René y Antón, podría decirse que nacieron uno para el otro. pero por decisiones personales, se separaron por un corto periodo de tiempo, el la amo desde que ella estaba dentro del vientre de su madre, es solo que nunca lo dijo ante todos y ella lo amo y sin dudarlo se lo dijo en cuanto lo descubrió, ambos hicieron promesas, pero el fue el primero en romperla, por lo que ella decidió hacer lo mismo, ¿sera que en verdad su destino siempre fue amarse?
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CAPÍTULO 16
ANTÓN
Cuando desperté, fui al baño y luego me preparé para hacer ejercicio en el gimnasio de mi padre. Después de una hora en el gimnasio, regresé a mi habitación, tomé una larga ducha y me preparé para salir a ver departamentos.
Pero antes debía desayunar con mi familia y contarle a mi mamá que me quedaré con mis amigos en un departamento. Sé que no le gustará, pero ella entenderá y me apoyará como siempre lo hace.
Al bajar, todos ya estaban en la mesa: mis papás, los gemelos Arthur y Dante, Grecia. Me senté junto a los gemelos y comenzamos a desayunar.
—Hijo, ¿cuánto tiempo te quedarás tú y tu abuelo? —preguntó mi padre.
—Todas las vacaciones, pero quería comentarles algo —informé.
—Dinos, ¿qué pasa? —dijo mi mamá.
—Un amigo vendrá con el abuelo y ellos quieren un espacio para ellos, así que buscaré un departamento para quedarme con ellos ahí —respondí y ella me miró con cara de pocos amigos.
—Hijo, ¿por qué no pueden quedarse aquí? —cuestionó mi mamá.
—Porque ellos me lo pidieron, quieren un departamento donde estar libremente. Además, les gusta la calma y estos dos son todo menos calmados —revoloteando el cabello de mis hermanos y ellos me muestran sus lenguas.
—Lo aceptaré, pero debes venir a diario a verme o iré yo —dijo mi madre, Ángela.
—Por supuesto, no podría ser de otra manera —le di un beso a mi madre y al final del desayuno salí a buscar departamento y luego iría a buscar un auto nuevo, pues estoy usando el de mi padre y no quiero que en una emergencia él no tenga su propio auto disponible para salir.
Después de ver cinco departamentos, encontré el adecuado: uno con cuatro habitaciones grandes, una sala grande y una cocina igual de grande. Además, cada habitación tiene su propio baño y hay un pequeño bar. También tiene una excelente vista y lo mejor de todo es que viene completamente amueblado y listo para ser ocupado. Por supuesto, aún no me mudaré, lo haré cuando lleguen mis amigos.
Con el tema del departamento solucionado, decidí ir por mi auto. No quería un auto demasiado ostentoso, solo quería un deportivo, pero no quería ir a una concesionaria de autos, la verdad es algo muy tedioso.
Con los contactos de mi familia, podría tener el auto que quisiera en la puerta de mi casa, pero yo quiero algo diferente. Un viejo amigo me recomendó un taller donde tienen buenos autos deportivos.
Cuando llegué, pedí ver lo que tenía razón. Había muchos modelos deportivos, desde Ferrari, Lamborghini, Maserati, Aston Martin, Porsche, Rolls Royce, Bentley, Jaguar, excelentes autos.
—Hola, ¿en qué puedo ayudarte? —se acerca un empleado.
—Quiero un auto deportivo, ¿cuál me recomienda? —fui directo.
—Todos son muy buenos, y si quieres alguna modificación, aquí se las hacemos. ¿Vas a competir? —preguntó el encargado.
—No, el auto es para mi uso personal —respondí.
—Bien, entonces sigamos por aquí, hay unos que te pueden interesar —seguí al empleado y de todos los que me mostró, escogí un Aston Martin DB11 2021 blanco.
–Es un buen auto, puedes probarlo en la pista si quieres –me informa el empleado.
—Sí, quiero probarlo —respondí y el empleado le indicó a otro que me llevara a la pista y me diera las llaves mientras él arreglaba el papeleo para poder llevármelo de inmediato.
Tuve que llamar a mi padre para que enviara al chófer por el suyo, así que mientras esperaba que el chófer llegara y que el papeleo estuviera listo, di un par de vueltas en la pista.
Es un buen auto, al conducir no se siente nada, los asientos son cómodos y me gusta además que caben cuatro personas y no está mal. No soy de carreras, así que no quiero ninguna modificación. Este auto es perfecto tal cual es.
Después de dar un par de vueltas, estacioné el auto y fui a pagar y a firmar en la oficina. Después de eso, podía llevarme el auto a casa, pero algo, bueno alguien, me llamó la atención. Llegó como si estuviera en su casa y saludó muy feliz a todos. Era el novio de René. Quizás pueda atropellarlo y decir que fue un accidente, así mi René quedaría libre.
Aunque era buena idea, la saqué de mi cabeza y lo seguí con la mirada hasta llegar a uno de los talleres de donde sacaron un magnífico Koenigsegg Agera RS 447 negro. ¿Qué hace un chico de 18 años con un auto así?
—Listo Jove, ya se llevaron el auto que trajo y aquí está todo lo de su nuevo auto —me informa el encargado.
—¿Conoce a ese joven? —pregunté mientras tomaba las cosas que me entregaba el encargado.
—Por supuesto, es Juanjo. Viene seguido. Su padre le regaló ese auto y estuvieron haciéndole unas modificaciones especiales para él. Viene seguido, a veces con su novia. Su auto y su moto las deja aquí cuando no los va a usar —me informa el encargado.
—¿Y a qué viene? —por supuesto, aparte de traer su auto.
—Le gusta la mecánica, de hecho algunos fines de semana nos echa la mano y nosotros le enseñamos muchas cosas. Creo que es un gran mecánico, pero estudiará Administración de Empresas y Finanzas por sus padres. Es una lástima, tiene mucho talento para los autos —comenta el encargado.
Volví a mirar a tal Juanjo y al parecer se dio cuenta de mi presencia porque se acercó hasta donde yo estaba con el encargado.
—Hola Patrick —saludó al encargado y luego se dirigió a mí.
—¿Eres el hermano de Grecia, Antón? —preguntó Juan.
—Sí, nos conocimos anoche en casa de René —respondí serio.
—Sí, te recuerdo —dijo Juan.
—¿Y René?, ¿no vino contigo? —pregunté, ya que ella no me responde el celular. Quizás su novio me hable sobre ella.
—No, está con su hermana Blanca. Cuando ellas se juntan, no la veo por dos días —dijo Juan.
—Entiendo. Bueno, ya debo irme —me despedí con un apretón de manos y caminé hasta mi nuevo auto, subí en él y arranqué antes de atropellarlo, porque eso era lo que quería hacer en ese momento.