borroso, aun así, seguía siendo yo, yo humana, no un gato, no una criatura nocturna con bigotes y garras.
Tomé el celular con manos temblorosas, llamé a mi papá.
_ 📱¿Hola? _ preguntó.
_ 📱Pa... papá... no me transformé. _ solo dije eso.
_ 📱¿Qué? ¿Qué estás diciendo? ¿Estás bien? ¿Dónde estás? _ se escuchó preocupado.
_ 📱Sí, sí, estoy bien. Estoy en un callejón camino a casa, pero ya pasaron unos minutos y... sigo igual. _ traté de explicarle.
Hubo un silencio en la línea.
_ 📱¿Y… hiciste algo diferente hoy? _ indagó.
_ 📱No. Bueno, solo salí por una copa con Vivian y luego fuimos a un club... conocí a alguien... _ me detuve.
_ 📱¿Alguien? _
_ 📱Sí. Es complicado, pero... hice algo diferente, no se si eso fue lo que causó esto. _ omití el beso que me di con Frédéric
_ 📱 hija , ven a casa, ven rápido que te quiero ver_
Su voz sonó sorprendida
-📲 Si papá _
.
_ 📱Pues hija, estoy muy feliz por ti, pero tienes que descubrir qué fue lo que hizo que pasara eso. _
_ 📱Así es, por eso te aviso, creo que por primera vez en mucho tiempo verás llegar a tu hija como un humano normal en la noche, estoy muy feliz, papá. _
_ 📱Yo igual, mi niña. Aquí te espero. _ me dijo mi padre antes de colgar.
Colgué y por unos segundos solo me quedé mirando el cielo, la luna estaba alta, tan brillante como cualquier otra noche en que me transformaba, pero esta vez, parecía mirarme con complicidad, no con burla.
Empecé a caminar lentamente hacia mi casa, sin necesidad de correr, sin esconderme, iba por la calle como cualquier otra persona, nadie sabía que lo que para ellos era rutinario, para mí era un milagro.
Me acerqué a la puerta principal, toqué el timbre solo por costumbre, pero mi papá ya estaba allí. Me abrió antes de que pudiera decir algo.
En cuanto crucé el umbral, corrió hacia mí y me abrazó tan fuerte que sentí cómo mis pies dejaban el suelo, se aferró como si temiera perderme.
_ Papi, papaaaá, me vas a hacer desmayar, me estás apretando muy fuerte. _ logré decir.
_ Lo siento hija, es que estoy muy feliz. No te imaginas cuánto tiempo soñé y anhelé que Dios te permitiera pasar al menos una noche así... como eres tú, mi niña hermosa, extrañaba ver tu cara de noche. _ dijo mi padre.
Mi papá no paraba de llorar, y yo no era la excepción. Felicidad era poco para describir el sentimiento que invadió mi ser, era una mezcla de alivio, asombro, esperanza y miedo, porque sí, también había miedo. ¿Y si mañana todo volvía a ser como antes?
Nos sentamos en la sala un buen rato, sin necesidad de hablar, solo estar ahí, juntos, bajo la luz de la lámpara, con el sonido del reloj marcando los minutos, para mí eso, ya era un regalo.
Después me fui a mi habitación y lloré, lloré como no lo hacía desde que murió mi madre, esa noche deseé que, por medio de mis sueños, me dieran una pista de qué fue lo que causó que no me transformara, quiero respuestas, y sé que las voy a conseguir, y aunque muy en el fondo se lo atribui al beso que me di con Frederic se que suena muy cliché, y seguro me estoy creando demasiadas fantasias, pero no deja de ser una opción.
Pero por ahora, me dejo abrazar por esta primera noche de libertad, aunque no entienda cómo ni por qué, aunque el mañana sea incierto...
Hoy, por fin, fui solo Mila, solo yo.
Además no es seguro que la bruja-piruja dure mucho en la cárcel, pues según ya la habían detenido por fraude y el asesinato del heredero York y no más no pasó nada, ella salió muy oronda a delinquir como si nada😡