Sinopsis:
Riley Thompson...
Abogada y directora general, a los 20 años pierde la virginidad y su vida cambia de la noche a la mañana.
Ares Jackson-
Jefe tecnológico multimillonario, huye de lo que sea o parezca una relación, mujeriego e incapaz de amar a una sola mujer.
Ambos sufren pérdidas y reencuentros.
Misterios guardados para ser expuestos.
Nunca he sido de los que esconden lo que sienten, pero hasta un cactus que sobrevive a la sequía esconde su agua.
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El deseo y el amor, ¿cuál habla más fuerte?
Riley-Thompson
Escuchar el corazón de nuestros bebés me provocó una mezcla de emociones y ahí estoy llorando, fue entonces cuando el médico nos preguntó si queríamos saber el sexo de nuestros bebés.
Miro a Ares que se estaba secando las lágrimas y a mi lado, cogiendo una de mis manos, y le digo que sí al obstetra.
Obstetricia
-Felicidades papás, estáis esperando dos niños.
Ares
Para mí no importaba nada más en ese momento, sólo dar lo mejor de mí a mis hijos y a la única mujer que era capaz de amar.
Riley-Thompson
Salimos de la clínica, radiantes y eufóricos, fuimos al centro comercial a comprar ropa para nuestros hijos, Ares no podía dejar de comprar ropa y todo lo necesario, de la nada viene la vendedora con vestidos de lujo y le informé que estoy esperando dos varones. Me mira confundida, hasta que oigo la voz de mi hermana.
Raquel Thompson
Estoy en una tienda del centro comercial comprando unos artículos y ropa para mis hijas y veo que la vendedora le lleva las piezas a otra mujer, me acerco a la vendedora, diciendo que estoy esperando los vestidos y veo a mi hermana.
-Pero mira quién apareció, ¿todavía me sigues, Riley?
Riley Thompson
-Hola, Raquel, enhorabuena por tu embarazo.
Raquel Thompson
-Si no me sigues, ¿qué haces aquí?
Ares
Mi amor, ¿tomamos los carros?
Hablo mirando a Riley, hasta que oigo la voz de otra mujer.
Raquel Thompson
Mira si no es el hombre más codiciado de todo Chicago, que patético Riley, no me digas que le diste el golpe en la barriga.
Ares ten mucho cuidado con mi hermana, ella se muestra pura, pero solo piensa en ella misma, si dejó a Angus, sin siquiera decir que se acabó.
Imagina lo que puede hacerte.
Ares Thompsom
-Escucha atentamente lo que voy a decirte, Rachel.
Desde el momento en que empezaste a hablar, cada palabra parecía ser directamente para ti, ni siquiera sabes lo que siento por Angus por haberse involucrado contigo, no creas que el hecho de ser idéntica a Riley, eso la hace algo en común contigo, porque desde la cara hasta el último dedo de su pie, no se puede comparar contigo.
Decirte que me pareces fea, sería una mentira, porque naciste idéntica y aún te esfuerzas por parecerte a la mujer que amo, pero te miro y sólo puedo sentir pena por ti, por no saber valorarte y herir a los que realmente te quieren.
Incluso tratando de ser como Riley, fracasas en extremo, lo que la hace ser quien es siempre ha sido su pureza, esto nunca se lo podrás quitar.
Raquel Thompson
-He visto que te han embrujado y estás más ciego que Angus. Nunca serás feliz.
Riley Thompson
Prefiero el silencio al ruido, escuchar a Ares defendiéndome, diciendo todo lo que ve en mí, constriñe mi corazón hasta el punto de desearlo sin medida.
Todavía no puedo entregarme del todo,no porque tenga dudas de que sea el hombre que ha entrado en mi vida de forma arrolladora y que ha despertado en mí deseos que nunca había sentido, sólo necesito ver en mí la mujer que soy a su lado y dejarme guiar por los instintos a los que le deseo, le deseo tanto que se me aprieta el corazón, me da miedo.
Ares Jackson
Pago la compra y dejo todo en la tienda para que el transportista lo lleve a mi casa, ya que también compramos muebles y una gran cantidad de productos para nuestros hijos.
Ya en el coche hacia el lugar de la sorpresa que hice, Riley me mira y me pregunta si puedo esperar a que esté lista para tenerla de nuevo por completo, paro el coche y le cojo la mano y la miro directamente a los ojos y le digo:Durante tantos años, durante tanto tiempo, fui todo menos un hombre digno de ti, pero cuando se trata de amor las cosas y las personas se vuelven diferentes, el miedo me llegó cuando la perdí, después de nuestra primera noche.
Pero aquí, contigo, me libero de todo deseo, no tengo prisa, aunque mi carne esté sedienta, aunque mi deseo arda como el fuego, sigo queriéndote sólo si es alma y cuerpo y no sólo tu cuerpo, si es para tenerte sólo en mis ojos y la única parte de mí que te toca, son tus labios, te seguiré queriendo.
Riley-Thompson
Escuchar tantas palabras de amor de su boca ha sido una tortura, lo deseo con la misma intensidad que necesito respirar, mi cuerpo ya no puede responder a mis órdenes sino a su voz, el más mínimo roce de él sobre mí, aunque sea por sus declaraciones es una tortura, mi corazón arde y arde por su amor.