CORRIENDO A LA VELOCIDAD DEL AMOR

CAPÍTULO 17.

—¿Y bien, qué tenemos? —Dijo Kilian, acercándose a uno de los mecánicos y a Matt, quien también estaba en la pista.

—Dominic ha estado probando el auto, sin embargo, toma las curvas demasiado rápido. No frena, dice que es error del auto. —Exclamo el mecánico. —Pero a simple vista parece solo un problema de velocidad.

Kilian suspiró y tomo el comunicador para hablarle a su amigo.

—Dom, ¿me escuchas?

—Perfectamente. —Respondió.

—Te estás acercando a una curva, cuando sea el momento apretarás los frenos como si quisieras detener el auto, ¿de acuerdo?

—Entendido. —Respondió.

Kilian esperó unos segundos.

—Bien, Dom. —Dijo. —Hazlo ahora y recuerda, pisa el freno, hasta el fondo.

Dominic hizo lo que Kilian le explico, sin embargo, el noto que al coche le costaba frenar. Sobre todo en una maniobra brusca. Eso no solo era perjudicial, ya que perdían mucho tiempo en las curvas; sino que, en caso de haber un accidente, el coche no tendría la fuerza suficiente para evitarlo.

—Bien Dom, trae el coche aquí. —Dijo. —Lo revisaré.

Dominic hizo caso a lo que le dijo su amigo e ingresaron el carro en el taller y con ayuda de un elevador, lo subieron un poco. Kilian buscó un traje para no mancharse la ropa y luego, con la ayuda de una camilla con ruedas, se metió debajo del carro para verle los frenos.

—¿Qué piensas? —pregunto Dom.

—Hay un problema con los engranajes. —Dijo Kil. —No te preocupes, estará listo para las pruebas.

—¿Creen que nos irá bien? —pregunto Matt, haciendo que Dom lo observe arrogante y Kilian salga de debajo del carro.

—Claro que lo harán bien, ¿qué es esa pregunta? —pregunto Kil.

—Estoy tan nervioso. —Exclamo el chico.

—Estaba igual la primera vez que corrí. —Dijo Kilian. —Pero deben calmarse, todo saldrá bien y tal vez hasta consigamos nuevos pilotos.

***

Los días pasaron muy rápido. Kilian y Briana no se vieron por esos días dado que ella aún se estaba quedando en su apartamento, sin embargo, estuvieron hablando por celular. Kilian quería estar con ella y finalmente besar esos labios. Tal vez pueda hacerlo después de las carreras.

La primera carrera era en un circuito local, así que el miércoles mudaron los autos y el equipo necesario para comenzar con las clasificaciones al día siguiente.

Los chicos completaron las series y les fue muy bien, incluso quedaron entre los primeros puestos. Kilian se sentía orgulloso. Era la primera vez que veía aquello desde las cabinas con el resto del equipo y no desde dentro del coche. Se sentía feliz y satisfecho. Su hermano Brian y toda la familia estuvo presente y también Briana. Aunque quiso ver todo desde las gradas, prometió que la carrera final la vería desde la cabina junto a los demás.

Después de aquello, los carros quedaban guardados en los talleres del circuito, ya preparados para la última carrera que sería al día siguiente.

Esa noche, Kilian y Briana se despidieron, como ya era costumbre en los últimos días. Un abrazo y un beso de parte de él en la frente de ella. Sin embargo, esta vez, ella prometió que luego de la carrera de mañana, regresaría al apartamento con él. Al menos temporalmente.

Para sorpresa de todos, incluidos Brian y Charlotte, Zack apareció junto a la escudería que patrocinaba Vincent Gamberini, su ex mejor amigo. Kilian se sorprendió mucho por aquello, aunque él sabía que su sobrino estaba invirtiendo en una escudería rival a la suya, jamás creyó que sería capaz de complementarse con su ahora enemigo simplemente por venganza.

Kilian decidió ignorar aquello y concentrarse en lo que verdaderamente le importaba: su equipo. La última carrera de su mejor amigo y el inicio de la carrera de Matt Lanter. Si todo iba bien, habría más pilotos que querrán sumarse a la escudería “B&G Racing”.

Briana, como lo había prometido, estaba a su lado.

Dominic estaba extraño. Tanto Kilian, como Matt e incluso Briana, que lo conocía hace poco tiempo, se daba cuenta de que algo estaba mal con el rubio.

—Dominic. —Exclamo Briana, sacando al rubio de sus pensamientos. Él estaba de pie junto al coche, ya con su traje de piloto y el casco en la mano, mirando hacia la pista. —¿Estás bien?

—Sí. —Exclamo el rubio, abrazando a la pelirroja. —¿Sabes si Audrey vendrá?

—Está junto a Henry y Dana en las gradas. —Respondió ella. —¿Seguro que está todo bien?

—Dom. —Dijo Kilian, acercándose. —¿Qué ocurre?, por favor, si no estás para correr, dímelo. —Exclamo él. —Tu despedida puede esperar, yo…

—¡Estoy bien! —Dijo Dominic, sonriendo en respuesta. Aunque ninguno de los presentes lo noto convencido.

Kilian asintió y abrazo fuertemente a su amigo. Por alguna razón, ese abrazo lo sintió diferente. Eso le hacía revolver el estómago, pero decidió confiar en Dominic.

Briana decidió enviarle un mensaje a Audrey para pedirle que pase unos minutos a saludar a Dominic. El chico estaba nervioso y creía que, tal vez, la presencia de Audrey le haga sentir mejor. Apenas unos minutos después de haber enviado el mensaje, su mejor amiga apareció en los boxes. Briana sonrió, la abrazo y le explico la situación. Para su sorpresa, Audrey se acercó a Dominic, quien ya estaba en el auto, simplemente esperando la hora de la largada y le dio un pequeño beso en sus labios.

—¿Qué pasa contigo? —pregunto Audrey.

—No es nada. —Dijo Dom. —Es solo que… Tengo un presentimiento horrible en el pecho y…

—No, no Dom. —Dijo ella. —Bájate del auto. No correrás hoy. Hablaremos con Kilian.

—¡No! —Exclamo él. —Estaré bien. Te veré después de la carrera, ¿sí?

Audrey asintió aunque poco segura. Sabía que Dominic era muy terco y no cambiaria de opinión. Ella solo rezaba para que las cosas salgan bien y él pueda terminar la carrera.

Finalmente, ella se alejó del rubio, con dificultad, y se acercó a su amiga. Se quedaría a ver la carrera con ella, ya que si regresaba a las gradas, se perdería el comienzo.

Los autos largaron.

Kilian estaba sentado junto al resto del equipo. A través del comunicador comenzó a hablar con su amigo para darle indicaciones y preguntarle si todo estaba bien.

Mientras tanto, Briana y Audrey estaban junto a Brian y Charlotte. Audrey seguía estando preocupada por las palabras de Dominic y decidió contarle a Briana, quien quedo igual de preocupada que su mejor amiga.

—¡Dominic! —Grito Kilian, sorprendiendo a todos. —Dom, ¿me escuchas?

Todos observaron que Dominic iba a alta velocidad y estaba acercándose a una curva muy pronunciada. Debía realizar una maniobra de freno o de lo contrario se estrellaría. Pero el chico parecía no reaccionar.

—¡Dom, tienes que frenar! —Grito Kilian.

—¡El freno no funciona! —Grito Dom a través del comunicador y Kilian se quedó pálido. —¡Me estrellaré Kil, no funciona!

—¡Dominic por favor! —Grito el morocho. —¡Por favor, amigo!, ¡No puedes hacerme esto!

Matt.

Henry.